Nuestros recuerdos de los veteranos de la Guerra Civil.
Re: Nuestros recuerdos de los veteranos de la Guerra Civil.
El principal teatro de Operaciones que le tocó, o por lo menos del que más me habló, fue el frente en Talavera de la Reina y el de Madrid. Me contó que como dotación les daban, además del uniforme, una manta, un Máuser, la bayoneta, cartucheras de cuero y cinco "peines". Hoy en día con tan poca munición no creo que ningún ejército mandase a nadie al combate, pero creo que en el bando republicano hubo combatientes con peor dotación de munición. Aún así decía que le sorprendía la gran cantidad de disparos que se hacían y los pocos muertos y heridos que había.
Decía que a lo que más miedo tenían era a la aviación, hasta que no les empezaban a ametrallar, soltar bombas o pasar de largo, no sabían si era propia o el enemigo.
Le sorprendía que a los republicanos, además de todo tipo de insultos, sus mandos se referían a ellos como "Rebeldes", cosa que a él le extrañaba mucho, ya que aunque era un simple campesino con no mucha cultura, siempre fue consciente que el bando sublevado eran ellos.
De las principales anécdotas en combate que contaba había varias que le marcaron mucho:
Decía que a lo que más miedo tenían era a la aviación, hasta que no les empezaban a ametrallar, soltar bombas o pasar de largo, no sabían si era propia o el enemigo.
Le sorprendía que a los republicanos, además de todo tipo de insultos, sus mandos se referían a ellos como "Rebeldes", cosa que a él le extrañaba mucho, ya que aunque era un simple campesino con no mucha cultura, siempre fue consciente que el bando sublevado eran ellos.
De las principales anécdotas en combate que contaba había varias que le marcaron mucho:
Última edición por Amilotz el 13 Jun 2016 00:47, editado 2 veces en total.
Re: Nuestros recuerdos de los veteranos de la Guerra Civil.
Por lo visto combatieron en la ribera de un río donde nada más llegar descubrieron unos peces enormes. Todo el mundo se disponía a pescar alguno hasta que tras los peces empezó a aparecer algún cadáver y ya nadie pensó en comer pescado. Contaba que un bando estaba en una orilla y el otro en la otra y que además de disparos, se "tiraban" insultos de lado a lado.
En cierta ocasión tenían que cruzar un puente para pasar al otro lado y nadie quería cruzarlo por temor a que encima de éste, sin protección, los acribillasen los "rojos". El oficial al mando mandó formar a la tropa, montó en su caballo, y él en cabeza, les obligo a cruzar el puente desfilando. No sabía como no los mataron a todos, pero la cosa es que en formación y al paso, lo cruzaron.
Tenía la imagen de un oficial de la Legión, un teniente o un Alférez (fallo mío de memoria), casi un niño, al que vio partir en cabeza de sus hombres contra el enemigo, decía que impresionaba el valor y arrojo que mostraba (sentía admiración por la Legión)... y como poco después depositaban su cuerpo muerto cerca de donde ellos permanecían atrincherados.
En cierta ocasión tenían que cruzar un puente para pasar al otro lado y nadie quería cruzarlo por temor a que encima de éste, sin protección, los acribillasen los "rojos". El oficial al mando mandó formar a la tropa, montó en su caballo, y él en cabeza, les obligo a cruzar el puente desfilando. No sabía como no los mataron a todos, pero la cosa es que en formación y al paso, lo cruzaron.
Tenía la imagen de un oficial de la Legión, un teniente o un Alférez (fallo mío de memoria), casi un niño, al que vio partir en cabeza de sus hombres contra el enemigo, decía que impresionaba el valor y arrojo que mostraba (sentía admiración por la Legión)... y como poco después depositaban su cuerpo muerto cerca de donde ellos permanecían atrincherados.
Re: Nuestros recuerdos de los veteranos de la Guerra Civil.
Si no molesta que acapare tanto el hilo, seguiré en otro momento con más anécdotas suyas.
Re: Nuestros recuerdos de los veteranos de la Guerra Civil.
Lo del puente la verdad es que asusta
un poco.

- fierabras
- 375 HH Magnum
- Mensajes: 4224
- Registrado: 11 Sep 2014 15:40
- Contactar:
- Estado: Desconectado
Re: Nuestros recuerdos de los veteranos de la Guerra Civil.
