“One shot, one kill" (un disparo, un muerto) es el lema de estos auténticos maestros de la guerra, verdaderos artistas capaces de disparar contra los enemigos con la precisión de un cirujano. Precisamente, pocos meses después de haberse iniciado la Segunda Guerra Mundial, emergió la figura de un excelente francotirador finlandés que ocupa el primer puesto en el ranking de soldados abatidos. Su nombre está escrito con letras de oro en la memoria colectiva de Finlandia, ya que el gran Simo Häyhä fue capaz de provocar más de 500 bajas entre el Ejército Rojo que a finales de 1939 invadió el país escandinavo.
Uno de los grandes protagonistas de esa resistencia fue precisamente Simo Häyhä, quien gracias a su enorme precisión se convirtió en un sniper de leyenda. Häyhä se incorporó a las órdenes de la 6ª compañía del JR 34 en el río Kollaa. Su insultante tranquilidad y su depurada técnica con un rifle en las manos fueron sus principales virtudes a la hora de enfrentarse a los soldados soviéticos. Y es que si por algo se caracterizaba Häyhä era por su tranquilidad, por saber esperar el momento justo para disparar. En este sentido, el secreto del éxito de Simo es que acudió al frente de Kollaa no como un militar, sino como un cazador a la espera de abatir a su presa.
Los durísimos enfrentamientos librados a orillas del río Kollaa se conocen con el sobrenombre de “El milagro del Kollaa", debido a la heroicidad de los soldados finlandeses. Y es que resulta prácticamente increíble que un país que por aquel entonces apenas contaba con 3 millones de habitantes, pudiera derrotar a la todopoderosa URSS, que tenía una población total de más de 170 millones de ciudadanos.
La batalla más famosa del río Kollaa fue la conocida popularmente como “Killer Hill". En este histórico enfrentamiento, sólo 32 finlandeses midieron sus fuerzas contra 4.000 soldados soviéticos. Entre ese reducido grupo de 32 finlandeses se encontraba Simo Häyhä, quien se encargó de abatir oficialmente a más de 500 soldados soviéticos durante esta Guerra de Invierno (algunas referencias citan la cifra concreta de 542). La cifra de bajas provocadas por Häyhä podría haber aumentado si en junio de 1940 no se hubiera visto obligado a retirarse del frente al haber sido herido en la cara por un francotirador soviético. A pesar de sus heridas en el rostro, Häyhä pudo localizar al otro sniper, apuntarle y disparar.
Sin embargo, lo verdaderamente increíble de la leyenda de Häyhä no son sus más de 500 enemigos abatidos, sino que lo hizo en poco más de 100 días. En apenas un centenar de jornadas combatiendo en el frente del río Kollaa, Häyhä eliminó a unos cinco enemigos diarios. Este extraordinario récord ha convertido a Simo en el héroe de guerra más destacado de Finlandia y le ha aupado a la categoría de mito dentro del mundo de los francotiradores.
Sin embargo, a pesar de que la leyenda de Häyhä esté íntimamente ligada al M28, el francotirador finlandés también dominaba con soltura el Suomi K31 SMG. De hecho, Simo también utilizó este rifle durante la Guerra de Invierno, aunque en menor medida que el mítico Mosin-Nagant.
Simo Häyhä falleció el 1 de abril de 2002 a los 96 años de edad. A pesar de su desaparición, su leyenda sigue viva y todavía representa un icono de cómo los finlandeses deben defender su país. Más de 500 enemigos abatidos en apenas 100 días es una cifra que jamás se podrá olvidar.