La elección de unos buenos guantes anticorte es uno de los aspectos que más traen de cabeza a los profesionales de la seguridad. La oferta de marcas y modelos disponibles es tan amplia que resulta difícil acertar a la primera, ya que las características y rendimiento que ofrece cada guante también son tremendamente variadas.
Dada su importancia en el trabajo diario, los guantes anticorte se han convertido en la actualidad en un accesorio que no puede faltar en el cinturón de servicio de cualquier integrante de las fuerzas del orden.
Una de las mayores amenazas, y como es lógico, uno de los mayores temores, a los que se enfrentan diariamente los profesionales que se dedican al sector de la seguridad pública o privada, es la posibilidad de sufrir un ataque con un arma blanca. Dado que en proporción hay muchas más navajas y cuchillos en manos de delincuentes que armas de fuego, el principal riesgo al que se expone un agente durante una intervención es que el sospechoso le corte o le pinche con un arma blanca.
Para evitar, o al menos reducir las posibilidades de sufrir un peligroso corte en alguna parte de su cuerpo, existen cada día más equipos de protección individual con propiedades anticorte. Los más conocidos son los chalecos y los citados guantes, siendo estos últimos de vital importancia al ser nuestras manos las que primero se anteponen para detener el ataque con un cuchillo o una navaja.
La EN-388 es la normativa europea de equipos de protección individual que regula las características técnicas que deben reunir unos guantes anticorte para uso profesional. Independientemente del material con el que están fabricados, esta normativa evalúa cada guante anticorte en torno a 4 aspectos fundamentales: su resistencia a la abrasión, su resistencia al corte por cuchilla (no por impacto o pinchazo), su resistencia al desgarre, y su resistencia a la perforación.
En función de los resultados obtenidos en estas pruebas técnicas, los guantes anticorte se clasifican en diferentes niveles (de 0 a 5), siendo los guantes de nivel 5 los que más resistencia ofrecen al corte de un filo. En el mercado actual existe una amplia variedad de guantes anticorte de nivel 5, por lo que elegir uno u otro modelo dependerá en la mayoría de ocasiones del gusto y del presupuesto de cada usuario, sobre todo si la adquisición de este accesorio de protección individual se realiza a título personal.
Uno de los últimos modelos que han aterrizado en este competido sector, y que gracias a la colaboración de su proveedor hemos tenido la oportunidad de probar, han sido los guantes anticorte SHOKE nivel 5. Fabricados con una fibra elástica de neopreno, estos nuevos guantes destacan por ofrecer al profesional una mayor operatividad y tacto, sin descuidar la seguridad y protección de sus manos.
En este modelo, la protección anticorte se encuentra exclusivamente en la palma de la mano, donde encontramos una resistente capa de Kevlar que abarca desde la muñeca hasta la zona de los dedos. Para reforzar todavía más su protección anticorte, la parte interior del guante está forrada con Dyneema, una fibra textil ligera y resistente. Para verificar su resistencia a los cortes, hemos utilizado dos navajas de características muy distintas: una Smith & Wesson M&P con hoja de tipo Tanto parcialmente aserrada; y una navaja Extrema Ratio BF1 Classic con hoja de tipo Drop Point completamente lisa.
Más tacto que resistencia
La primera sensación que experimentamos nada más enfundarnos los guantes de neopreno SHOKE anticorte nivel 5 es que, efectivamente resultan muy ligeros y sensibles al tacto. Por este motivo, consideramos que, a priori, podrían ser una buena elección para agentes de patrulla y servicios ordinarios. El primer examen de su capacidad anticorte lo realizamos con la navaja Smith & Wesson M&P, y en un principio el resultado parece bastante satisfactorio. La capa de Kevlar se desgarra poco a poco con los continuos cortes, pero no hay traspaso de la capa de Dyneema que forra la parte interior de la palma. Aún así, la pequeña sierra de esta hoja sí que se muestra más dañina y logra cortar el Kevlar con cierta facilidad.
