Más de un centenar de municipios de las provincias de Sevilla, Málaga y Cádiz forman parte ya de un área de reserva genética del jabalí en la que se va a procurar la recuperación de la pureza genética del jabalí y rescatarlo como especie silvestre.
Esta medida, publicada en el Boletín Oficial de la Junta de Andalucía, está motivada por la existencia de una población de cerdos asilvestrados que en las poblaciones afectadas se están hibridando con los jabalíes salvajes.
En otras latitudes de nuestro planeta este fenómeno del cruce de especies de suidos constituye un hecho histórico al punto de que en algunas regiones del mundo han prevalecido y colonizado las tierras especies que son el resultado de cruces de razas domésticas con salvajes cuando no sencillamente cerdos asilvestrados.
Esto es precisamente lo que se quiere atajar con una serie de normas que tienen en cuenta otros efectos nocivos no menos importantes y que también se quieren prevenir, tales como riesgos sanitarios y deterioro del ecosistema, la ganadería, la agricultura y el medio urbano.
La resolución tiene carácter temporal y estará vigente hasta que finalice la temporada de caza 2015-2016.
Según la Junta de Andalucía, “La conservación de la fauna silvestre en el medio natural es una prioridad en la política medioambiental de la Junta de Andalucía. Las enfermedades de la fauna silvestre y en especial las de alto poder de difusión pueden poner en peligro el valor ecológico y cinegético de la fauna silvestre.
Así, “se han puesto en marcha una serie de actuaciones encaminadas a controlar y erradicar estos ejemplares híbridos que se encuentran en libertad en el medio natural, ya que carecen de interés cinegético y ganadero. La presencia de este animal supone además un riesgo importante para el desarrollo de la caza y la ganadería, ya que pueden convertirse en el eslabón de enlace de la cadena de transmisión de enfermedades. Por todo ello, la eliminación de esta especie se considera una medida básica para el aprovechamiento cinegético y ganadero y la optimización de los recursos presentes en los municipios afectados. Con ello, además, se facilita a medio y largo plazo la reintroducción del jabalí en ciertas zonas del área de emergencia donde su presencia es prácticamente inexistente”.
Los medios de captura y las modalidades de caza contemplados podrán ejercerse sobre cerdos asilvestrados en terrenos cinegéticos y no cinegéticos y consistirán tanto en capturas en vivo como con armas de caza.
Para atraparlos en vivo se emplearán capturaderos debidamente regulados y controlados. La caza de abate se autorizará con armas de fuego y de cuerda (arcos y ballestas) en recechos, aguardos diurnos y nocturnos, batidas, batidas de gestión y caza en mano.
Los animales abatidos o capturados sólo podrán destinarse a autoconsumo cuando hayan sido sometidos a todos los controles sanitarios en un local de reconocimiento autorizado.
En caso de que se comercialicen para su consumo humano deberán someterse a los controles sanitarios oficiales en un establecimiento de manipulación de caza silvestre, legalmente autorizado.
Vía: Pentaxeros