¿Cómo puedo poner a tiro mi rifle?, ¿necesito realizar muchos disparos de prueba para ajustar el visor en el punto exacto?, ¿cómo consigo mejorar la precisión de mi arma? Seguro que éstas y otras preguntas de índole similar nos asaltaron cuando por primera vez nos vimos ante la necesidad de disparar con la máxima precisión. Este proceso de centrar o poner a tiro nuestro rifle o escopeta era algo que, hasta hace poco, quienes no disponían de mucho tiempo libre, o simplemente no querían perderlo en este tipo de asuntos, solían dejar en manos de sus armeros o de algunos compañeros de afición con cierta práctica o pericia en estas lides.
Sin embargo, gracias a la aparición de nuevos accesorios, como los colimadores láser con forma de cartucho metálico, este proceso se ha vuelto mucho más sencillo y económico. Y es que, a pesar de que los colimadores ópticos todavía siguen siendo un incuestionable referente entre quienes se toman en serio esto de “poner a tiro el rifle”, estos nuevos colimadores con forma de cartucho se han erigido como una alternativa a tener en cuenta para aquellos tiradores o cazadores que no persiguen un centrado milimétrico, sino un ajuste muy fiable y que garantice que la bala impactará aproximadamente justo donde indica el puntero láser.
Como decimos, el uso de este tipo de colimadores con forma de cartucho resulta muy sencillo. Basta con adquirir el colimador del mismo calibre que nuestra arma, activar su puntero láser (por lo general, sólo es necesario introducirle las pilas y ya empieza a funcionar), y a continuación colocarlo en la recámara del arma; tal y como si de un cartucho estándar se tratara. Una vez dentro de la recámara de nuestro rifle o de nuestra escopeta, el colimador proyecta un haz láser de color rojo a través del cañón del arma, y a partir de aquí comienza el proceso de centrado.
Por poner un ejemplo práctico, se puede ajustar primero el visor sobre un blanco ubicado a una distancia de 10 metros. A continuación, disparamos con nuestro rifle o nuestra escopeta sobre otro blanco que esté a 25 metros de distancia. En función de la desviación y del punto que marque el colimador, ajustamos nuestro visor, de tal forma que, en apenas dos o tres disparos, podremos tender el rifle relativamente centrado.
Para la fabricación de estos colimadores suele utilizarse un material tan ligero como el aluminio, de ahí que, dependiendo del modelo, su peso apenas alcance los 15 gramos. Por lo que respecta a su alimentación, la mayoría de estos colimadores funcionan mediante 3 baterías de botón o LR-41. En cuanto a la potencia del haz láser que emiten estos colimadores, conviene recordar que es de 635-655nm, es decir, inferior a 5mw.
Vista la buena acogida que estos colimadores láser están teniendo entre los tiradores y cazadores de todo el mundo, la oferta actual de este tipo de productos se ha multiplicado. Al principio, estos cartuchos láser apenas se comercializaban para los calibres más populares (.308, .30-06, etc); sin embargo, a día de hoy resulta relativamente sencillo encontrarlos casi para cualquier arma. Desde el .223 hasta el .50 BMG, pasando incluso por otros calibres de rifle como el 7.62x39, el 8x57IS, el 7.62x54R, o el .30-30. Incluso también están disponibles para calibres de escopeta, como el popular calibre 12 o el menos común calibre 20.
En cuanto a sus fabricantes, también son numerosos y muy variados, aunque tal vez los más introducidos en España sean los de las firmas NcStar y 600NE. Todos ellos se pueden adquirir en diversas tiendas online, como por ejemplo Blackrecon.com, por apenas 29.95 euros cada uno, una cifra muy inferior a la que tradicionalmente ha acompañado a este tipo de productos.
Colimadores en la boca de fuego
Aparte de estos colimadores láser con forma de cartucho, existe otra opción un poco más sofisticada y versátil que nos permitirá poner a tiro nuestra arma de fuego. En esta ocasión hablamos de los colimadores multicalibre que se colocan justo en la boca del cañón de nuestras armas. Estos colimadores suelen contar con diversos adaptadores de diferentes diámetros, de tal forma que permiten ajustarse a cañones de calibres tan distintos como el .22 o el .50 BMG. Válidos también para calibrar armas cortas, estos productos suelen tener un precio de venta más elevado que los colimadores con forma de cartucho, ya que como hemos comentado con un mismo colimador se pueden ajustar un mayor número de armas. Por lo demás, el funcionamiento es prácticamente idéntico. Se alimentan con las mismas baterías de botón y proyectan un haz láser de color rojo muy brillante que, al apuntarlo sobre un blanco, permite realizar las correcciones necesarias para “centrar” el arma.
Entre los principales fabricantes de estos colimadores láser multicalibre destacan firmas como Bushnell y sus famosos “Boresighter”, la especializada en temas ópticos Shilba, o la casa Vector Optics. Respecto a su precio de venta, en la tienda www.blackrecon.com podemos encontrar estos productos desde 40 a 60 euros.