Cartuchos, gramos,plomos,vainas,choques

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colorin_colorado
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Cartuchos, gramos,plomos,vainas,choques

Mensajepor colorin_colorado » 15 Jun 2018 14:36

Hola, haber si un compañero experto y que hayga probado ebalisticamente me confirma un dilema que me quieren hacer creer.
diferentes tipos de tacos ,gramaje, plomo tipos de vainas además de choques.
Un cartucho de 36 gramos no tiene porqué llegar más lejos que un de 32;hay muchos factores como la vaina o culote, taco,eCT. .alguien que entienda bien está física, me lo puede resumir para yo explicarlo aquí a un amigote que no le entra en la molleja.o algún hilo porque es bastante complicado el tema .
Saludos

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Amuerte
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Re: Cartuchos, gramos,plomos,vainas,choques

Mensajepor Amuerte » 15 Jun 2018 20:57

Espero que te ayude aunque no salen los dibujo que con ellos siempre es mas facil de entender.

EL PLOMO EN GRAMOS

Nos ofrecen tal cartucho con el anuncio de que tiene tantos gramos de perdigones. Nos venden retroceso envasado en vainas magnum. Pero... ¿qué obtenemos realmente a cambio?

El método de denominación de los cartuchos de escopeta deriva de una nomenclatura antigua y muy simple. Partiendo de una libra avoirdupois de plomo, que equivale a 453,5 gramos, se elabora una esfera de plomo que pesa justamente eso: una libra. Éste es el calibre 1.

Si se subdivide esta libra en dos bolas de igual peso se obtiene el calibre 2, cuyo diámetro será el que tenga cada una de las dos bolas de 226,75 gramos. Por este método, el calibre 36 (mal llamado 12 milímetros) es el que corresponde a una esfera de plomo del tamaño exacto para que juntando 36 de éstas, pesen en total 453,5 gramos.
En este punto nuestro lector ya ha concluido, seguramente, que el calibre 12 es el que divide por este número los 453,6 gramos avoirdupois. Y, efectivamente, es así: la carga nominal del cartucho 12 son 37,8 gramos que corresponden a una esfera de plomo que tiene un diámetro de 18,9 milímetros, lo cual, a su vez, es el diámetro de un cañón cilíndrico de ese calibre. Para ser prácticos, esta cantidad la vamos a redondear en 38 gramos.
Algunas sorpresas
Sería fácil pensar que todos los perdigones salen del cañón con la misma velocidad, pero no es así
En los primeros tiempos de las escopetas, una vez que los fabricantes definieron el calibre 12 por el método anterior, comenzaron a realizar sus pruebas y comprobaciones. Y, contrariamente a lo que se puede pensar, descubrieron algunas cosas no tan obvias:
Primera, que cuanto más gramos de perdigones hay, peor es el plomeo. Segunda, que disponiendo los mismos gramos, cuanto más finos son los perdigones, más se abren. Y, por último, también comprobaron otra propiedad menos importante: cuanto más gruesa es la munición, mata más lejos.

En esta imagen queda patente que 10 gramos de munición 7ª y el mismo peso de munición 4ª, contienen un número muy distinto de perdigones.
Era difícil encontrar el nexo de unión de estas circunstancias aparentemente tan distintas, hasta que se dieron cuenta de que se debían básicamente a lo mismo: «la energía de los perdigones es menor cuanto más delante se encuentran en el cartucho».
Sería fácil pensar que todos los perdigones salen del cañón con la misma velocidad y por tanto con la misma energía, pero no es así. La realidad es que los que están por detrás son empujados directamente por la explosión con toda su fuerza, mientras que éstos empujan a los que están por delante con la energía que les sobra, una vez que gastan algo para vencer su propia inercia. Cada perdigón trasmite al que tiene por delante un poquito menos de lo que él recibe. Pero hay más.
Como los plomos están alojados dentro del cartucho a granel —mejor diríamos a mogollón— cada uno se apoya por delante en dos o tres y, en algunos casos, hasta cuatro secciones de los siguientes. Esto hace que su capacidad de empuje se divida entre todos ellos; pero, además, como seguramente no se habrá apoyado en forma homogénea entre todos, el reparto de energía tendrá la misma falta de homogeneidad. Si a esto le sumamos la desigualdad de peso y forma entre ellos, porque sabemos que no son perfectos, tenemos que el reparto de energía va camino del caos y su agotamiento.

