
Estimados Socios,
Los acontecimientos de las últimas semanas en Ucrania son demasiado importantes como para dejarlos pasar por alto. Son un claro ejemplo de como una joven democracia Europea puede caer en el abismo debido a las presiones exteriores, la ineficiencia política, la corrupción y la ausencia de leyes fuertes que protejan a los ciudadanos.
En Ucrania hemos visto como un pueblo ha sido masacrado por sus FCSE cuando estas en vez de servir a los ciudadanos sirven a un gobierno corrupto. Mientras los ciudadanos eran disparados con armas cortas, AKs y escopetas, su única defensa eran palos, piedras y una mentalidad firme en no seguir transigiendo ni tolerando la degeneración de su país.
Una vez más hemos visto porque a las élites políticas les interesa privar a los ciudadanos de derechos y libertades que los hacen fuertes, con el simple objetivo de preservar su alto ritmo de vida, poder y riqueza.
Thomas Jefferson afirmó que tarde o temprano todo Estado se vuelve contra sus ciudadanos cuanto este alcanza posiciones de supremacía sobre ellos. Da igual que el fin sea bueno o malo, cuando los ciudadanos ceden parte de sus libertades o derechos a cambio de comodidad o seguridad, ya no hay vuelta atrás para recuperarlos si el Estado pasa de ser un ente benévolo a uno malévolo.
La única forma de evitarlo es asegurándose que la soberanía, la democracia, la libertad y la fuerza siempre residan en la figura básica y más esencial del Estado, y esta no es otra que la del ciudadano corriente. Si no se blinda al ciudadano, se le protege y se carga sobre en sus espaldas el peso de la Constitución, no se podrá evitar que su gobierno se vuelva ilegítimo, que las FCSE se vuelvan contra ellos y que la democracia desaparezca.
Nuestra organización hermana Ucraniana, la Asociación de Propietarios de Armas de Ucrania, ya ha pedido esto, han solicitado una Segunda Enmienda en Ucrania, y esto es algo que lejos de ser simbólico no podemos dejar pasar por alto, ya que es la primera vez que ocurre algo así en Europa. Hasta ahora los gobiernos europeos han intentado pasar el tema por alto, argumentando que nuestra estabilidad y seguridad, y la instauración de nuestros valores democráticos no lo hace necesario, pero Ucrania es un claro ejemplo de que la realidad siempre es otra a la que propugnan los políticos, y de todas formas si no es necesario que daño hace. ¿Cuanto más se apuntale la democracia mejor, no?
Desde Anarma como organización de Derechos Civiles, apoyamos todas aquellas medidas que tienen como objeto afianzar los valores democráticos y la libertad en el mundo. Creemos que la base de un estado fuerte y soberano, reside en sus ciudadanos, y creemos firmemente que los ciudadanos deben tener la libertad de decidir si quieren aceptar su responsabilidad con la libertad, nación, valores y principios, para defenderlos de tanto enemigos externos como internos.
Nos preocupa enormemente que la corrupción se instaure en España, y que esta corrupción que avanza tenga un efecto negativo sobre los ciudadanos que desean poseer armas de fuego, ya que los corruptos pueden ver a los Legítimos Usuarios de Armas de Fuego en España como una amenaza para sus intereses.
Así mismo nos parece poco más que increíble que normativas como el Reglamento de Armas se redacten en base a miedos y situaciones infundadas, o bien por directrices de los técnicos del ICAE o por instrucciones de sus jefes políticos, sin tener en cuenta la realidad, es decir la estadística y los datos de crimen y homicidios con armas de fuego, y sin considerar lo más mínimo los derechos de los españoles.
Las restricciones absurdas solo benefician a un colectivo en concreto, y es el de los criminales, los tiranos y los corruptos, y en esta situación el ICAE y el Ministerio de Interior deberían plantearse seriamente que pretenden con estas normativas, que encima criminalizan el uso legítimo de armas de fuego, dividen a la sociedad entre FCSE y no FCSE, violan normas tan elementales como la retroactividad y sobre todo con estás leyes a quien pretenden servir realmente. ¿A los ciudadanos o a los criminales y a los corruptos?
Desde Anarma esperamos que la sensatez se instaure en nuestro país y que nuestra Asociación junto a muchas otras que luchan por las libertades y los derechos civiles en Europa ayuden a cambiar las cosas, para que nosotros ni nuestros hijos tengan que confrontar jamás un caso con el Ucraniano.
Desde aquí no cesaremos en repetir con orgullo como ocurre en el caso suizo o norteamericano, que los ciudadanos legítimamente armados son un valor de responsabilidad, estabilidad, libertad y una salvaguarda esencial para la democracia.
Presidente.
Javier Arnaiz Larson.

Javier Arnaiz Larson
Presidente de ANARMA
Asociación Nacional del Arma, ¡Defendemos Tus Derechos!