Seguro del Disparador:
Este es un seguro mecánico que está incorporado en el propio disparador en forma de una palanca. En estado intacto, el seguro del disparador bloquea el gatillo y le impide realizar cualquier tipo de movimiento. Si el arma cae al suelo, o si el disparador es sujetado fuera del centro, o incluso con presión lateral, resulta totalmente imposible que el arma se dispare. Este seguro sólo puede desactivarse mediante un correcto accionamiento (presión en el centro) del disparador. Y se activa automáticamente después que el tirador suelta el seguro (con el disparador en posición delantera). Este es el único seguro externo completamente visible de las pistolas Glock.
En la posición asegurada, este dispositivo impide mecánicamente que el percutor se mueva hacia adelante. Un pasador tensionado con un muelle es proyectado al canal del percutor, bloqueando de esta forma el movimiento del percutor. Cuando el disparador se empuja hacia atrás, una extensión en su varilla empuja el seguro del percutor hacia arriba y deja libre el canal del percutor. Este seguro sólo puede ser desactivado mediante el accionamiento del disparador.
Seguro contra caídas:
En la posición asegurada, el percutor empuja la varilla del disparador hacia la rampa de seguridad, localizada en la unidad de mecanismo de accionamiento bajo la influencia del muelle del percutor. En esta posición no hay ninguna posibilidad de que el percutor sea liberado. Este seguro contra caídas sólo puede ser desactivado por el accionamiento del disparador.
A muchos de los que tiramos con Glock nos llaman "plastiqueros", por ser ésta un arma cuyo armazón está construido en polímero (aunque de una resistencia asombrosa). Con un tratamiento Tenifer anti-corrosión, resistente al agua, el barro y a todas las inclemencias típicas de una zona de combate, todas las Glocks están diseñadas para el tiro policial o militar. Las características que definen al modelo 34 en calibre 9mm Parabellum son su pequeña liberación de presión en el disparador, su cañón de 135mm, sus miras regulables y su reducido peso: ¡sólo 728 gramos!
La Glock 34 también es una pistola que la firma austriaca ha diseñado junto con el modelo 35 (en calibre .40 SW) para el tiro práctico. Si tenéis posibilidad de probar alguna, os garantizo que os cautivará nada más cogerla. En cuanto encaréis su forma hexagonal, veréis lo rápida que es para coger miras. Yo soy propietario de una Glock 34 que todavía no ha pegado 500 tiros y, sin embargo, el pasado 26 de Noviembre en el campeonato Insular de metales de Gran Canaria, quedé en séptimo puesto habiendo incluso penalizado 2 segundos por "olvidarme" de un metal y sufrir dos encasquillamientos por culpa de un cargador sin rodaje.
Por todos estos motivos estoy muy satisfecho con esta arma y se la recomiendo a todo el que quiera iniciarse en el mundo del IPSC sin necesidad de gastarse mucho dinero. Una pistola excelente que además os permitirá conseguir buenos resultados. Aunque para ello, no os olvidéis de la regla principal de todo deporte: Práctica, mucha práctica.