Me pregunto si para legislar la media veda se emplea medio cerebro o si se trata simplemente del desprecio habitual por la práctica de la caza y la coordinación entre autonomías. Sinceramente, preferiría lo primero.
No seré ni el primero ni el último en criticar la política medioambiental descoordinada y aparentemente arbitraria de las autonomías; pero es que en lo referente a la caza se riza el rizo, compañero.
Ya sé lo que piensas: "Aprovechando el descrédito –nunca mejor dicho– que están sufriendo las autonomías, te unes a la tropa de linchadores y a cuenta de la caza te rascas los parásitos en la corteza del árbol que se inclina al debilitarse su raíz (léase su economía)".
Pues no. Aunque hoy me pican las pulgas que no veas, da la casualidad de que no me mueve la política sino la administración y su carencia de sentido común. Para demostrarlo, lo mejor es narrar un hecho y, una vez conocido, recurrir al modelo de "pregunta de juzgado".
Un hipotético ejemplo:
Media veda. Caminamos en una zona cercana al Ebro pero fuera del área de protección del soto. Un par de tórtolas turcas cruzan delante a distancia de tiro. ¡Quieta la escopeta, que no son especie cinegética en esta comunidad! Las seguimos con la vista... A 50 metros sobrevuelan las aguas del río y ya están en provincia vecina. No pasan ni dos segundos cuando vemos una de ellas caer abatida y la otra dar media vuelta mientras nos llega el sonido de dos disparos. La "viuda" entra de nuevo y de nuevo la escopeta quieta.
Y es que a tan sólo 200 metros desde donde nos encontramos, la pálida "Streptopelia decaocto" se puede abatir sin cupo –según me comenta mi amigo y compañero de foro Skeet– y además, eso de convertir los sotos en reserva creo que no se ha aplicado en las tierras del "reino" vecino... Pues estamos buenos... No seas malo y no pienses que es envidia. Lo que me corre ahora por el cuerpo es peor aún y nace en ese lugar del vientre del que surgen los humores cuando tenemos la certeza de que una o varias personas revestidas de autoridad están cometiendo un desatino.
Las preguntas:
¿Es muy diferente la situación poblacional de la turca en cada una de las dos regiones limítrofes?
¿Por qué una comunidad revela tanto escrúpulo hacia la caza de la tórtola turca y otra tan poco?
¿Qué estudios avalan esas normativas?
¿No habíamos quedado en que las especies alóctonas eran el mismísimo demonio?
Entonces, ¿cual es el interés de esta especie alóctona?
¿No es cierto que la tórtola turca ha colonizado áreas rurales desplazando a la más apreciada tórtola común?
¿No ha acabado esto de dar la puntilla a nuestras queridas "palomillas" hasta resultar su presencia muy infrecuente en algunas zonas?
¿Por qué, siendo así, a un lado del Ebro no hay cupo para la común y está prohibido cazar la turca?
¿Qué ganamos con establecer cupos de tórtola autóctona al otro lado del río si de este lado se pueden hacer perchas sin medida cuando ni siquiera tenemos para tal?
Por otra parte, me sorprende todos los años que en la Ley de Vedas de mi región los estorninos pintos –y no los negros– aparecen como especie cinegética en media veda. ¡Tócate el bolo, Manolo!
Si alguien conoce al estornino pinto como especie sedentaria en las tierras medias del Ebro, que me lo diga. Estoy por ver alguno en esta época y que yo sepa, si bien sus colonias estables se extienden; por el momento en esta comunidad es una especie que se establece sólo de invernada y únicamente se conocen nidificaciones en zonas de Cataluña y la Cornisa Cantábrica... Terreno abonado para que la autoridad se lleve por delante a cualquier incauto al que pillen con un estornino negro en el morral. ¡Vamos hombre! ¿A quien se le ocurre atizarle a un estornino negro? ¡Con el peligro que corre esta especie!... En fin, demencial.
Siendo los estorninos negros tmuy abundantes y causantes de daños en frutales y presentes en el tiempo de la media veda ¿no sería más fácil simplificar y permitir la caza de ambos estorninos en vez de caer en la extravagancia de autorizar expresamente la caza de un ave que no tenemos en verano o cuya presencia es anecdótica?
He cometido antes el error de poner a la tórtola turca y a la común como ejemplo de esa torre de babel que son nuestras autonomías –que de vez en cuando forman comisiones interregionales para tratar de resolver algunos asuntos de este tipo que se saldan con comunicados de prensa tan redonditos, pintureros y vacíos de contenido como la cabeza de la Barbie– pero podría seguir cuestionando y aplicando algunas de mis preguntas –especialmente la última– a otras especies que cazamos en la media veda, con especial atención a la codorniz.
Creo que no son necesarias más interrogaciones; con esto queda clara la falta de criterio. No me refiero a UN criterio común a todas las regiones (¡eso ya sería la pera, vamos!) sino directamente a un criterio individual ajustado al sentido común y no a los paraceres ni al vicio de legislar; así que lo mismo que digo de las turcas y las codornices digo de los patos y de cualquier otra ave migratoria, que a pesar de ser especies de gran movilidad geográfica se pueden cazar allí sí y aquí no.
Esperanza en que estas cosas se subsanen, no tengo ninguna. Si no se resuelve, por ejemplo, que entre juzgados de distintas partes del Estado empleen sistemas informáticos comunes para saber que quien asiste a un juicio en Asturias está buscado por el asesinato de una niña en Sevilla, ¿qué podemos esperar en asuntos de menor relevancia?
Me cuentan –de todo crédito– un incendio en la linde de Navarra y Aragón en el que las mangueras de unos bomberos no valían para las motobombas de otros porque, siendo de comunidades distintas, las bocas y los empalmes eran diferentes.
¿Quien va a parar este despropósito?
Esa bendita coordinación que ansiamos en tantos aspectos del ámbito administrativo sólo la encontramos en una institución oficial: Hacienda.
¡Ay! ¡Si el mismo interés que nuestros próceres de la política tienen en el dinero lo tuvieran en los que lo apoquinamos!... Otro gallo cantaría!