Amilotz escribió:Fué el único muerto en combate de todo el pueblo; mientras se encontraba sentado con la espalda apoyada en un árbol, una bala perdida atravesó el árbol y lo mató en el acto, o eso contaron en el pueblo, y él lo creía, ya que decía que la bala de un Máuser era muy capaz de atravesar un tronco de árbol. A mí esa afirmación me sorprendía y aún extraña hoy en día, pero así lo contaba él.
Muy interesante toda la historia ...
Sobre lo del Mauser, tengo este libro y mira lo que dice:


Es perfectamente posible.
Re: Nuestros recuerdos de los veteranos de la Guerra Civil.
Pues si se me permite seguiré con algunos hechos de armas más.
Entre otras cosas que le marcaron de la contienda, también me comentó algo que le tocó hacer pero de lo que no se sentía ni mucho menos orgulloso:
Me comentó que una madrugada de "descubierta", formación en línea, encontraron a un militar escondido. Éste les dijo que era compañero de otra unidad y que por la noche se había perdido. Parece ser que en ningún momento la tropa dudó de él. Le dieron de comer y beber. Mientras estaba en perfecta armonía con sus compañeros, algún o algunos mandos registraban sus pertenencias sin que la tropa lo supiese y dio la casualidad que en un zurrón que portaba alguien encontró una estrella roja, distintivo de la oficialidad de la Republica. Me contó que mientras estaban contándose anécdotas con aquel desconocido, compartiendo la comida y el agua, de improviso llegaron unos mandos y empezaron a pegarle. Nadie entendía nada de lo que estaba pasando, hasta que uno de ellos sacó la dichosa estrella roja. Aquel hombre confesó ser un oficial de la República, con la misión de entorpecer el avance "nacional" volando puentes y con cuantas acciones de sabotaje pudiese hacerlo, era de un pueblo de la zona y conocía el entorno perfectamente.
De inmediato los mandos dieron la orden de dirigirse al pueblo de aquel desgraciado. A quien me lo contó y a sus compañeros les dieron la orden de sacar a todo el pueblo a la calle. Abrieron puertas a culatazos y se llevaron a todos a un lugar. En primera fila la mujer y el hijo de cinco años de aquel desdichado. La hija de quién esto me contó tenía la misma edad que aquel niño y a él aquello le produjo una profunda tristeza. Se formó un pelotón de 18 falangistas y fusilaron a aquel hombre en presencia de todo el pueblo y de su familia. Me explicó que en esos pelotones el oficial al mando tenía la potestad de dar o no el "tiro de gracia" y de hasta en donde quería darlo. Me dijo que se lo dio en el pecho, y que le impresionó que el cuerpo se elevó casi medio metro del suelo con el impacto de ese proyectil. Recordaba perfectamente a aquel niño de cinco años.
Entre otras cosas que le marcaron de la contienda, también me comentó algo que le tocó hacer pero de lo que no se sentía ni mucho menos orgulloso:
Me comentó que una madrugada de "descubierta", formación en línea, encontraron a un militar escondido. Éste les dijo que era compañero de otra unidad y que por la noche se había perdido. Parece ser que en ningún momento la tropa dudó de él. Le dieron de comer y beber. Mientras estaba en perfecta armonía con sus compañeros, algún o algunos mandos registraban sus pertenencias sin que la tropa lo supiese y dio la casualidad que en un zurrón que portaba alguien encontró una estrella roja, distintivo de la oficialidad de la Republica. Me contó que mientras estaban contándose anécdotas con aquel desconocido, compartiendo la comida y el agua, de improviso llegaron unos mandos y empezaron a pegarle. Nadie entendía nada de lo que estaba pasando, hasta que uno de ellos sacó la dichosa estrella roja. Aquel hombre confesó ser un oficial de la República, con la misión de entorpecer el avance "nacional" volando puentes y con cuantas acciones de sabotaje pudiese hacerlo, era de un pueblo de la zona y conocía el entorno perfectamente.
De inmediato los mandos dieron la orden de dirigirse al pueblo de aquel desgraciado. A quien me lo contó y a sus compañeros les dieron la orden de sacar a todo el pueblo a la calle. Abrieron puertas a culatazos y se llevaron a todos a un lugar. En primera fila la mujer y el hijo de cinco años de aquel desdichado. La hija de quién esto me contó tenía la misma edad que aquel niño y a él aquello le produjo una profunda tristeza. Se formó un pelotón de 18 falangistas y fusilaron a aquel hombre en presencia de todo el pueblo y de su familia. Me explicó que en esos pelotones el oficial al mando tenía la potestad de dar o no el "tiro de gracia" y de hasta en donde quería darlo. Me dijo que se lo dio en el pecho, y que le impresionó que el cuerpo se elevó casi medio metro del suelo con el impacto de ese proyectil. Recordaba perfectamente a aquel niño de cinco años.
