De cerrojo o doble: el rifle perfecto para la caza de los 5 grandes

¿Qué rifle te llevarías a África para enfrentarte a los 5 grandes (elefante, búfalo, león, rinoceronte y leopardo)?, ¿un cerrojo o un doble? Ríos de tinta han corrido a lo largo de los años para tratar de ofrecer una solución a este dilema que, sin embargo, todavía sigue sin resolver.

 

 

Todos los grandes cazadores sueñan con poder verse las caras algún día con las especies peligrosas que habitan la sabana africana. Días antes de iniciarse el safari, el cazador imagina su próximo encuentro con alguno de los 5 grandes. Cierra los ojos y se sitúa en plena sabana, soportando un sofocante calor y notando cómo su pulso se acelera en cuanto se aproxima a una manada de imprevisibles búfalos. Suerte que entre sus manos lleva un rifle fiable, potente y preciso que le ayudará a salvar su vida. Ahora bien, ¿qué tipo de rifle es el que se encuentra entre las manos del cazador en ese sueño?, ¿uno doble o uno de cerrojo? Este es el gran debate, una cuestión que se ha prolongado hasta nuestros días y que ha suscitado infinidad de opiniones encontradas.

 

 

En mi opinión, el tirador que se dispone a emprender la caza de los 5 grandes sólo tiene la posibilidad de escoger entre un rifle de cerrojo o un rifle doble. El resto de modelos, como los de palanca y los semiautomáticos, no son aptos para este tipo de cacería, ya que no pueden disparar cartuchos tan potentes. Reducido el abanico de posibilidades, la elección del arma se convierte en un aspecto clave para los pocos privilegiados que tienen la oportunidad de enfrentarse a las especies peligrosas. Y es que la fiereza de estas bestias hace que un error en su decisión pueda convertirse en un fallo mortal.

Una cierta aureola de misticismo se alza, de forma incuestionable, entorno al rifle doble. Gran parte de las antiguas historias y leyendas acerca de la caza africana tienen al rifle doble como principal protagonista. Incluso, muchos cazadores y coleccionistas piensan que este rifle podría considerarse como el “Santo Grial" de las armas. Pero a pesar de toda esta vorágine romántica que rodea al rifle doble, cuando un cazador mira a su alrededor en la sabana, prácticamente el 90% de los cazadores profesionales (Professional Hunter PH) y guías utilizan un rifle de cerrojo. De hecho, resulta muy extraño ver a un cazador profesional o a un guía con un rifle doble. ¿Cuáles son los motivos?

 

 

La razón principal tiene que ver con el aspecto económico. Y es que los rifles dobles son igual de caros que de hermosos. Sus grabados de plata con escenas de animales, sus inserciones en oro, sus diseños exclusivos… todos estos elementos encarecen notablemente el coste de este tipo de armas. Seguramente, hay un gran número de cazadores profesionales y de guías a los que les encantan los dobles, pero que no pueden permitirse comprarse uno. Es cierto que un buen rifle de cerrojo tampoco es barato, pero por un modelo de buena calidad se pueden pagar hasta diez veces menos que por un rifle doble británico. Junto al inconveniente del precio, sólo al alcance de unas pocas carteras privilegiadas, los rifles dobles también presentan a mi entender otra serie de desventajas respecto a los modelos de cerrojo:

 

 

-Primero, los rifles de cerrojo son más precisos que los dobles. Esto se debe a que las miras de los dobles están pensadas para disparos a corta distancia (50 metros), por lo que estas armas pierden precisión en cuanto aumenta la distancia del tiro. Además, el rifle doble dispone de dos cañones que intentan hacer blanco sobre el mismo punto de impacto, lo que dificulta y reduce la precisión en el tiro (es más difícil apuntar). Por el contrario, en los rifles de cerrojo es mucho más sencillo y útil montar una mira telescópica, así que cuando la distancia del disparo aumenta o cuando se precisa colocar un buen tiro, los rifles de cerrojo ofrecen mejores prestaciones.

-Segundo, los rifles de cerrojo pueden contener más cartuchos que los dobles, aunque también es cierto que un tirador experto puede recargar los rifles dobles con bastante rapidez. Algunos modelos de rifles de cerrojo pueden almacenar en su cargador hasta un total de 5 balas, mientras que los dobles sólo permiten disparar 2 cartuchos antes de volver a recargar. El hecho de poder disparar 3 o 4 veces seguidas con sólo accionar el mecanismo de cerrojo puede ser un seguro de vida cuando se acerca un búfalo herido totalmente rabioso.