Sea cual sea el diámetro o el número de plomos, nunca se consigue que se ordenen de manera uniforme.
Para agravar la situación, una columna normal de plomos puede medir unos dos centímetros, lo cual significa que cuando los primeros abandonan el cañón han recorrido, y por tanto han sido acelerados, durante dos centímetros menos que los otros. Y peor aún. A los últimos todavía les quedan dos centímetros para recorrer acelerando cada vez más, ya que no tienen el freno por delante de los que ya han salido.
Esta anarquía total y absoluta de velocidad y energía, abriéndose paso a codazos y chocando los unos con los otros, es lo que obliga, sin posibilidad de evitarlo, a la dispersión de los plomos. Más adelante —porque vendrá a cuento— veremos cómo el choke trata de corregir un poco esta situación.
Peso y volumen
Cuando disponemos de 38 gramos de munición del número 4 podemos contar cientos de plomos, pero cuando se trata del 9, la cifra entra en las unidades de millar. Además, la columna se alarga. Lo definimos diciendo: «con la misma carga, cuanto más fina es la munición, mayor número de perdigones hay en cada columna». Pero siempre serán 38 gramos.

De esta forma se reparte la energía de los perdigones.
Esta diferencia de volumen hace que cuanto más pequeña es la munición, mayor es también el número de otras con las que tiene pequeñas superficies de contacto, no sólo por delante, sino también por los flancos. Entonces, si es mayor el número de plomos con los que debe interactuar y discutir, es lógico que también aumenten las turbulencias, las reyertas y, en consecuencia, la dispersión. Hemos encontrado el motivo por el cual en dos cargas del mismo peso, las más finas se abren más.
A medida que se separan, las bolitas de plomo gastan parte de su impulso en desviarse y luchar solas contra la resistencia del aire, y esto les resta velocidad; pero si son más grandes se manifiesta menos este efecto y conservan mejor la energía. Por esto las grandes matan más lejos. Es siempre lo mismo.
Los vectores de fuerza
En función de la pieza a abatir hay que elegir la munición más gruesa posible, con el choke indicado y con la carga más ligera
Paradójicamente, este caos de dispersión se genera a partir de un orden inmutable de las leyes de la Física. Podemos verlo mentalmente si pensamos en las bolas del billar:
Cuando una bola golpea a otra por detrás justo en el medio, la impactada sale hacia adelante; pero si la que viene por detrás le da por el lado derecho, la primera saldrá hacia el lado izquierdo —y al revés, ya que también funciona a la viceversa—. Además, la que sale recorre una flecha imaginaria que parte del centro de la que golpea y pasa por el centro de la impactada. Esta flecha es un vector de fuerza. En el billar podemos predecir hacia dónde se dirigirá la bola impactada porque ésta es perfecta en forma y balance; asimismo, la resistencia del aire es la misma e inmutable en el perímetro de la mesa para las dos. Pero no es necesario explicar que en el vuelo de los perdigones es todo lo contrario.

Así se transmite el movimiento de los plomos.
A estas alturas ya se nos hace evidente que las pruebas a las que nos referimos al principio determinaron que los mejores plomeos se obtienen con columnas cortas (una única bala sólida no se dispersa nada, ¿verdad?), lo que equivale a menos plomos. ésta es la causa de que los cartuchos de plato tengan cargas muy livianas de 24 o 26 gramos. La realidad, le pese a quien le pese, es que para la caza los mejores resultados están entre los 26 y los 32 gramos dependiendo del tipo de munición. Y, lo que es más importante, la carga nominal es la mayor que podemos utilizar con garantía de resultados si usamos perdigones de plomo. Cuando encontraron que disminuyendo el peso se mejoraba el rendimiento, se pusieron a buscar una forma de restituirlo. Una solución parcial fue el choke. Su principio de funcionamiento es el siguiente: cuando la columna avanza por el cañón se encuentra con el agolletamiento del choke que durante un instante ofrece cierta resistencia al avance de la misma. Es como si los primeros en llegar chocaran con un obstáculo —de ahí el nombre de choke—viéndose frenados por un momento. Los de atrás siguen empujando y trasmiten más energía a los primeros, que por fin avanzan con una velocidad ahora más similar entre todos. Podemos imaginar una columna de soldados que avanzan a paso ligero con las manos en los hombros del que va por delante, pero no saben que van hacia un precipicio; cuando el que llega se detiene, el que está por detrás dobla los brazos por el impulso, hasta que al apoyarse con el cuerpo lo hace caer junto con él mismo sin orden ni concierto. (El precipicio es la boca del cañón y el símil de los brazos corresponde a la deformación que sufren los plomos). Pero también aquí hay trampa.

