Mensajepor glockera » 22 Nov 2011 02:45
Buenas noches, estimados foreros:
No sé si será algo tarde para sembrar un poco de paz entre algunos de los miembros que han intervenido en este hilo, y quizás sea la menos adecuada para ello, puesto que soy muy novata tanto en esto de postear como en el universo de las armas.
Lo que me atrajo de este foro, a parte de la ferviente recomendación por parte de un amigo donde su ánimo era que aprendiera mucho sobre el mundo de las armas leyendo en los múltiples foros, fue que todo el mundo podía opinar, y que a los novatos se nos trataba con cariño, respeto por nuestra ignorancia y apoyo en nuestro costoso y torpe caminar. ¿Por qué? Quizás por un vínculo común, la pasión por las armas entendidas desde un punto de vista diferente al simple hecho de que sean herramientas para matar, que es como generalmente se ven desde fuera.
Por eso, cuando en ocasiones se generan estas rencillas entre miembros más o menos veteranos en la vida, en el mundo deportivo, en el mundo de las armas, en el mundo de los foros; cuando perdemos el punto de vista de ayudar, aconsejar, recomendar, poner en común nuestro saber siempre desde la buena fe, desde la experiencia personal y más aún desde el respeto por los otros y sobre todo por uno mismo, y nos centramos en lo que yo sé y tú no, en lo que yo valgo y tú no, en lo que yo he alcanzado y tú no, en definitiva, en el yo sí y en el tú no, perdemos la esencia de estos foros.
Seguro que en el fondo y en el ánimo de ninguno está sembrar polémicas que de forma gratuita falten al respeto, y es que amigos, comunicarse no es fácil, y por escrito, a veces, es más complicado aún. Por eso es importante pensar lo que se escribe y cómo se escribe, cuidar las formas, ser muy respetuoso, y sobre todo asertivo, es decir, saber defender lo tuyo sin ofender al otro.
Y esto, como todo en la vida, también se aprende. Y para aprender, incluido el disparar, no sólo hay que practicar, sino que hay que saber aprender, para lo cual debemos escuchar, observar, entender, reconocer los fallos, las limitaciones y las dudas desde la humildad, reflexionar, hacer críticas constructivas y no dejarse llevar por miedos, orgullos, inseguridades, complejos y demás trabas que nos autoimponemos, que nos generan frustraciones innecesarias y que nos dificultan el aprendizaje. Y es esta última parte, la más complicada de aprender, ya que suele estar gobernada y dirigida por ese señor de verde diminuto de humor cambiante que todos llevamos dentro, y que no hace falta buscar en el exterior. Y esto sí que hay que practicarlo, el controlarle, por nosotros y por los demás, porque nadie tiene porqué sufrir nuestros malos humos, hay que ser reponsables de ellos y de, por lo general, las malas consecuencias que de su uso se derivan.
Estoy convencida de que todos tenemos muchas cosas que aportar a esta magnífica comunidad, pero siempre desde el respeto al otro, que igual que yo busca un bien común, y es que todos podemos enseñar y aprender de todos, porque como dijo alguien...
"No hay nadie tan pequeño,
que no tenga nada que dar,
ni nadie tan grande,
que no tenga nada que necesitar"
Desde el más absoluto respeto a todos, gracias por vuestra lectura.
Un saludo y buenas noches.