Justo en el punto de unión entre el dedo pulgar y el dedo índice encontramos otra zona “atacable” con nuestra arma blanca, ya que es una zona sin Dyneema y protegida únicamente con nylon. Tras acometerla varias veces con la sierra de la navaja, logramos una pequeña perforación del material. Aún así, el resultado de la prueba con esta navaja de hoja Tanto de acero inoxidable 4034, parece bastante satisfactorio en líneas generales, ya que no hemos conseguido traspasar el forro de Dyneema que protege el guante.
Llega el momento de comprobar el comportamiento de este modelo con la navaja Extrema Ratio BF1, un arma blanca de alta calidad equipada con una hoja de acero Bohler N690 (58HRC) completamente lisa. En este caso, el resultado obtenido ya no es tan positivo, pues tras varios “ataques” con esta pequeña pero potente navaja, la protección anticorte de la palma de los guantes SHOKE cede irremediablemente.
El filo de la Extrema Ratio es tan cortante que incluso traspasa la capa de Dyneema, evidenciando que ante una navaja de alta calidad de estas características estos guantes no ofrecen tanta resistencia. En resumen, de nuestro análisis sobre estos guantes podemos concluir que ofrecen una justa resistencia al corte con un arma blanca estándar, pero que ceden y se ven superados cuando la hoja del arma con la que se los ataca es de alta gama (por suerte, los delincuentes habituales con los que tienen que lidiar los profesionales de las fuerzas del orden no suelen tener acceso a este tipo de navajas).
Más protección y rigidez
SHOKE también comercializa otro modelo de guantes anticorte, en este caso una versión más táctica, que también hemos tenido la oportunidad de probar. Este modelo se caracteriza por ofrecer una protección extra en la zona de los nudillos, así como una capa completa de Dyneema que forra toda la parte interior del guante. Esta mayor protección orienta a este modelo de guantes hacia un uso más operativo, especialmente indicado para agentes y profesionales que estén destinados en unidades tácticas o que diariamente se enfrenten a situaciones de mayor riesgo o posibles ataques.
Estos guantes están fabricados con cuero, nylon y neopreno, y también presentan una resistencia anticorte de nivel 5. Al entrar en la mano, ya resultan bastante más rígidos y pesados que los guantes anteriormente analizados, lo que se va a traducir lógicamente en unos guantes menos sensibles al tacto pero también más resistentes al corte.
De nuevo arrancamos nuestro análisis de resistencia con la navaja Smith & Wesson M&P. Atacamos al guante por la zona de la palma y de los dedos, logrando tras repetidas acometidas, únicamente desgarrar la parte de cuero que protege la palma. Este material actúa como una primera e importante barrera antes de llegar a la capa de Dyneema, que en este caso resulta además más gruesa y resistente que en el modelo anterior.
Incapaces de traspasar la protección anticorte con la M&P, probamos a continuación su resistencia ante la navaja Extrema Ratio. Nuevamente, el guante se vuelve a mostrar muy resistente, soportando el corte con el potente filo de la navaja italiana. Con ella sí que conseguimos acceder a la capa de Dyneema, pero en este caso, al ser más gruesa, nos cuesta bastante más poder atravesarla. Por lo tanto, podemos concluir que estos guantes con los nudillos reforzados ofrecen una mayor protección al corte que los de neopreno, aunque también resultan más aparatosos y menos sensibles al tacto que los anteriores.
En definitiva, parece que cada modelo de guantes anticorte SHOKE podría recomendarse para un tipo de uso o servicio, teniendo en cuenta sus prestaciones y limitaciones. Los guantes de neopreno serían más aconsejables para servicios ordinarios de patrulla y con ciertas restricciones ante determinados modelos de armas blancas; mientras que los guantes con protección en los nudillos, serían más aptos para servicios extraordinarios, acciones tácticas, y enfrentamientos con casi cualquier tipo de navaja o cuchillo.