-Una tercera ventaja que presentan los modelos de cerrojo respecto a los rifles dobles tiene que ver con la munición, más cara y difícil de encontrar en las armas de dos cañones. A pesar de todo, la situación actual es mucho mejor que la de hace años, pues cada vez hay más compañías que ofrecen munición y componentes para la recarga de cartuchos para rifles dobles. Lo que sucede es que la recarga de estos cartuchos es muy complicada.

-En cuanto a versatilidad y posibilidades balísticas, el rifle de cerrojo también supera al rifle doble. En este sentido, el sistema de acción de los modelos de cerrojo es mucho más fuerte y compacto que el de los rifles dobles. Por este motivo, admiten cartuchos de alta presión y una gran variedad de balas. Esto no sucede con los rifles dobles, que sólo pueden funcionar con cartuchos que generen menos presión en el arma.

-Una última cuestión a favor de los rifles de cerrojo tiene que ver con una recomendación realizada frecuentemente por los cazadores profesionales. Ellos aconsejan transportar el arma con la cámara vacía pero con el cargador lleno, una situación que sólo es viable en los rifles de cerrojo.

 

 

A pesar de estas desventajas respecto a los modelos de cerrojo, los rifles dobles también guardan un incuestionable encanto y pueden resultar muy útiles en determinadas ocasiones. Dejando a un lado esa aureola mística y romántica que los rodea, los rifles dobles poseen un gran número de virtudes. La principal es su capacidad de realizar dos tiros de forma muy rápida y segura (sin que se pueda producir un atasco en el cañón o un fallo en el sistema de alimentación), algo fundamental en una situación de emergencia. Además, un rifle doble es prácticamente un arma doble: con dos cañones, dos gatillos, dos sistemas de acción… por lo que si se produce un fallo mecánico en uno de los cañones, siempre se puede seguir disparando con el otro.

Otra característica de los rifles dobles es su reducido tamaño, aunque sus cañones son suficientemente largos para obtener buenos tiros a medias distancias. Este rasgo resulta muy valioso cuando el cazador se encuentra rodeado de espesa vegetación (por ejemplo, cuando debe ir a rematar a un animal herido que se ha escondido entre frondosos arbustos). Una última virtud de los rifles dobles que yo añadiría es que permiten cargar un cañón con balas duras y otro con balas blandas. Esta combinación de munición resulta útil cuando el cazador no está muy seguro de lo que puede encontrarse en plena sabana o cuando no busca cazar una pieza en concreto.

 

 

Teniendo en cuenta todas estas variantes llega el momento de volver a plantearse el eterno dilema: ¿Qué tipo de rifle es mejor para la caza de los 5 grandes? Como he comentado, cada modelo tiene sus ventajas y sus inconvenientes, por tanto, en su elección el cazador debe tener en cuenta qué tipo de rifle quiere y qué utilidad va a darle. Debe conocer sus limitaciones y sus virtudes. A simple vista, el rifle de cerrojo (el más utilizado) me parece el más indicado para este tipo de cacería. Sin embargo, hay una situación concreta en la que un buen rifle doble puede ser vital: cuando un cazador profesional debe adentrarse en un frondoso campo de matorrales para acabar con la herida de un peligroso animal herido y rabioso.

De todos modos, sea cual sea la elección, antes de iniciar su aventura por África el cazador debe haberse familiarizado con el rifle y haber practicado mucho con él. Y es que no hay nada más peligroso y detestado por los cazadores profesionales que un novato que llega a la sabana con un lujoso rifle doble sin estrenar. Por eso el cazador debe optar por un tipo de arma con la que esté totalmente familiarizada, que conozca a la perfección su sistema de funcionamiento y sus prestaciones. Hay que tener en cuenta que las muchas horas de práctica con nuestro rifle se pueden quedar cortas en plena sabana africana, donde el estrés y la adrenalina que se libera en el momento de abatir a uno de los 5 grandes puede convertirnos en un tirador inexperto. Y es que en esa situación debemos ser conscientes de que, o bien con un rifle de cerrojo o bien con uno doble, el más mínimo fallo puede resultar mortal.