Re: Nuestros recuerdos de los veteranos de la Guerra Civil.
Terrible y desgraciado suceso, pero la triste realidad es que al que a retaguardia enemiga se le captura con uniforme falso o disimulado y en labores de sabotaje se le puede fusilar por espía y es legítimo.
Seguramente por eso le pegaron, por disimular su condición y abusar de la buena fe de quienes le ofrecían comida y bebida.
Si se hubiera identificado y rendido no lo hubieran matado, porque la gente no solía ser innecesariamente sanguinaria.
Seguramente por eso le pegaron, por disimular su condición y abusar de la buena fe de quienes le ofrecían comida y bebida.
Si se hubiera identificado y rendido no lo hubieran matado, porque la gente no solía ser innecesariamente sanguinaria.
Re: Nuestros recuerdos de los veteranos de la Guerra Civil.
Siento discrepar contigo Hoplon, en la guerra todos los bandos suelen ser innecesariamente sanguinarios, y sobretodo en las guerras civiles, no hay mayor odio que el que se puede generar entre gente que se conoce, viejas rencillas y rencores.
Algún ejemplo al hilo de esto que te comento y extraído de lo que empiezan a parecer ya las memorias de ese soldado del bando nacional.
Me contó, no recuerdo ya si él lo vío, se lo contaron o formaba parte de la "propaganda" de guerra, que en cierta ocasión "los rojos" apresaron a un oficial "nacional", lo asesinaron y lo castraron, metiéndole los genitales y el pene en la boca, para después dejar su cuerpo abandonado a la vista de todo el que pasase cerca suyo.
En otra ocasión me narró que les vino un reclutador de Falange, tras una arenga, repartió a todos los allí presentes un emblema de Falange para ponerlo en el uniforme. Por la noche, uno de sus sargentos, les ordenó que le entregasen los emblemas falangistas y los echo a una hoguera de las que usaban para calentase y cocinar. Les dijo si estaban locos por aceptar tal insignia y ponérsela en el uniforme, si los "rojos" les pillaban con ella, los fusilaban inmediatamente.
Algún ejemplo al hilo de esto que te comento y extraído de lo que empiezan a parecer ya las memorias de ese soldado del bando nacional.
Me contó, no recuerdo ya si él lo vío, se lo contaron o formaba parte de la "propaganda" de guerra, que en cierta ocasión "los rojos" apresaron a un oficial "nacional", lo asesinaron y lo castraron, metiéndole los genitales y el pene en la boca, para después dejar su cuerpo abandonado a la vista de todo el que pasase cerca suyo.
En otra ocasión me narró que les vino un reclutador de Falange, tras una arenga, repartió a todos los allí presentes un emblema de Falange para ponerlo en el uniforme. Por la noche, uno de sus sargentos, les ordenó que le entregasen los emblemas falangistas y los echo a una hoguera de las que usaban para calentase y cocinar. Les dijo si estaban locos por aceptar tal insignia y ponérsela en el uniforme, si los "rojos" les pillaban con ella, los fusilaban inmediatamente.
Re: Nuestros recuerdos de los veteranos de la Guerra Civil.
Tal vez en unidades fuertemente politizadas, pero por relatos de otras personas yo he llegado a la conclusión opuesta: muchos de los intervinientes en la guerra eran conscientes de que les había "tocado" el bando en el que luchaban por un sorteo, y que pudieran haber estado en el otro.
Tal fue el caso de uno de mis abuelos: al ser hijo de terratenientes tal vez hubiera elegido (tal vez, digo) el bando nacional, pero por ubicación y edad le tocó ser movilizado por el otro bando.
Tal fue el caso de uno de mis abuelos: al ser hijo de terratenientes tal vez hubiera elegido (tal vez, digo) el bando nacional, pero por ubicación y edad le tocó ser movilizado por el otro bando.
Re: Nuestros recuerdos de los veteranos de la Guerra Civil.
