Mensajepor huronescazan » 06 Mar 2009 20:24
Menut, hace unos años, había uno dandome la tabarra todos los días para que le llevara de caza.
En fin, le llevo a un buen sitio, dentro de una buena caseta, el cebadero, maiz, almendras y tomado por los cochinos.
Sobre las 01,00 de la mañana, voy a recogerlo y extrañado de que no hubiese tirado. Al ir llegando pues iba faroleando con la linterna, por si acaso, pero no obtenía respuesta, llego a la caseta y me lo encuentro, completamente dormido. Total que le pregunto, si habia escuchado algo y va y me dice, no y como me aburria, me he pegado una cabezadita; vamos al cebadero y no quedaba ni una almendra, ni practicamente maiz.
Desde entonces ya no ha dicho de venir mas.
Nunca he visto a un ser salvaje, compadecerse de si mismo (La Tte. Oneil)                              Â