Que algunas veces me dicen que me lanzo “a la brava” en algunos proyectos tiene su parte de verdad. Pero esa verdad se remonta a los primeros años en los que un servidor y dos zumabados mas iniciamos la andadura del FT en Euskadi. Hoy día no es así. Contamos con un equipo de personas que trasladan sus virtudes del ámbito laboral a la afición. Fuimos “Bravos” al principio, y ahora, sin falsa modestia creo que podemos decir que sobre todo somos currantes “semi-profesionales”.
Este párrafo anterior, que si bien suena a “no me hace falta abuela”, viene a colación con lo que pude ver y vivir en el II Open de Azadinos.
Allí vi a dos BRAVOS, con mayúsculas, Abelín y Tuuli. Ellos dos solos prepararon un circuito de 50 blancos que yo no aprendí a diseñar a base de ensayo y error al menos hasta 6 u 8 años más tarde.
Podían tranquilamente haber hecho la competición en el “secarral”, de otros años, mucho más fácil de montar. Pero eso no hace los Bravos. Éstos saben el valor que tiene que la gente se desplace 700 km y quieren corresponder con lo que más apreciamos muchos por encima de pines, camisetas o chorizo regalados, que es un recorrido de competición en el que se quiera sorprender al tirador, que le haga estrujarse la cabeza, que al sentarte digas “ostias qué bonito”, o “joder cómo se lo han currado”, o incluso “serán cabrones”

El recorrido de 25 calles formaba un círculo, con aproximadamente la mitad de los blancos en ligero ángulo hacia arriba de cómo mucho 10 grados.
Había puestos de tiro ubicados en medio de un zarzal previamente acondicionado, y no sabías si comerte las moras antes o después de tirar, líneas de tiro de fantasía dentro del bosque con galerías hechas a base de machete y desbrozadora, otras zonas de claro desbroce de arbustos que iban a cortar el viento pero con algunos blancos un metro más alto que quedarían expuestos, y como no, otra zona en la que a pesar de estar limpia por ser terreno de hierba, conformaban un menú de muchos tenedores.

(Plomazos controlado por Abelín en el blanco de 15 mm de mayor ángulo de la competición).

(Rai en una de las calles de las mejores escenografías).
Los blancos, Tecnotarget, como viene siendo habitual funcionaron a la perfección.

(Toñin de Galicia un tirador a tener en cuenta si le pone un tope a la torreta ¡Qué faena tío!.)
Sólo pude ver algunos pequeños puntos de mejora en la ejecución del recorrido que le hubieran dado la matrícula, pero ni merece la pena citarlos pues ya han tomado nota de ello.

(Yo mismo en una de las calles de rodillas, un pleno de los de recordar)
Como decía, dos Bravos, que han pasado días en el monte, dejado de lado a la familia y otras obligaciones para mimarnos. Y no sólo en el monte: Trofeos, pins, gestión de un menú de restaurante a precio de menú del día en pleno domingo, una guapa azapata para la entrega de premios vestida para la ocasión con ropa regional, etc, etc….son detalles que denotan la pasión y el buen gusto por parte de estos “Bravos”.

Os voy a contar una anécdota…. Imaginaros que organizáis un Open, que os viene gente de todos lados, y que a unos pocos días, quien tenía que haceros las peanas de los trofeos os deja tirados. ¿Qué hacéis con todo lo que os queda pendiente?. Abel le metió mano a una barandilla de madera que tenía en su casa….y la convirtió en unas preciosas peanas de madera donde clavar el precioso gallo.

Abelín nos decía al llegar que “uffffffff….no creo que lo volvamos a hacer”, ha sido una pasada de trabajo, estamos reventados y encima es que continuamente hemos tenido que improvisar.
Lo decía con sinceridad y sé perfectamente a qué se refiere por experiencia propia, pero…..la llevas clara Abelín…YO QUIERO VOLVER PORQUE:
Shenia se tuvo que quedar en casa por una gripe y me ha dejado el suelo rayado de envida.
Quiero volver a la Catedral de León para visitarla con calma.
Volveré para divertirme viendo a las tunas en el “humedal” mientras zampamos pinchos morunos, o huevos con chorizo de acompañamiento con la bebida (no sé qué es gratis si la bebida o el pincho).
Volveré porque necesito empaparme de vuestra ilusión y energía.
Volveré porque me lo pasé de la ostia en el recorrido compitiendo primero con Toñin de Galicia y el segundo día con Rupher. Fue fantástica la rivalidad, noté falta de competiciones a nivel mental y eso se paga con errores tremendos pues el pistón no perdona el más mínimo error. Me encanta.
Volveré a Azadinos porque allí hay gente brava, con buen gusto, y un buen saber hacer.

(Tuuli y Abelín)
¡!OLÉ, BRAVO!!
(Todas las fotografías son de Field Target León. (LAFT) )