En eso estoy de acuerdo contigo, es más la persona que me contó todas estas vivencias de la guerra, le tocó el bando "nacional" simplemente por donde estaba ubicado el pueblo donde vivía. Pero te aseguro que ambos bandos hicieron salvajadas y se asesinó y se estigmatizó mucho solamente por viejas rencillas, envidias y demás.
Me gustaría también contar lo que me habló sobre los aliados del bando nacional, ya que antes alguien ha hablado de los italianos y demás.
De los italianos me dijo que eran unos auténticos impresentables, que robaban todo cuanto caía en sus manos, no podía ni verlos.
De los alemanes decía que eran unos militares muy estrictos, que se tiraban todo el día trazando mapas, haciendo cálculos, tomando notas.
De los moros, me contó que sobretodo les extrañaba de ellos que "rezaban al sol"; ya os he dicho que quién esto me contó era un hombre de campo, y es curioso lo culto e instruido que era para unas cosas y como a otras les ponía "su propio punto de vista"
También decía de ellos que eran muy fieros en combate, que entraban como fuerza de choque y arrasaban con todo. En concreto me dijo que un amanecer que estaba dormido en su trinchera, de repente empezó a ver sombras que pasaban por encima suyo, al principio no sabía que estaba pasando hasta que a las sombras se les unió el ruido de la artillería. Eran tropas moras saltando por encima de sus posiciones y cargando en silencio contra el enemigo, con la única protección de su sigilo y al final de la artillería.
Me gustaría también contar lo que me habló sobre los aliados del bando nacional, ya que antes alguien ha hablado de los italianos y demás.
De los italianos me dijo que eran unos auténticos impresentables, que robaban todo cuanto caía en sus manos, no podía ni verlos.
De los alemanes decía que eran unos militares muy estrictos, que se tiraban todo el día trazando mapas, haciendo cálculos, tomando notas.
De los moros, me contó que sobretodo les extrañaba de ellos que "rezaban al sol"; ya os he dicho que quién esto me contó era un hombre de campo, y es curioso lo culto e instruido que era para unas cosas y como a otras les ponía "su propio punto de vista"

También decía de ellos que eran muy fieros en combate, que entraban como fuerza de choque y arrasaban con todo. En concreto me dijo que un amanecer que estaba dormido en su trinchera, de repente empezó a ver sombras que pasaban por encima suyo, al principio no sabía que estaba pasando hasta que a las sombras se les unió el ruido de la artillería. Eran tropas moras saltando por encima de sus posiciones y cargando en silencio contra el enemigo, con la única protección de su sigilo y al final de la artillería.
- fierabras
- 375 HH Magnum
- Mensajes: 4224
- Registrado: 11 Sep 2014 15:40
- Contactar:
- Estado: Desconectado
Re: Nuestros recuerdos de los veteranos de la Guerra Civil.
Hoplon escribió:Tal vez en unidades fuertemente politizadas, pero por relatos de otras personas yo he llegado a la conclusión opuesta: muchos de los intervinientes en la guerra eran conscientes de que les había "tocado" el bando en el que luchaban por un sorteo, y que pudieran haber estado en el otro.
Tal fue el caso de uno de mis abuelos: al ser hijo de terratenientes tal vez hubiera elegido (tal vez, digo) el bando nacional, pero por ubicación y edad le tocó ser movilizado por el otro bando.
En el sentido de lo que comentas, creo que es muy interesante este artículo de Pedro Corral titulado "La Guerra Civil contada a los políticos"
Se trata de un periodista y escritor que se ha especializado en la guerra civil. Recientemente ha salido en los medios ya que es concejal del PP en el ayuntamiento de Madrid y se encargó por su experiencia en el tema de criticar y sacar los errores cometidos en las primeras medidas que ha adoptado el ayuntamiento para aplicar la ley de la memoria histórica en la capital y que ahora una comisión se está encargando de realizar. Pero consideraciones políticas aparte creo que trata el tema con objetividad, extraigo unos párrafos de su artículo:
https://www.abc.es/opinion/abci-guerra-c ... ticia.html
"Lo primero que deben saber es que las fuerzas militares de ambos bandos fueron engrosadas mayoritariamente, desde las primeras semanas, por soldados reclutados a la fuerza. Las imágenes propagandísticas de millones de aguerridos milicianos y falangistas son solo eso, pura propaganda."