De esta manera el choke trata de corregir la dispersión.
Es obvio que para cualquier carga que consideremos habrá un choke que resulte excesivo y otro que sea escaso; entonces, por fuerza, debe haber uno intermedio que sea el correcto. Pues bien, los fabricantes primero consideran el uso para el que se destinará la escopeta en cuestión y, por tanto, la munición que probablemente se usará; entonces disponen un choke que saben que corrige lo mejor posible la trayectoria con ese grosor de plomos.
El lector interesado puede hacer la prueba con su escopeta y verá que un cañón que tiene marcado como que es de tres estrellas, cambiando el grosor de la munición entre muy gruesa hasta muy fina, desviará su comportamiento oscilando entre cuatro y dos estrellas. Por eso las escopetas finas de encargo indican el choke y la carga de munición.
En definitiva
Cuando se comenzó a sustituir los perdigones de plomo por los llamados de acero (que no lo son) se encontró que debido al menor peso de estos últimos, se podían poner más sin llegar a la carga nominal: esto es lo que motivó la aparición de las vainas magnum. Luego estas vainas se cargaron con plomo por algunos fabricantes que consiguieron aumentar exclusivamente el retroceso, pero en detrimento de todos los otros parámetros. En fin… ¡que hay de todo en la viña del Señor!
La conclusión final es que considerando la pieza que vamos a abatir, debemos elegir la munición más gruesa posible, con el choke indicado y con la carga más ligera.

Pedro A. Suárez

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Re: Cartuchos, gramos,plomos,vainas,choques

Mensajepor Amuerte » 15 Jun 2018 21:05

Otro aporte mas para que te hartes de leer y algo sacaras en claro.

CARTUCHO DE 32 GRAMOS


Compañero, aunque en general los cartuchos reforzados con mucho plomo es lo que nos "venden" en la mayoría de las armerías para invierno y tiros largos, la cruda la realidad no es exactamente así. cada calibre tiene una carga con la cual consigue el mejor equilibrio y por lo tanto el mejor plomeo, en el caso del 12 esta se encuentra aproximadamente entre los 31,5 y los 33 grs. Los cartuchos de 32 grs siempre que estén bien cargados y equilibrados, son los que mejor plomean y generalmente los que abaten más lejos, las razones son varias y algunas bastantes complejas.

El alcance efectivo de un cartucho está condicionado por bastantes parámetros, pero fundamentalmente por uno, y ese no es otro que el propósito del fabricante. Si un fabricante decide diseñar un cartucho con carga pesada de 36 grs para que alcance bastante, este llegará al límite de lo que llegan los buenos cartuchos del calibre 12, es decir, en torno a los 45 metros (metro arriba o abajo). Sin embargo, si el mismo fabricante decide hacer un cartucho de largo alcance con 32 grs, este alcanzará tanto o más que el de 36. Aunque es evidente que al fabricante en general le interesa mejor vender un modelo con refuerzo de 25 mm de latón y 36 o hasta 38 grs de plomo que venderá bastante más caro que uno de poca carga.

Además del choque y características del cañón donde se le dispara, entre los parámetros más importante está la presión, a igualdad de velocidad, un cartucho que desarrolla menor presión con idénticos componentes que otro de carga más pesada, plomeará y alcanzará más que este, por el hecho de que la presión es un factor que contribuye a la dispersión de la plomada, entre otras razones por incrementar el choque y la deformación entre los perdigones. Normalmente lo que los fabricantes hacen para mantener las presiones en unos límites razonables, es dotar de algo menos velocidad a los cartuchos de mayor carga y cargarlos con pólvoras más progresivas.

Otro factor muy importante es el diseño del taco, si ese es de plástico con contenedor tipo copa y es muy rígido y sin cortes en las la copa (sin aletas), tardará más tiempo en abandonar la carga al salir por la boca del cañón y por tanto ganará unos metros de alcance respecto a otro de taco más elástico y blando que se abre inmediatamente. Por tanto si a un cartucho con 36 grs el fabricante le dota de este tipo de taco, alcanzará más que otro de 32 grs con un taco de apertura rápida.

