Esta 1911 nacida para acabar con los muertos vivientes está fabricada por la empresa Iver Johnson Arms, una de las muchas firmas norteamericanas especializadas en la customización y personalización del arma de fuego más representativa del país de las barras y estrellas.
La sociedad estadounidense parece haber encontrado un nuevo enemigo. Primero fueron sus apasionados enfrentamientos contra los desconocidos extraterrestres, después contra los malvados comunistas de la antigua URSS, y ahora parece que la principal amenaza contra el país de las barras y estrellas procede de una hipotética invasión zombie. Basta con echar un vistazo a las últimas novedades que van apareciendo en el sector armero para comprobar que no existe prácticamente ninguna marca o fabricante que no incluya un producto especial “anti zombie” entre sus nuevos lanzamientos.
Da lo mismo que sea una carabina de aire comprimido, una nueva línea de cuchillería, un nuevo tipo de munición, o nuevos modelos de escopetas y rifles. Todo vale mientras lleve a su lado el apelativo Zombie y presente unas llamativas tonalidades verdes, fácilmente reconocibles para todos aquellos aficionados a esta creciente y ficticia lucha contra los muertos vivientes.
Sin embargo, de tarde en tarde, alguno de estos diseños armamentísticos resultan tan atractivos que merece la pena dedicarles una mención especial. Es el caso de esta enésima versión de la icónica pistola 1911, ahora vestida con un traje especial anti zombies, y que a buen seguro pasará a ser el arma de cabecera de los estadounidenses más apocalípticos.
Esta 1911 nacida para acabar con los muertos vivientes está fabricada por la empresa Iver Johnson Arms, una de las muchas firmas norteamericanas especializadas en la customización y personalización del arma de fuego más representativa del país yankee: la citada M1911 ideada por el genial John M. Browning y popularizada por la prolífica Colt. Iver Johnson, que a día de hoy dispone de una amplia gama de versiones propias de esta pistola originariamente del calibre .45 ACP, ha conseguido ganarse cierta popularidad en el mercado estadounidense gracias a sus elegantes acabados con Cerakote, un tratamiento especial anti corrosión que tiene como principal ventaja la posibilidad de poder decorar tu arma con diferentes tonalidades. Así, dentro de esta gama encontramos modelos como el Eagle con el armazón en color Coyote Tan, o en color OD Green, o ese mismo modelo con el armazón en un vistoso acabado pulido o en un más discreto tratamiento mate.
Recientemente, a todas estas versiones de la 1911 se ha sumado este nuevo modelo de Iver Johnson bautizado con el sobrenombre de Eagle LR Zombie. Lo primero que llama la atención de esta pistola del calibre .45 ACP con cañón de 5” (12,7 cm) es el atrevido y original diseño de su corredera y de su empuñadura. En la corredera encontramos un grabado con varias imágenes de zombies, mientras que en la empuñadura observamos dos diseños diferentes, una para cada lado de las cachas, en los que aparece en primer plano el ajado rostro de un muerto viviente. En ambos casos, el color verde lima brillante se utiliza como tonalidad de fondo, de tal forma que a simple vista se identifica la pistola como un arma especial anti zombies.
El resto de su armazón, fabricado en acero al carbono y completamente mecanizado, está acabado en color negro mate, lo que confiere un aspecto final al arma completamente bitono. Respecto a las cachas, conviene destacar que proceden del reputado fabricante Hogue y que están elaboradas con un polímero especial de alta resistencia a la abrasión.
Dejando a un lado la posible excentricidad del aspecto exterior del arma, esta nueva Eagle LR Zombie “made in” Iver Johnson viene montada sobre las mejores piezas y ajustes del mercado, todo con el objetivo de no desmerecer la buena fama que la firma se ha granjeado durante varios años en el mercado estadounidense. Del mismo modo, esta 1911 pensada para enfrentarse a los muertos vivientes respeta los cánones estéticos del diseño original, incorporando elementos tan característicos de esta mítica pistola de combate como su característico seguro de empuñadura, su sobredimensionada palanca de retenida de la corredera, o su calibre original: el americanizado y efectivo .45 ACP. A este respecto, esta versión de la 1911 utiliza un cargador extraíble con capacidad para almacenar hasta 8 cartuchos de esta potente munición.
Otros aspectos destacables de esta original pistola proceden de su disparador con 3 agujeros, su martillo esquelético de simple acción, o su raíl táctico de 3 acanaladuras ubicado justo debajo del cañón y que permite la instalación de diferentes dispositivos ópticos. En cuanto a sus elementos de puntería, Iver Johnson ha optado por instalar sobre la corredera de su Eagle LR Zombie una mira trasera regulable Millet y un punto delantero fijo.
Dada la creciente “moda Zombie”, impuesta sobre todo como hemos comentado en Estados Unidos, si decidiéramos hacernos con una de estas espectaculares pistolas seguramente no encontraríamos demasiados problemas para probar su rendimiento con la munición y los blancos adecuados, es decir, por ejemplo con cartuchos de la serie Hornady Zombie Max, especialmente indicada para estos fines; y con dianas zombies caracterizadas por ofrecer una alta visibilidad de los impactos.
En España, de momento, esta invasión zombie no ha alcanzado las cotas de “contaminación” existentes en el mercado norteamericano, aunque no descartamos que más pronto que tarde el virus se extienda por estos lugares. Será cuestión por tanto de ir peinando el mercado para ir viendo qué pistola, rifle o escopeta nos asignamos a nuestro armero por si finalmente nos atacan los “comedores de cerebros”.