"Tengan siempre en cuenta que el factor clave de la inmensa mayoría de los protagonistas de la contienda fue la lealtad geográfica. Esto significa, sencillamente, que la inmensa mayoría de los españoles no tuvo libertad para elegir bando."
"La consecuencia de la lealtad geográfica es que soldados de izquierdas reclutados en el Ejército franquista tuvieron que combatir contra soldados de derechas enfilados en el Ejército Popular. "
"la llamada a filas se produjo inmediatamente. Los dos bandos se dieron cuenta en apenas dos meses de que no tenían efectivos suficientes para matarse. El bando franquista fue el más madrugador a la hora de llamar a quintas, el 8 de agosto de 1936, y desde entonces reclutaría 15 reemplazos. Pero apenas mes y medio después, el 30 de septiembre de 1936, se abrían las cajas de recluta en la zona republicana"
"Las quintas reclutadas durante la contienda por ambos bandos deberían haber sumado un total de 5 millones de hombres. Sin embargo, el total de españoles incorporados a filas no pasaron de aproximadamente 2,5 millones: 1,3 millones en el Ejército Popular y 1,2 en el Ejército franquista. Los otros 2,5 millones de potenciales reclutas se las ingeniaron para no coger el fusil e ir al frente"
"es conveniente que sepan que en la guerra hubo una enorme picaresca para no ir a filas. El mercadeo de carnés de afiliados a partidos y sindicatos anteriores a 1936 para conseguir enchufes en la retaguardia, así como el de falsos certificados médicos de inutilidad, obligó a las autoridades de ambas zonas a realizar recurrentes inspecciones en las fábricas para desenmascarar a los enchufados y continuas revisiones médicas para descubrir a los falsos inútiles. "
"la guerra contra los desertores alcanzó en ambos bandos infinitos grados de crueldad. En el franquista se detenía a los familiares del desertor y se confiscaban sus bienes, y si los familiares tenían antecedentes izquierdistas era probable que acabaran fusilados. En el bando republicano se llegaría a dictar en 1938 una orden extraordinariamente severa: el envío del padre del desertor a cubrir su puesto en el frente.
"A los desertores se sumaron los automutilados, que se disparaban a sí mismos en las manos o los pies para huir de las trincheras. Las autolesiones fueron tan numerosas que se las llegó a denominar «heridas contagiosas». Los automutilados podían ser fusilados en el acto, aunque también se les dejaba en primera línea sin cura para que la gangrena los liquidara."
Tiene un par de libros publicados sobre estos temas que aún no he tenido la oportunidad de leer:
'Desertores. La guerra civil que nadie quiere contar' y 'Si me quieres escribir. Gloria y castigo de la 84ª Brigada Mixta del Ejército Popular'
Re: Nuestros recuerdos de los veteranos de la Guerra Civil.
Sólo puedo añadir a vuestras aclaraciones, que son muy sensatas y ponderadas, que posiblemente el que hiciera salvajadas era ya un salvaje antes de la guerra, y el que fuera normal, no creo que se convirtiera en un animal de golpe y porrazo.
Re: Nuestros recuerdos de los veteranos de la Guerra Civil.
Recuerdo la novela "madera de héroe" de MIguel Delibes: uno de los personajes pasa por una situación muy dura: marino de profesión, se ve obligado a servir en el bando contrario al que despierta sus simpatías, y además se entera de que los de su mismo bando han matado a su hermano.
- fierabras
- 375 HH Magnum
- Mensajes: 4224
- Registrado: 11 Sep 2014 15:40
- Contactar:
- Estado: Desconectado
Re: Nuestros recuerdos de los veteranos de la Guerra Civil.
REpetido al editar ...
Última edición por fierabras el 17 Jun 2016 12:02, editado 1 vez en total.
- fierabras
- 375 HH Magnum
- Mensajes: 4224
- Registrado: 11 Sep 2014 15:40
- Contactar:
- Estado: Desconectado
Re: Nuestros recuerdos de los veteranos de la Guerra Civil.
Hoplon escribió:Sólo puedo añadir a vuestras aclaraciones, que son muy sensatas y ponderadas, que posiblemente el que hiciera salvajadas era ya un salvaje antes de la guerra, y el que fuera normal, no creo que se convirtiera en un animal de golpe y porrazo.
No sé, yo creo que vivir prolongadamente en un ambiente violento y deshumanizado te transforma y una persona normal llega a hacer cosas terribles en ese contexto y se pierden los remordimientos y el sentimiento de culpa ...
