(Foto de archivo)
Muchas veces hemos hablado de que el mundo de las armas va varios pasos por detrás de otras culturas, al menos en lo que a mercadotecnia se refiere. No hace falta tener un conocimiento profundo del medio, para saber que el comercio electrónico apenas ha llegado a su adolescencia en el nicho de las armas y relacionados.
Este retraso provoca una oportunidad para aquellos que han sabido pelear durante años por un puesto en el podio, pero como en todas las cosas de la vida, lo nuevo también es una oportunidad para que lo peor de la sociedad haga caja mediante puertas traseras. ¿Han leído alguna vez la típica noticia de una tienda online que ha vendido cientos de productos a coste 0 por un error en el sistema? Pues esa "oportunidad" ha hecho que algunos individuos se especialicen en encontrar la manera de saltarse a la torera las condiciones de las empresas de comercio electrónico. Pero, ¿qué pasa cuando es el vendedor el que se aprovecha de esas puertas traseras?
En ninguna tienda Amazon de Europa se puede vender una carabina de aire comprimido, ya que casi todas tienen entre 7,5 y 24 julios y, como bien especifican las políticas de Amazon, “sólo se permite la venta de armas de aire comprimido hasta 3,5 julios” -es decir, un juguete-. Si hacemos una búsqueda en www.amazon.es con “carabina Gamo” o “carabina Norica”, podemos comprobar que hay empresas que venden este tipo de armas en la plataforma. Spain is different?
Lo que está claro es una cosa: esos datos están falsificados voluntariamente para conseguir vender las carabinas en Amazon, puesto que de exhibir la potencia real el mismo algoritmo de la plataforma retiraría automáticamente los productos. No tenemos ninguna duda al afirmar que todas y cada una de estas carabinas tienen una descripción falsa que cuenta con el beneplácito del vendedor.
¿Y si un padre desconocedor de este mundo compra la carabina para su hijo? ¿dónde está la responsabilidad del vendedor? ¿dónde está su ética? ¿merece la pena hacer más ventas a costa de jugar con la seguridad del comprador?
Normalmente dedicamos este editorial a denunciar las numerosas afrentas que sufre el sector armero desde el exterior: el acoso de algunos medios de comunicación, decisiones políticas injustas, movimientos federativos extraños... pero a veces el diablo está también en casa y en este caso se llama "gente sin escrúpulos" y una cara dura capaz de mentir en la verdadera potencia de un arma.
¿Qué va a pasar si se repite la muerte de un niño a manos de otro niño por disparo de una carabina, tal como ocurrió en Navarra hace 2 años? ¿quién se va a hacer responsable? Nosotros os lo decimos: los responsables serán los impresentables que, por ganar 2 duros de más, se están jugando el prestigio del mundo armero. Y claro, dentro de unos meses ocurrirá una desgracia, el político de turno decidirá promover una campaña en contra de las “letales carabinas de aire comprimido” y de golpe y porrazo veremos nuestros derechos mutilados una vez más.
Para tranquilidad de nuestros lectores y como no podía ser de otra manera, Armas.es ya ha interpuesto una denuncia ante la Guardia Civil, y es que no se puede permitir que haya otra muerte inocente y el sector armero se coma el marrón de unos irresponsables que, a buen seguro, se escudarán en la conocida excusa de: “yo no lo sabía señor juez”.