Los silenciadores de armas de fuego siempre han despertado un gran interés entre los aficionados a las armas. La posibilidad de reducir el sonido de los disparos permite a sus usuarios disponer de un arma silenciosa, un arma para actuar con sigilo y seguridad.
Los silenciadores de armas de fuego siempre han despertado un gran interés entre los aficionados a las armas. La posibilidad de reducir el sonido de los disparos permite a sus usuarios disponer de un arma silenciosa, un arma para actuar con sigilo y seguridad. Ahora bien, ¿es legal el uso de silenciadores en armas de fuego?
Silenciador incorporado a una Beretta 92.
Antes de analizar la legalidad o ilegalidad de los silenciadores, conviene tener claro qué debemos entender por silenciador. En este sentido, según el Diccionario de la Real Academia Española de la Lengua, un silenciador es “un dispositivo que se acopla al tubo de salida de gases en algunos motores de explosión, o al cañón de algunas armas de fuego, para amortiguar el ruido". Por lo general, estos utensilios construidos con aleaciones de metal suelen presentar una forma cilíndrica, con unas dimensiones variables en función de su forma y empleo. Como queda claro en la definición de la RAE, el principal objetivo de un silenciador en armas de fuego es suprimir o amortiguar, en la medida de lo posible, el fuerte sonido provocado por la detonación posterior a cada disparo.
Silenciador incorporado a un rifle Barrett M82.
La eliminación de este sonido excesivo se consigue gracias al particular diseño de estos supresores. En este sentido, el interior del silenciador está formado por diversas cámaras de aire por las que son expulsados los gases originados tras cada disparo. De esta forma se consigue reducir notablemente el ruido generado tras cada detonación. Ahora bien, el diseño y la posterior aplicación del silenciador al arma (normalmente de forma enroscada) no son los únicos elementos que intervienen en la deseada supresión del sonido. Y es que el uso de munición subsónica es un factor clave para conseguir silenciar el arma. Tanto es así, que sin el empleo de este tipo de munición, el silenciador resulta prácticamente ineficaz.
Vista interior de un silenciador.
La munición subsónica es aquella que no rompe la barrera del sonido y que, por lo tanto, vuela a una velocidad inferior a 330 m/s. El proyectil utilizado en la munición subsónica suele presentar un peso mayor al de la munición original, por lo que el tirador debe tener en cuenta que la caída también de la bala también es mucho mayor. Entre los cartuchos de munición subsónica más conocidos se encuentran el .22LR, el .32 ACP, el .380 ACP, el .45 ACP, y el 9mm Parabellum (con puntas de 147-158 grains). Con la suma de estos dos elementos (munición más silenciador) el usuario conseguirá suprimir en gran medida el sonido de su arma. Pero, ¿podrá utilizarla con total normalidad?
Ciertamente, el empleo de silenciadores en armas de fuego es uno de los temas más peliagudos dentro del sector de las armas. Para no incurrir en ilegalidades y problemas con la justicia, antes de utilizar cualquier tipo de silenciador es imprescindible repasar la legislación vigente en cada país. Así, en algunas naciones, el empleo de estos supresores está reservado exclusivamente a las fuerzas del orden y los cuerpos de seguridad. Por el contrario, en otros países sí se permite el uso de este tipo de utensilios para practicar el tiro deportivo, mientras que casos más extremos, no existe ninguna prohibición para aplicar silenciadores a las armas de fuego.
Por ejemplo, los tiradores civiles en España tienen completamente prohibido utilizar silenciadores. Cosa distinta son los moderadores de sonido, aptos y permitidos en armas de aire comprimido del calibre 4,5mm, 5,6mm y 6,35mm. Estos reductores gozan de gran popularidad entre los seguidores del Field Target. En algunos países como Finlandia o Francia, el uso de silenciadores está bastante extendido. Incluso, para la caza en ciertas regiones de Centroeuropa es prácticamente de uso obligatorio, dado que se considera que con esta supresión del ruido se molesta menos a la fauna del lugar.
Armas con silenciador
Una vez tratado el tema de la legalidad del silenciador, llega el momento de conocer qué tipos de armas pueden utilizar estos dispositivos. Por sus características y diseño, básicamente el uso de silenciadores queda restringido a pistolas, rifles y subfusiles. Los revólveres resultan muy complicados de silenciar, sobre todo, por los escapes de gases que se producen a través del hueco existente entre el cilindro y el tambor. A pesar de esta generalidad, existen varias excepciones que confirman la regla. Una de las más conocidas es la del modelo ruso Mosin Nagant calibre 7,62mm, un revólver ciertamente muy silencioso. Al igual que sucede con los revólveres, las escopetas también resultan prácticamente imposibles de silenciar. El vuelo de los perdigones podría dañar el silenciador, por lo que en cierta forma, sólo se puede reducir su sonido con el uso de munición especial denominada “Silent Shot", un cartucho ya de por sí silenciado.
De todas las armas aptas para usar con silenciador, quizá la más popular sea la pistola. Gran parte de culpa de esta popularidad la tiene su aparición en la gran pantalla, donde gracias a la industria hollywoodiense nos hemos acostumbrado a ver a espías y agentes secretos abatir a sus víctimas con pistolas con silenciador. Pero a diferencia de lo que nos muestra el cine, una pistola con silenciador no es un arma totalmente silenciosa. Y mucho menos es capaz de matar a alguien con un solo disparo a una distancia considerable. En este sentido, hay que tener en cuenta que la precisión y la potencia del arma se ve mermada al disparar munición con carga reducida. Actualmente, uno de los modelos más emblemáticos de pistola con silenciador es la HK Mk 23, un arma ampliamente utilizada por las fuerzas del orden y los cuerpos especiales de todo el mundo.
Subfusil HK MP5 SD3.
En cuanto a los fusiles y subfusiles equipados con silenciador, uno de los modelos más destacados es el HK MP5 SD3. Este subfusil de origen alemán es una de las pocas armas que no requieren utilizar munición subsónica. Su exclusivo diseño le permite utilizar munición original o supersónica sin que el silenciador sufra ningún tipo de daño ni su capacidad para suprimir el sonido se vea afectada. Otros subfusiles con silenciador dignos de mención son los diseñados por la compañía americana Ingram en la década de 1970.
Analizadas todas estas cuestiones, llega el momento de citar los pasos necesarios para reducir al máximo el sonido de un arma:
- Aplicar un silenciador (normalmente en la boca del cañón).
- Disparar munición subsónica (menos potente pero más silenciosa que la normal).
- Utilizar armas con mecanismos de acción "silenciosos" (por ejemplo, cerrojos o monotiros).
Rifle con silenciador aplicado.
En cualquier caso, armas y silenciadores siempre se han sentido atraídos desde sus remotos orígenes. Su relación se ha ido fortaleciendo con el paso de los años hasta conseguir una unión firme e indisoluble. Y es que actualmente sólo las restricciones legislativas pueden poner freno al deseo de los tiradores por montar en sus armas uno de estos silenciadores. Porque, ¿a quién no le gustaría disparar sin tener que recurrir a los incómodos protectores auditivos? Esperamos que algún día podamos ver cómo nuestras armas se llenan de silencio…