Por ejemplo, no creo que todos los rusos que conquistaron la alemania nazi fueran enfermos sexuales y sin embargo prácticamente todas la mujeres desde niñas a ancianas de los territorios alemanes que ocuparon fueron violadas ...
Y a esto que hicieron los rusos en la SGM, que es de siempre conocido, se ha unido la reciente revelación, ocultada hata ahora de que el resto de los aliados hicieron algo parecido, no a tan gran escala como los soviéticos, pero también fue masivo, más de 860.000 violaciones:
https://www.elmundo.es/cronica/2015/03/0 ... b4570.html
Y esto lo hacía gente que era normal antes de la guerra y que seguro siguieron siéndolo después ..
No creo que todos los serbios, croatas y bosnios fueran psicópatas o enfermos sexuales, y sin embargo eran habituales las ejecuciones, masacres, represalias, violaciones y macroburdeles en los que esclavizaban a las mujeres del bando contrario y a los que iba toda la tropa (esto último sobre todo lo hicieron los serbios) ... y no eran cosas anecdóticas, era lo habitual ...
Re: Nuestros recuerdos de los veteranos de la Guerra Civil.
La guerra es salvaje por si misma y embrutece a cualquiera.
En cierta ocasión escuche una conversación de varios amigos de mí abuelo. Era una tarde soleada, estaban sentados en un banco y yo llegue acompañando a mi abuelo de sacar a su perro a pasear. Uno de ellos, que curiosamente parecía más joven que mi abuelo (que no hizo la guerra), comentaba que él había hecho la guerra de gudari en el ejército del Gobierno Vasco, y que tenían tales carencias de todo tipo de medios, que en una ocasión recibieron la orden de no hacer prisioneros, y simplemente porque les era muy difícil mantenerlos ante la escasez de todo que tenían.
A mí aquel hombre no me parecía ningún salvaje, ni creo que lo fuese hacia casi 60 años. Yo simplemente escuchaba y no recuerdo que nadie le preguntase si llevaron acabo esa orden, pero estoy seguro que en el contexto de una Guerra, luchando por sobrevivir, ninguno se plantó y le dijo a sus mandos que esa orden era una salvajada.
La guerra marca mucho y por algo será. Ya he comentado que quien me contó sus vivencias como soldado tardo dos generaciones en hacerlo, pero puedo añadir que conozco varios casos de ancianos con demencia senil que vivían aterrados encerrados en sus recuerdos de guerra. En concreto recuerdo uno que decía ver en ocasiones al diablo en su habitación, y añadía que desde la guerra no lo había vuelto a ver hasta entonces. ¿Que le puede hacer la guerra a la mente de una persona para marcarla de ese modo, hasta el punto de en un estado de demencial senil, imponerse sobre otras vivencias?.
En cierta ocasión escuche una conversación de varios amigos de mí abuelo. Era una tarde soleada, estaban sentados en un banco y yo llegue acompañando a mi abuelo de sacar a su perro a pasear. Uno de ellos, que curiosamente parecía más joven que mi abuelo (que no hizo la guerra), comentaba que él había hecho la guerra de gudari en el ejército del Gobierno Vasco, y que tenían tales carencias de todo tipo de medios, que en una ocasión recibieron la orden de no hacer prisioneros, y simplemente porque les era muy difícil mantenerlos ante la escasez de todo que tenían.
A mí aquel hombre no me parecía ningún salvaje, ni creo que lo fuese hacia casi 60 años. Yo simplemente escuchaba y no recuerdo que nadie le preguntase si llevaron acabo esa orden, pero estoy seguro que en el contexto de una Guerra, luchando por sobrevivir, ninguno se plantó y le dijo a sus mandos que esa orden era una salvajada.
La guerra marca mucho y por algo será. Ya he comentado que quien me contó sus vivencias como soldado tardo dos generaciones en hacerlo, pero puedo añadir que conozco varios casos de ancianos con demencia senil que vivían aterrados encerrados en sus recuerdos de guerra. En concreto recuerdo uno que decía ver en ocasiones al diablo en su habitación, y añadía que desde la guerra no lo había vuelto a ver hasta entonces. ¿Que le puede hacer la guerra a la mente de una persona para marcarla de ese modo, hasta el punto de en un estado de demencial senil, imponerse sobre otras vivencias?.
Re: Nuestros recuerdos de los veteranos de la Guerra Civil.