Otro factor no menos importante, es la carga de plomo, un perdigón endurecido siempre alcanzará más y mantendrá mejor la trayectoria que uno blando que se ha deformado por excesiva presión o por colisionar con sus compañeros o el choque del arma. Por tanto el plomo duro también condiciona el plomeo y por tanto el alcance efectivo del cartucho, un ejemplo de ello son los cartuchos de tiro, que son capaces de desintegrar a un plato de perfil a 40 metros con tan solo 24 grs de plomo extraendurecido, aunque también el taco y las presiones mencionadas, hacen su parte, así como los choques del arma. Otro ejemplo extremo son los de tiro de pichón, que con 36 grs tienen alcance y contundencia.

Por último, el número de perdigón (su diámetro) también es decisivo para el alcance, un plomo de mayor diámetro lanzado a la misma velocidad que otro menor, tendrá mayor peso y por tanto más inercia, conservando mejor la trayectoria y con mucha mayor energía que el más pequeño, en general, el plomo fino abre más el diámetro de la perdigonada y los plomos gruesos cierran más y llegan más, aunque en función del tamaño de la pieza hay que buscar el equilibrio adecuado para que la alcancen como mínimo cuatro perdigones de promedio.

Hay más parámetros, pero estos son los más importantes y no quiero enrollarme más que ya me ha salido un buen cilindro, espero que me haya explicado bien.

Resumiendo, el alcance de un cartucho no viene determinado por su peso de plomo, si no por la decisión del fabricante de diseñarlo para que llegue lejos y su perfecto equilibrio, un cartucho bien cargado y equilibrado es lo ideal, aunque desde luego, a igualdad de componentes siempre plomeará mejor un cartucho que esté en el rango ideal de peso para cada calibre (31,5 - 33 para el 12). Cada uno que cace con lo que más le guste, pero siempre será más cómodo de disparar y efectivo, un cartucho de estos pesos. Aunque luego cada arma tiene "su cartucho" y plomeará mejor con unos u otros, el tema es bastante complejo.

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Re: Cartuchos, gramos,plomos,vainas,choques

Mensajepor Amuerte » 15 Jun 2018 21:11

Y te pongo esto ya para que te hartes, si no sacas nada en claro, que no sea porque no has leido cosas.

Cartuchos

Podrían pensar que tirar con 32 gramos es cosa del pasado… lamento adelantar que, si tuviésemos que comparar, posiblemente encontraríamos los cartuchos más equilibrados del mercado para la caza en mano y al salto precisamente en este gramaje.

Olvidemos eso de que con “tan poco plomo sólo se asusta” y aprendamos a buscar ese punto de rendimiento en nuestra escopeta empleando esta carga al menos en la primera parte de la temporada, si me apuran en el primer mes. Luego más de uno, cuando compruebe dónde y cómo llega a la caza con un buen cartucho de este gramaje, no vuelve a cargas mayores, seguro.

No deja de ser una alternativa más entre la enorme oferta de cartuchería de caza del mercado, posiblemente una de las más amplias de toda la historia, y que continúa en evolución, pues las marcas más prestigiosas deben seguir innovando para proporcionar los mejores resultados de plomeo y efectividad en un gran número de escopetas para ganar clientes entre tanta competencia. Y 32 gramos, nos pongamos como queramos, es la carga que más se acerca a la ideal para cazar de forme efectiva en una escopeta del calibre 12/70.

Ocurre que a fuerza de ir asimilando de forma un tanto equivocada que con más carga se abate mejor y se llega más lejos para colgar la caza larga, nos hemos acomodado en un nivel de resultados estimados y asumidos en el que quien tira menos de 34 ó 36 gramos está perdiendo continuamente oportunidades de colgar buenas perchas. Y no es así, ¡para nada!

Sin pretender generalizar ni universalizar que la mejor carga es la de 32 gramos pues cada uno debe buscar su particular equilibrio entre confort de tiro y resultados prácticos en su terreno y ante sus piezas, sí debo decir que lo más habitual es que nos pasamos, que cazamos con exceso de carga cuando lo hacemos con más de 30 ó 32 gramos a lo sumo. Todo lo que no se abate con una carga moderada y un disparo bien gestionado, no se abate por defecto con más gramos; si se logra es por casualidad o uno de esos “plomos” perdidos de la periferia de la nube de plomeo.

Hemos “metabolizado” que para distancias cortas, 32 gramos, para distancia larga 36, y para ocasiones un tanto variables, 34, y así cazamos sin probar ni profundizar en el conocimiento de diferentes modelos de cartuchería que bien empleados con su gramaje ideal, podrían depararnos tal vez mejores resultados que los que obtenemos habitualmente.

