FN Browning High Power: la pistola de combate de la Segunda Guerra Mundial

 

La pistola Browning High Power es, junto a la Colt M1911, el arma corta de combate por excelencia. Creada por el mismo diseñador que ideó la mítica 1911, la FN High Power revolucionó el sector de las pistolas militares al convertirse en el primer arma corta con un cargador de gran capacidad. Y todo ello para el calibre 9mm Parabellum.

 

 

John Moses Browning es, sin duda, uno de los grandes personajes de la historia de las armas. Padre de la legendaria Colt M1911, su afán creativo fue todavía más allá cuando a mediados de la década de 1920 dio a luz el esqueleto de la FN High Power. Con una estructura y un sistema de funcionamiento similar al de la pistola estadounidense, la nueva arma belga diseñada por Browning pronto conseguiría convertirse en una de las pistolas más imitadas y vendidas de la historia. También conocida como FN Grande Puissance (Gran Potencia), actualmente la compañía FN continúa produciendo nuevas unidades de la Browning High Power. Y eso que ya han pasado más de 70 años desde su nacimiento.

 

 

Fue en 1935 cuando el Ejército belga adoptó oficialmente la pistola FN Modèle 1935 para equipar a sus tropas. Sin embargo, el proceso de gestación de esta mítica arma había arrancado más de diez años atrás. Viendo el éxito cosechado por la Colt M1911, John M. Browning se puso manos a la obra en la creación de una nueva pistola que mejorara todavía si cabe a su antecesora. Entre los principales cambios que Browning incorporó a su nuevo trabajo destacaban la admisión de un sistema de rampa para bloquear el cierre, la sustitución del percutor externo de la M1911 por uno interno accionado por resorte, así como la adopción del calibre 9x19mm en lugar del .45ACP empleado en la Colt. Sin embargo, todos estos cambios quedaron relegados a un segundo plano con la puesta en escena de la característica principal de la FN High Power: su cargador de doble hilera con capacidad para 13 cartuchos del 9mm Parabellum, casi el doble de lo que permitía la Colt M1911 (sólo 7).

 

 

Esta elevada capacidad de carga convirtió a la Browning High Power en una de las pistolas militares más populares y buscadas de la época. Ahora bien, a pesar de llevar en su nombre el apellido de su principal creador, la HP 35 no fue un producto exclusivo del diseñador estadounidense. Y es que John M. Browning falleció en 1926, fecha a partir de la cual el ingeniero jefe de la Fabrique Nationale de Herstal, Dieudonné Saive, asumió las riendas y la dirección del proyecto. Saive fue quien perfeccionó el cargador de doble hilera ideado por Browning y también quien recuperó el percutor externo de la Colt, un dispositivo que permitía conocer a simple vista si el arma estaba amartillada o no.

 

 

Con el estallido de la Segunda Guerra Mundial en 1939, el protagonismo de la FN High Power se disparó hasta cotas insospechadas. Su alta capacidad de carga, robustez, fiabilidad y eficacia, despertó el interés de los dos bandos. Primero fueron los alemanes quienes, tras invadir la región belga de Herstal y apoderarse de la producción de FN, se equiparon con cientos de miles de unidades de esta mítica arma. Incluso, los nazis llegaron a rebautizar a la High Power, denominándola Pistole 640 9mm. Luego fueron las fuerzas aliadas quienes se sirvieron de las bondades de la Browning HP 35. Concretamente, Saive y otros diseñadores de FN que consiguieron escapar a Inglaterra trabajaron para la Royal Small Arms Factory de Enfield en la producción de nuevas unidades de la Grande Puissance. Aquellos modelos nacidos bajo la Segunda Guerra Mundial recibieron la denominación oficial de Browning Automatic Mark I. También la canadiense John Inglis & Co. produjo varias unidades de la HP 35 para las fuerzas aliadas.

Tras la conclusión de la Segunda Guerra Mundial, los empleados de FN recuperaron sus puestos de trabajo en Herstal y continuaron fabricando nuevas unidades de la High Power. Aquellos primeros ejemplares post-bélicos fueron conocidos como FN Model 1946, unas armas que desde entonces se convirtieron en pistolas oficiales de las Fuerzas Armadas de más de 50 países de todo el mundo, entre ellos Gran Bretaña, Australia o Canadá. Sin embargo, la expansión de la FN High Power no se detuvo ahí, pues la compañía belga concedió licencias de producción a Argentina, Indonesia y Hungría para que estas naciones fabricaran sus propios modelos.

Ficha técnica
La original Browning High Power se presentó ante el mundo como una pistola semiautomática de simple acción. Calibrada para disparar cartuchos del 9mm Parabellum, la HP 35 disponía de un doble sistema de alzas: por un lado, contaba con un punto de mira ajustable lateralmente, y a su vez presentaba otra alza de ranura cuadrada. Con una longitud total cercana a los 20cm, su cañón de acero se extendía a lo largo de 13cm. Y todo soportado en un peso aproximado de 810 gramos en vacío.

 

 

Aunque a lo largo de sus años de vida la High Power siempre ha contado con más virtudes que defectos (véase su fiabilidad, precisión y potencia), también es necesario mencionar que la HP presenta algún inconveniente. Uno de los más esgrimidos por sus detractores es su obsolescencia y su incapacidad de incorporar accesorios tácticos. En este sentido, y con el objetivo de superar estas críticas, en las últimas décadas la FN ha lanzado al mercado nuevas versiones de su popular pistola. Así, entre las más conocidas se encuentra la versión en doble acción, la doble acción exclusiva, y una tercera opción que permite elegir entre simple y doble acción (BDM). Estos nuevos modelos también cuentan con seguro ambidiestro, eliminando así una de las carencias de la versión original que sólo presentaba un seguro en la parte izquierda.

 

 

Destinada preferentemente al mercado civil, en los últimos años FN ha sacado a la luz una versión de la High Power en calibre .40 S&W (10x21mm). La capacidad del cargador de este modelo se ha reducido hasta los 10 cartuchos, mientras que para su elaboración se han empleado piezas de polímero y se le han acoplado miras fijas abiertas. Al mismo tiempo que estas nuevas versiones, en los últimos tiempos también se han popularizado las copias o imitaciones de la FN High Power. Entre los modelos más conocidos se encuentran la húngara FEG 9 o la búlgara Arcus, entre otras.

Después de haber servido a las SS alemanas, al SAS británico (quien la utilizó en su famoso asalto a la Embajada iraní en Londres), y a más de 50 ejércitos de todo el mundo, la Browning High Power 35 sigue siendo una de las pistolas de combate más respetadas de la historia. Un arma que se resiste al paso del tiempo y que se ha renovado enormemente en los últimos años.