Voy a continuar con más anécdotas:
Otra cosa que me contó muy enojado es que existía el castigo de raparte al cero por faltas de disciplina y similares. Yo lo había visto en alguna "españolada" de la guerra civil, pero él me confirmó que así era, y lo sabía muy bien porque lo sufrió; Tras un permiso en su casa se retrasó uno o varios días en volver a su unidad, decía que no por voluntad propia, si no por el estado de las carreteras y líneas ferroviarias. Así se lo hizo saber al sargento que lo recibió con una bronca enorme, pero éste no le hizo ni caso y lo mandó rapar al cero. Aquello le sentó muy mal, y no solo por lo "injusto" del castigo, si no porque debía de ser bastante bochornoso. Guardaba muy mal recuerdo de aquel mando y hasta se alegraba de alguna desgracia personal que le pasó al suboficial.
También me contó que en el frente había un soldado que siempre iba acompañado de un perrillo, un ratonero. Este se dedicaba a ganarse unas "perras" haciendo "joyas" con piezas de proyectiles y metralla, y de todo aquello que fuese metálico. Por lo visto era muy peculiar, y conocido por todos. Una bomba sin explotar los mató a él y su perro cuando la manipuló creyéndola inerte para coger alguna pieza con la que hacer alguna de sus "joyas". Curiosamente un amigo mío tiene un anillo-sello de su abuelo, que se lo hizo un soldado en la Guerra Civil con una moneda de "duro". Nunca le pregunté en que frente estuvo su abuelo (luchó en el bando "nacional"), pero ya sería mucha casualidad que lo hubiese hecho el mismo del que me hablaron a mí.
Otra cosa que me contó muy enojado es que existía el castigo de raparte al cero por faltas de disciplina y similares. Yo lo había visto en alguna "españolada" de la guerra civil, pero él me confirmó que así era, y lo sabía muy bien porque lo sufrió; Tras un permiso en su casa se retrasó uno o varios días en volver a su unidad, decía que no por voluntad propia, si no por el estado de las carreteras y líneas ferroviarias. Así se lo hizo saber al sargento que lo recibió con una bronca enorme, pero éste no le hizo ni caso y lo mandó rapar al cero. Aquello le sentó muy mal, y no solo por lo "injusto" del castigo, si no porque debía de ser bastante bochornoso. Guardaba muy mal recuerdo de aquel mando y hasta se alegraba de alguna desgracia personal que le pasó al suboficial.
También me contó que en el frente había un soldado que siempre iba acompañado de un perrillo, un ratonero. Este se dedicaba a ganarse unas "perras" haciendo "joyas" con piezas de proyectiles y metralla, y de todo aquello que fuese metálico. Por lo visto era muy peculiar, y conocido por todos. Una bomba sin explotar los mató a él y su perro cuando la manipuló creyéndola inerte para coger alguna pieza con la que hacer alguna de sus "joyas". Curiosamente un amigo mío tiene un anillo-sello de su abuelo, que se lo hizo un soldado en la Guerra Civil con una moneda de "duro". Nunca le pregunté en que frente estuvo su abuelo (luchó en el bando "nacional"), pero ya sería mucha casualidad que lo hubiese hecho el mismo del que me hablaron a mí.
Re: Nuestros recuerdos de los veteranos de la Guerra Civil.
A ver si podemos reflotar un poco este hilo...
Si se me permite contaré algún recuerdo más de aquel hombre.
En cierta ocasión me contó que su unidad quedó cercada y aislada por el enemigo, en esas estaban, muertos de miedo y de hambre, cuando ya de noche descubrieron que alguien avanzaba furtivamente a su posición. Al darle el alto antes de abrir fuego, este se identificó como soldado del bando nacional y pidió hablar con quién me lo contó. Extrañado fue requerido para identificar a aquel hombre y cuando llegó hasta él descubrió que era su mejor amigo en la unidad, se fundieron en un abrazo y su amigo le contó que llevaba todo el día viendo amontonar cuerpos totalmente ensangrentados, siendo casi imposible identificarlos, temiendo por él, cogió un trozo de pan duro y tocino, y cruzó las líneas a su encuentro para saber si seguía vivo y para llevarle algo de comer, ya que en retaguardia sospechaban que estaban pasando muchas penuria, aislados como estaban. He de decir que al llegar a la parte de que su mejor amigo había cruzado las líneas enemigas para llevarle pan duro y tocino, a este hombre se le quebró la voz y se le humedecieron los ojos.
