Mensajepor DrZola » 19 Dic 2019 12:28
Buenas, permitidme unas palabras aunque venga de ese mundo luminoso y brillante, donde las nubes son de algodón de azúcar, que es el tiro de precisión con armas estratosféricamente modernas.
Creo que en toda actividad puede y debe haber una pluralidad de opiniones, todas igualmente respetables, por ello me inclino por los compañeros que afirman que el camino a seguir está, precisamente, en organizar romerías.
Los dieces que hace cada uno, que por cierto son igual de dignos y nuestros sea la modalidad que sea, no valen nada a los ojos de un profano del tiro. Ni siquiera a los ojos de la mayoría de los demás tiradores.
Vale más que al lado de un no-creyente se ponga una persona entendida, le diga, le explique, le permita cargar el arma, por supuesto siempre bajo su mirada, amartillarla y dispararla, que todos los dieces que puedas hacer en tu día más inspirado.
No sé qué requisitos hacen falta para sacar tan sólo la licencia de avancarga o si esto es posible, la mía me la regalaron con la F.
Quiero decir con esto que un evento de estos con un seguro de día de la federación, como se hace cualquier tirador de plato en una tirada de pueblo, y una persona con licencia a su lado o un monitor del club puede hacer accesible que cualquiera pruebe por primera vez el tiro con avancarga.
El de verdad, el que hace uno mismo, no el diez que hace no sé quien que tira muy bien. Y eso va a hacer más por el tiro en general que invitar a ver a los otros tiradores de F cómo se hacen dieces con el Miguelito o con el Kuchifritin.
Personalmente ignoraba la cantidad de variedades que hay dentro de la avancarga, por eso creo que para un profano del tiro poder ver varias armas de este tipo y con alguna iniciativa del tipo: "prueba 5 armas de avancarga por 10 eur", incluyendo el seguro por ej, o algo similar, podría acabar por engancharle.
Al final la gente puede ver como interesante lo que hacen otros pero se emocionan por lo que hacen ellos mismos.
El camino no es convencer a los pocos que de un modo u otro estamos convencidos, es acercar el tiro a todos aquellos que son totalmente ajenos a él. El beneficio está en la inclusión.
Luego pues como todo, la emoción les durará dos días, dos meses o toda la vida. Pero eso pasa en todas las actividades que uno se imagine, o no conocéis a nadie que se apuntó a un gimnasio y no volvió, o compró unas zapatillas de running que usó dos veces y así.
Sólo una opinión, espero que nadie se moleste.
Un saludo
Última edición por
DrZola el 20 Dic 2019 13:31, editado 1 vez en total.
