TeteCuhete escribió:Te lo voy a resumir yo de forma muy concisa, Edgar. El problema está en el MARCO LEGAL en el que desempeñamos nuestras funciones. Está pensado para garantizar los derechos del delincuente, y se niega a la policía ni el derecho al beneficio de la duda, mucho menos el de la presunción de inocencia. La cosa viene de la herencia franquista de este país, y quizá tuvo su lógica en una determinada altura donde había que meter en cintura a unas policías que eran herramientas represoras del régimen, pero a día de hoy con la delincuencia que existe, no.
Los policías Españoles (y te lo dice uno que también tiene alguna que otra misión de mantenimiento de paz en sus espaldas) estamos tan o más capacitados que el mejor que encuentres por ahí. Te lo digo así de alto y así de claro. Me da igual que busques Alemán, que Noruego, que Gringo o Argentino. Y digo el "más" porque a la igual o mejor preparación técnica hay que añadir algo que sólo existe en el Sur de Europa, capacidad de improvisación y de diálogo con la gente.
El problema viene dado por la falta de respaldo que por parte de legislación y jueces existe, que es mucha. Al policía que usa la fuerza se le mete en un juzgado y se le hace responder de las lesiones que presenta un individuo que tuvo que ser reducido por la fuerza por acometer-desobedecer-resistirse al policía, y el concepto de "empleo de la fuerza letal" no existe, porque ni al ciudadano ni al policía se le da el derecho a la autodefensa, pues en el ordenamiento jurídico Español no existe.
Como ya he dicho alguna vez, hace falta que sea a algún político o juez al que le jodan a la familia o a él mismo, porque de otra forma no habrá cambio que valga.

Ahora dime si conozco de cerca los fenomenos sociales con los hijos de la guerra, aqui la policia no puede entrar a colonias sino es con el apoyo de la fuerza armada, que esperan entonces ustedes para provocar los cambios que los llevaran a situaciones de violencia insospechada?
Bueno ya no participo mas porque en realidad estamos en mundos diferentes, y ojala que no se lamenten sus hijos por lo que dejaron de hacer sus padres en estos momentos.