El arma que más se ve en las tiradas de Carabina Ligera es la Brno 452. Primero porque el tirador la compra por su alta relación calidad-precio y segundo porque una vez la usa ve que el arma es perfectamente capaz de hacer 600/600 con el blanco de pistola. A veces se ven en cancha otras marcas; son notablemente más caras y no son más precisas ni aseguran mejores resultados.
La munición para tirar en Carabina Ligera no precisa ser específicamente de alta gama. Es cierto que a veces vemos buenos tiradores hacer grandes tiradas con Eley Tenex y similares. Siempre he pensado que se debe más a una preferencia del arma que usan que a otra cosa. Ya sabemos que las armas del .22 lr, y sobre todo las largas, te dicen qué munición les va mejor y por tanto podría ser que una Brno tirase mejor con Tenex. Pero no es necesariamente así. De las tres unidades con que competí, una no iba realmente bien con nada, otra tiró el 99 % de sus tiros con Lapua de bote y la otra ya venía de un magnífico tirador que no usaba otra cosa que la Tenex y no admitía la Lapua de bote; yo la hice ir con R-50 cuando no encontraba un lote de Tenex que me gustara. Cada arma te dice lo que quiere y no hay que tener perjuicios. Uno de los tiradores que más me apretaron tiraba con CCI ...
Cuando empecé me dijo un extraordinario tirador que metiera los cartuchos uno a uno en recámara y que no los subiera del cargador ciclando el cerrojo porque la punta, de plomo blando, en el segundo caso puede perder parte de metal y no ir igual. No es una tontería; le hice caso y nunca lo lamenté. Seguir esa política te complica un poco las cosas porque los movimientos de la mano han de ser muy precisos y todo tiene que estar muy en su sitio en un espacio muy reducido. Por supuesto, no se mira dónde va la mano; ya no porque la memoria muscular lo hace inncesario sino porque al ojo no le conviene cambiar de distancia. Esa manera de cargar se puede cambiar cuando con el paso de los años ya no aguantamos tanto tiempo la postura, la vista se cansa y se hace necesario tirar más rápido, etc. Entonces, asumiendo pequeños daños a la bala, metemos cinco en el cargador y las ciclamos; a esas alturas se compensa el pequeño daño causado al plomo con una superior calidad personal de tiro.
Y por cierto, aunque se tire munición a granel conviene meterla en cajas usadas, porque es muy fácil descontarse y pegar un tiro más o menos. Si pegas uno más, te dan el peor tiro; eso te puede perjudicar en desempates si el peor no es un "once". Si pegas uno menos, es cero no visto y te hundes en la clasificación. Normalmente los clubs que aún hacen tiradas de Carabina Ligera ponen seis blancos, a razón de diez tiros por blanco. Algunos, cuatro a quince. La mejor recomendación es tirar los diez de la columna de una caja de cincuenta. Además esos diez son hermanos, mientras que los cinco en fila son de distintos caños y pueden ser dispares. Esto en pistola no se nota pero en arma larga sí.
Posturas hay para todos los gustos. Básicamente veremos dos: o completamente aplanados en el suelo o con la rodilal del lado fuerte doblada y el cuerpo ladeado. Como en casi todo en el tiro, nada está escrito en piedra y se elige lo que mejor le va a uno. Mi postura es la primera, lo que no es heterodoxo si uno observa que las puntas de las botas de tiro son cuadradas para que el pie se quede plantado. Pero es cierto que la gran mayoría tira de lado. Ventajas e inconvenientes hay en ambos estilos. Un tirador aplanado no puede tener barriga, y si la tienes te acomodas mejor de lado. Pero la primera postura no te deja bajar tanto el antebrazo, con lo que sufre más el codo. En lo que se refiere estrictamente a la postura, cada uno ha de elegir la que más le acomode. Pero sí es cierto que el tener los dos pies apoyados de punta en el suelo te permite subir y bajar el tiro con sólo jugar con el ángulo del pie; esto es mucho más práctico que buscar la altura correcta con los brazos y torso.
