El relato que nos ha contado Robertocazaruta en el post, volver al monte, (pagina7, tercer post)esta perfectamente explicado, excepto por un pequeño detalle, que el lo ha contado como si tirasemos la misma punta en un calibre 9,3x62 y en un 7remmag.
Estaria bien hace 30 años, pero ahora lo encuentro incorrecto.
Diria yo que los fabricantes de puntas, como nosler, barnes, hornady, swift, etc.., deben de hacer algo mas que vender puntas. Por eso han sacado puntas con polimero en la punta, para evitar que se desvien, como las que tienen plomo en la punta, por ejemplo.
A la hora de diseñar las puntas soldadas, supongo que deben haber tenido en cuenta velocidades de calibres, penetracion y perdida de masa, etc.. y por eso las puntas modernas son como son.
Siguendo esta regla de 3, que cuentan los detractores de estos calibres en tiros cortos, resultaria, que en un weatherby no podrias disparar a menos de 200, porque sencillamente no funcinaria ninguna punta a menos que perdiese velocidad.
Si vivimos en estados unidos y podemos comprarnos un lazzeroni solo nos serviria a mas de 400 metros ya que por debajo, ninguna punta funcionaria.
Creo que para hablar de que las cosas van o no van, no sirve una sola vez ni una sola prueba.
Diria yo, que con el monton de gente cazando con 300 i 7rm, no creo que todos esten equivocados. Es mas, yo diria que siguiendo la regla basica, de buscar la punta adecuada, todos estan en lo correcto.
Son dos calibres, (y sus asemejados)perfectamente validos para cazar en batida y monteria.
La velocidad sin control no sirve de nada, pero controlada es tan util como el peso.
En el 338 i 9,3 veo que estais buscando pesos de los que se tiran con estos calibres, por algo sera.
No creo que sea bueno recomendar a alguien que empieza, un 338 o un 9,3x62, antes de haber tenido un poco de experiencia con algo mas normalito. Al primer trancazo lo coje miedo al retroceso o al destrozo que hace y se acuerda de alguien.
A estos calibres si llega con experiencia y teniendo claro lo que se hace y porque se hace.


