El año pasado asistimos a una celebración de la historia armera de la mano de la familia Unceta, en la que estuvieron presentes algunos de los representantes más importantes de la comunidad armera. Hoy podemos decir que, un año más, el encuentro ha sido un rotundo éxito.
Los lectores asiduos de Armas.es saben que en este periódico no nos faltan palabras que dedicar a la profunda historia armera española. Y si se leen pocos elogios y recuerdos en otros medios de comunicación no es ni mucho menos por falta de interés histórico, sino debido al maldito ostracismo al que es sometida nuestra cultura. Nos parece tremendamente injusto el estigma que debemos llevar hoy en día los apasionados de las armas. Una cruz impuesta por lo políticamente correcto, que intenta disfrazar a usuarios, coleccionistas, deportistas y demás perfiles del sector, de auténticos parias.
Por todo esto, en Armas.es no sólo estamos satisfechos de poder asistir un año más al encuentro en la casa de la familia Unceta, sino que orgullosamente os hablamos en este artículo sobre esta celebración de la historia armera española, en la que no se echó de menos ningún asistente importante, acudiendo además con sus respectivas parejas.
Lo primero que queremos destacar es el maravilloso trato recibido de parte de la familia Unceta, que recibió a todos los asistentes con la calidez y cariño que ya es habitual. Como siempre percibimos una gran cercanía, algo que en gran parte fue mérito del trabajo de Isabel Andía y Carmen Unceta. Por supuesto también queremos agradecer a Eduardo Unceta y a su hijo Borja Unceta el que esta jornada se haya podido celebrar por segundo año consecutivo.
Representando al coleccionismo de armas español estuvieron presentes ilustres figuras como Josep María Abad i Ribalta, Manuel Estirado Bas y Francisco Fuentes León, co-autores del libro Pistolas y Subfusiles de la República: Producción de Guerra e importantes coleccionistas del país. También pudimos disfrutar de la presencia de Antonio Giner, propietario de una de las colecciones de Astra más importantes de España (que trataremos con más profundidad en breve). También es de destacar la presencia de Jesús Prieto, propietario de Cantábrico Militaria y su hija Amaya Prieto. Además, como representante del coleccionismo de armas internacional pudimos contar con Leonardo Antaris, un coleccionista norteamericano realmente enamorado de nuestra historia armera y autor de un libro sobre el damasquinado de armas que analizaremos en un futuro próximo (entre otras cosas).
En cuanto a medios de comunicación y organismos relacionados con el sector, debemos señalar la asistencia de Mavi Gutiérrez por parte de Armas.es y la de Daniel Álvarez como representante de ANARMA.
Por último y no menos importante, hemos mencionado la presencia de la familia Unceta como representantes de la fabricación de armas en nuestro país, pero no podemos olvidar la inestimable aportación de Rudi Borchers, propietario de una de las empresas más importantes del sector de nuestro país (Borchers SA).
De entre todos los temas tratados en la jornada cabe destacar un repaso profundo al sector: su estado actual, su futuro, las dificultades y retos a asumir por sus integrantes... Sin embargo, hubo un tema que copó la mayoría de la atención de las mesas: las colecciones de armas y su futuro.
Actualmente el coleccionismo de armas en España tiene que enfrentarse a duras restricciones que van desde una burocracia exageradamente complicada, hasta la modificación / inutilización de piezas históricas (algo que en el extranjero se ve como una auténtica barbarie). Incluso la herencia de una de estas colecciones es un verdadero laberinto legal para los depositarios (algo de lo que hemos hablado en otras ocasiones). Es por eso que no es raro ver como algunas de nuestras mejores colecciones de armas son adquiridas por coleccionistas extranjeros, que no sólo devuelven al propietario parte de lo invertido, sino que aseguran su conservación.
A pesar de que no podemos dejar de alegrarnos de que las armas españolas se conserven en manos de alguien que las valora, es una verdadera pena ver como el patrimonio cultural / histórico de nuestro país abandona nuestras fronteras, por motivos meramente políticos. ¿Por qué no se conserva nuestra historia armera debidamente en museos? ¿quién decide en este país que las armas no pueden ser piezas históricas o incluso artísticas? Al final, no podemos dejar de pensar en el expolio al que ha sido sometida la historia egipcia y ver que, de alguna manera, no estamos tan lejos de este ejemplo...
Es una verdadera pena este problema al que tenemos que enfrentarnos en el mundo armero, pero por cerrar con una nota positiva nos quedamos con la comunión de algunas de las piezas del sector que pudimos ver en la jornada: fabricantes, distribuidores, medios, asociaciones y coleccionistas. Puede que no sean tiempos amigables para la cultura de las armas... pero aquí seguimos: fuertes y con ganas de crecer en la sociedad española.
