Se trata de una broma ideada en 1910 por el acomodado aristócrata Horace de Vere Cole, con la complicidad de Virginia Woolf y un grupo de amigos, este aristócrata se puso en contacto con el Almirantazgo británico, pretendiendo ser el emperador de Abisinia.
Se informó a las autoridades,que deseaba inspeccionar la "Home Fleet", en su visita a la Gran Bretaña, se disfrazaron con túnicas y turbantes, maquillándose el rostro, recibidos por las autoridades navales, visitaron el Acorazado Dreadnought simulando un idioma que no conocían, cuando "encontraban" algún detalle sorprendente se decían entre ellos ¡Bunga, bunga! simulando maravillarse.
Virginia Woolf dijo más tarde que cuando el verdadero emperador de Abisinia llegó a Londres semanas más tarde, donde quiera que fuera, los niños de la calle corrían detrás de él gritando ¡BUNGA BUNGA!
(El término reapareció hacia el final de la Primera Guerra Mundial, después de que el HMS Dreadnought hundió un submarino alemán Según el Capitán retirado de la Marina Real Jack Broome en el telegrama de felicitación se podía leer: "BUNGA BUNGA".)
Incluso se hicieron una foto de la visita, menudas pintas, pero se lo tragaron enterito

Virginia Woolf (a la izquierda) junto a Horace de Vere Cole.