Todos conocemos al Mauser 98 Mod. Coruña 1943 (M43) en calibre 7.92x57mm que dotó a las unidades del Ejército de Tierra, a la Armada y a la Guardia Civil. Pero menos conocido es el Mod. Coruña 1944 (M44) que dotó a las tropas de Aviación, el cual descubrí en una visita por tierras manchegas, que por motivos de trabajo recorría. Observé unas bombas de aviación en un desguace y entré a husmear por curiosidad, y al preguntarle al encargado si tenia algo de militaría me enseñó unos cascos Z42, y una caja repleta de trozos de armas. Mi sorpresa fue ver acciones de Mauser cortadas a radial y con el emblema de Aviación, lo cual captó mi atención y desde entonces me puse a investigar. Pronto descubrí que eran las acciones del Coruña del que estamos hablando…
Un poco de historia para situarnos
A finales del siglo XIX y principios del siglo pasado nuestro ejército estaba dotado de rifles Mauser 1893 de 7mm. Fue un excelente fusil, demostrado en la Guerra de Cuba, los conflictos en África y en nuestra Guerra Civil. Además, se habían producido variantes como una carabina corta de Caballería (mod. 1895) y un mosquetón (mod. 1916). En la fábrica de Armas de Oviedo ya se producían fusiles con acción 98 destinados a la exportación hacia países sudamericanos, pero la modernización para nuestra Fuerzas Armadas tuvo que esperar hasta 1943, cuando se adoptó el nuevo mosquetón en calibre 7.92mm (8x57 JS Alemán), debido sobre todo a la urgente necesidad de un nuevo fusil por el mal estado del armamento del que se disponía después de la contienda.
Las características eran casi las mismas que las del modelo 1916, pero copiando al Mauser checo VZ-24 que dotó a las Fuerzas de la República. Su denominación inicial fue la de “Mosquetón Coruña modelo 1943”, al ser construido en la Fábrica Nacional de La Coruña, estableciéndose su valor, por Orden de 15 de Junio de 1944 de la Dirección General de Industria y Materiales del Ministerio del Ejército, en 300 pesetas.
El ejército del Aire también adoptó el nuevo mosquetón, aunque requirió unos pequeños cambios, pareciéndose más al Mauser Polaco Random que al checo, del que también dispuso la República. El por qué de estas diferencias lo desconozco, aunque supongo que sería porque el arma no está pensada para un infante en el campo de batalla, sino para un uso más “policial”. Este rifle pasó a denominarse Mod. 1944.
Las principales diferencias entre el M43 y el M44 son las siguientes:
- Los marcajes son distintos: mientras que los M43 llevan la inscripción del Águila de S. Juan, el año de fabricación, el nombre de la fábrica, y el número de serie en el lateral (precedido de una letra); el M44 lleva el emblema del Ejército del Aire, y en el lateral, al número de serie le preceden las letras EA.
- Los enganches para la correa de transporte también varían: mientras que el M43 lleva laterales e inferiores; el M44 solo lleva laterales, diferenciándose en que la culata, en vez de una anilla clavada como el M43, lleva un rebaje más parecido al Mod. 1916.
Estas fotografías sobre la bandera de España nos sirven para apreciar otras dos diferencias, como son el punto de mira protegido, que para mi gusto ayuda a centrar antes la mira y evita enganches; y el engarce para la bayoneta. En este sentido, en el M43 se le introdujo un tetón con el fin de aprovechar las bayonetas del modelo 1983, aunque se terminó realizando una especifica para este modelo, con un fosfatado para protegerla en el caso de la Armada y pulida en el caso del Ejercito de Tierra. Mientras tanto, el M44 usaba una bayoneta específica para este modelo, sin anilla de sujeción al cañón y con una hoja más fina, parecida a la del Kar 98 alemán.
En mi opinión, los acabados del M44 son más finos y mejor terminados que en el modelo M43, debido seguramente a que la producción fue mucho más limitada y mejor elaborada.
Tengo la suerte de haber conseguido uno de estos fusiles en excelente estado, como de arsenal. Es increíble que después de haber visto cómo han terminado la mayoría de sus hermanos, (en la chatarrería hechos pedazos), algunos viajaron a Alemania a precio de saldo, y desde allí regresaron a España unos pocos para ocupar el puesto que se merecen, en un rincón de Honor como sus antecesores.