Buenos días, chavales
Por fin...se rompió mi maleficio
Anoche, con un ventarrón asqueroso y sin más luz que la procedente de Benidorm difundida por el cielo y sus estrellas, alrededor de las 23:15 horas adivino una sombra negra que antes no estaba ahí.
Miro con el visor y observo un jabalí. Lo miro y remiro para ver si no era una hembra con crías. Lo espero para ver si entra al comedero. Pero nada. El tío estaba olisqueando y husmeando el viento; mirando hacia donde yo estaba y no parecía decidido a ir a comer.
Así que como lo tenía centrado en el visor, esperé un pelín más a que estuviese en la mejor posición.
Voy oprimiendo muy lentamente el disparador puesto al pelo y...¡¡¡PPPOOOOOUUUUUUMMMMMMM!!!!!, mi BRNO .375 H&H Mágnum hace trizas el relativo silencio de la noche en el monte. Con el fulgor del disparo veo que le he pegado de lleno, justo un pelín más arriba del codillo, que era donde apunté. Lo vi caer a plomo con ese mismo resplandor del cañón. Cuando tocó su cuerpo el suelo ya estaba muerto. Ni temblores (estertores), ni quejidos ni, en definitiva, sufrimiento ni consciencia de lo que le había ocurrido.
Cuando recorrí los aprox. 50 metros que me separaban de él, lo encontré en el lugar exacto donde recibió el disparo. Le miro la boca y descubro unos colmillos bien respetables y una hermosas amolederas.
¡¡¡Por fin!!!. Tras unas 10 esperas sin comerme un pimiento, anoche no me fui de vacío.
Os pongo unas fotos hechas "in situ" con mi teléfono móvil.
Un abrazo y suerte a todos
El Cabo Pistolo