Ya dije que para tirar en Carabina Ligera, como para cualquier modalidad de tiro de arma larga tendido, hace falta una cantidad de accesorios esenciales a los que se pueden añadir otros opcionales. Entre los esenciales tenemos la correa, el enganche y el guante. Obviamente entre los tiradores de primera línea se ve la correa Anschutz o similar, exactamente igual a la que se usa en Match, 3X40, 300 mts, Palma, etc. Las específicas de competición tienen un rasgo muy importante y es el diseño en ladera para la zona donde toca con el brazo, de modo que no deja huecos cuando se ciñe y hace ángulo desde el brazo hasta el enganche. Es un poco cara, pero la tienes para toda la vida. También he visto tirar con correa militar de lazo y hebilla; nada que objetar. Incluso he visto (y alguna vez usado) la correa tradicional con más vuelo y ceñida en su extremo superior como la de competición, lo que en inglés llamamos "hasty sling"; funciona sorprendentemente bien pero te modifica en punto de impacto si ya tienes el arma puesta en tiro con otra correa.
Pero lo que de verdad marca una diferencia es el enganche correa-arma. Si se usa correa tipo Anschutz, el mejor sistema es el diseñado por Calvete, consistente en una pletina triangular por la que pasa la correa y tiene en el vértice frontal un hueco donde se engancha un pitón que se atornilla en la caña precisamente donde va el tornillo grande, ese que está a unos 15 cmts del schnabel. El pitón ejerce también de tope de mano y alza unos cmts, justo para meter la mano enguantada al ceñir la correa.
Para guante, se ve desde el de estricta competición hasta el de ir en moto. Cualquiera es bueno, y el objetivo es que te mate las pulsaciones y no las transmita al arma. Si coge uno el rifle sin guante verá cómo el punto salta del pie de negro al siete o incluso ocho en vertical a cada pulsación.
El catalejo ha de ser de ángulo. Cansa mucho menos el cuello y se usa sin mover la cabeza, de modo que cuando tiras con el ojo derecho miras con el izquierdo, que debe estar a escasos cmts del ocular. Todo está orientado a que no se modifique la postura. No hay que preocuparse por si tocas sus patas con el antebrazo porque realmente no lo mueves.
Además de los accesorios mencionados, es interesante llevar la propia estera y un felpudo. No todos los clubs tienen esteras y, si las hay, a veces más vale no tumbarse en ellas. Una estera de camping es barata, transportable y dura media vida. Dos pesos para no se levanten las esquinas inferiores por el vicio de estar enrolladas en casa te simplifica mucho la tirada. El felpudo le da cariño al codo, que a pesar del kevlar de la chaqueta sufre, y te levante bastante el tiro, cosa que se agradece en la mayoría de los campos.
La chaqueta es algo que se convierte en realmente necesario cuando ya estás en los 590 o así, porque ahí es donde realmente compites. Muchas veces, como ya he dicho en varias ocasiones, los puestos se juegan en los últimos 3 o 4 puntos. Las hay para todos los gustos, mejores y peores, europeas y americanas. Pero de todas las ventajas que aporta la chaqueta la que enseguida nota el tirador de Carabina Ligera es el enganche que llevan en el brazo para que no se baje la correa de la parte superior del brazo, ya que se apoya en la zona del tríceps y tiende a caer. Si el tirador no tiene una, ha de hacerse algo en la prenda que use para sujetar ahí la correa.
Se podría hacer otro artículo, o serie de ellos, acerca de la técnica de tiro. Pero aquí quiero sólo que el neófito aprenda que la carabina no se sujeta como una pistola; eso hace que se retuerza hacia dentro. El pulgar debe estar en línea con la aguja, lo que soluciona muchos tiros raros que uno no sabe porqué ocurren. Es algo elemental, tanto como tirar de la cola del disparador con la primera falange, para empezar bien.
Saludos.
JW.