Lógicamente se que él sobrevivió a la contienda, pero nunca más volvió ha hablarme de aquel amigo e incluso recuerdo que se refirió a él como "mí mejor amigo", sin citar su nombre. Como el hombre no estaba con ánimos de continuar la historia, no se que fue de aquel amigo, ni si le castigaron, condecoraron o que pasó con él, pero que no volviese nunca a mencionarlo, no le pusiese nombre y llorase al recordar su gesto...
Otra anécdota que me contó, y que da muestra de lo surrealistas que pueden ser las guerras, fue un día que estaban moviéndose en convoy de camiones con poca luz y faros apagados. No sabe como, se perdieron y aparecieron en un punto de la carretera donde un único centinela les dio el alto. Me contaba que vestía muy similar a ellos, pero se veía que su equipamiento era peor, por lo que pronto se dieron cuenta que estaban en las líneas de la República. Un sargento se apeó del camión y antes de que el centinela hablase le requirió enérgicamente a que indicase a que unidad pertenecía. El centinela nombró a una de la República y el Sargento contestó que ellos a la bandera de algún mando republicano (me dijo el nombre, pero mi mala memoria...). El centinela le saludo y el sargento montó en el camión y dio la orden de dar media vuelta y salir de allí pitando. Cuando terminó de contarme la anécdota me dijo que estaba seguro que el centinela sabía que eran nacionales, pero también que si daba la voz de alarma, de allí no salía vivo nadie, el primero en caer él, y suponía que eso fue lo que motivo que les dejase ir.
Si se me permite contaré algún recuerdo más de aquel hombre.
En cierta ocasión me contó que su unidad quedó cercada y aislada por el enemigo, en esas estaban, muertos de miedo y de hambre, cuando ya de noche descubrieron que alguien avanzaba furtivamente a su posición. Al darle el alto antes de abrir fuego, este se identificó como soldado del bando nacional y pidió hablar con quién me lo contó. Extrañado fue requerido para identificar a aquel hombre y cuando llegó hasta él descubrió que era su mejor amigo en la unidad, se fundieron en un abrazo y su amigo le contó que llevaba todo el día viendo amontonar cuerpos totalmente ensangrentados, siendo casi imposible identificarlos, temiendo por él, cogió un trozo de pan duro y tocino, y cruzó las líneas a su encuentro para saber si seguía vivo y para llevarle algo de comer, ya que en retaguardia sospechaban que estaban pasando muchas penuria, aislados como estaban. He de decir que al llegar a la parte de que su mejor amigo había cruzado las líneas enemigas para llevarle pan duro y tocino, a este hombre se le quebró la voz y se le humedecieron los ojos.
Lógicamente se que él sobrevivió a la contienda, pero nunca más volvió ha hablarme de aquel amigo e incluso recuerdo que se refirió a él como "mí mejor amigo", sin citar su nombre. Como el hombre no estaba con ánimos de continuar la historia, no se que fue de aquel amigo, ni si le castigaron, condecoraron o que pasó con él, pero que no volviese nunca a mencionarlo, no le pusiese nombre y llorase al recordar su gesto...
Otra anécdota que me contó, y que da muestra de lo surrealistas que pueden ser las guerras, fue un día que estaban moviéndose en convoy de camiones con poca luz y faros apagados. No sabe como, se perdieron y aparecieron en un punto de la carretera donde un único centinela les dio el alto. Me contaba que vestía muy similar a ellos, pero se veía que su equipamiento era peor, por lo que pronto se dieron cuenta que estaban en las líneas de la República. Un sargento se apeó del camión y antes de que el centinela hablase le requirió enérgicamente a que indicase a que unidad pertenecía. El centinela nombró a una de la República y el Sargento contestó que ellos a la bandera de algún mando republicano (me dijo el nombre, pero mi mala memoria...). El centinela le saludo y el sargento montó en el camión y dio la orden de dar media vuelta y salir de allí pitando. Cuando terminó de contarme la anécdota me dijo que estaba seguro que el centinela sabía que eran nacionales, pero también que si daba la voz de alarma, de allí no salía vivo nadie, el primero en caer él, y suponía que eso fue lo que motivo que les dejase ir.
¿Quién está conectado?
Usuarios navegando por este Foro: No hay usuarios registrados visitando el Foro y 11 invitados