Curiosamente con un buen cartucho de 32 gramos y el choke adecuado se abate mejor la caza a 40 metros que con muchos de 36, y con un buen cartucho de 34 cubrimos perfectamente la variabilidad de muchas jornadas de caza en mano sin necesitar ni más ni menos; pero si optásemos por probar, recomendaría hacerlo con otros modelos de 32 gramos antes de caer en esa tendencia tan común de recurrir a cargas mayores para “asegurar los tiros”, toda una mera ilusión.

Debemos acostumbrarnos a conocer y valorar cómo plomea nuestra escopeta con diferentes cargas y modelos, y si nos animamos a hacerlo, nos vamos a llevar muchas sorpresas. Con 32 gramos hay de sobra, se deja menos plomo en el campo, y nos acercamos a ese equilibrio tan necesario para el cazador cabal de emplear lo suficiente.

Y ojo, que no le quito el mérito ni el potencial a los cartuchos de otras cargas, los abordaremos en próximas ocasiones y tal vez así nos ayude a poder escoger mejor nuestra munición. Pero de momento, volvamos por unos momentos a lo más empleado hace unas décadas por muchos de nosotros, 32 gramos, curiosamente cuando había bastante más caza, y colgábamos muy buenas perchas.
El equilibrio y potencial de 32 gramos

Y en esos mismos tiempos existían cartuchos de 34 y 36 gramos, ¡ya lo creo!, pero nos bastaba con los de 32. En la caza al salto se necesitaba munición de buena velocidad, en los primeros años de cartuchos cargados con taco contenedor de plástico, en realidad un taco concentrador, pues se buscaba llegar más lejos con plomeos más nutridos que con los cartuchos con taco de fieltro o plástico que plomeaban según mandase el choke de la escopeta.

Coincidía que al plato se tiraba con 32 gramos y que la mayoría de nosotros tirábamos al plato y cazábamos, y visto dónde se rompían los platos, no había duda -ni necesidad- de buscar más carga para tirar perdices, liebres o palomas.

En el caso del conejo sí se recurría a cargas más livianas o mejor dicho a cartuchos “más flojos” según los denominábamos, con menos punta de velocidad y menos gramos de carga; en realidad la mayoría de los modelos no traían indicada la carga del cartucho, empleabas los que mejor te valían, y en zonas con mucho tiroteo, los más económicos.

Actualmente los cartuchos de 32 gramos mantienen una calidad elevada y existen escasas diferencias entre lo que hemos denominado muchos años “gama media” y “gama alta”, en muchos casos esta diferencia responde a mero tratamiento de imagen y psicología de venta, mientras que en otros casos sí se pueden observar ciertas diferencias -generalmente en función del tipo de pólvora empleada- entre varios modelos de un mismo fabricante dentro de este gramaje.

Con respecto a esto creo que la realidad es que no hay cartuchos malos ni medio buenos en esta carga, las diferencias las podemos asumir como cartuchos más indicados para algunas piezas o modalidades concretas bien porque por velocidad, plomeo o confort de tiro los veamos más acertados.

Es como decir que los cartuchos de 30 gramos son flojos y sólo valen para disparos cortos. A quien lo cree así le vendría bien asistir como observador a un buen ojeo de perdices bravas en tiraderos donde los pájaros entran “retiraditos”, y podría ver cómo se hacen pelotas en el aire con cartuchos de esta carga y perdigón de octava o séptima. Y cazando al salto no digo nada, porque si me dejo llevar por algunas experiencias llegaría a decir que incluso se caza mejor que con 32 gramos.

Pero vamos a dejarnos de “batallitas” y centrémonos en el equilibrio y el potencial de la cartuchería de 32 gramos en la actualidad. Se trata de cartuchos muy bien diseñados, con prestaciones algo diferenciables en función de los modelos y fabricantes, pero mantienen una calidad elevada y nos permiten jugar bien con los chokes y las necesidades del cazadero.

Por definición en la mayoría de los diseños la cartuchería de 32 gramos, tienden a concentrar más el plomeo que los cartuchos de cargas mayores, lo que nos permite equilibrar perfectamente la secuencia de disparos para cazar en mano o al salto en escopetas de dos cañones, y en semiautomáticas ganaremos o perderemos rendimiento en función de si tiramos casi siempre en la misma distancia o ésta es muy variable a lo largo de la jornada.

Las semiautomáticas con algunos años tienden a cerrar el disparo algo más que las actuales por término medio, de ahí que hay ocasiones en las que a un cazador le va de maravilla la cartuchería de 32 gramos con ***, mientras que a otros sólo le rinde este cartucho con **, hablamos de tiraderos medios-largos y caza al salto generalmente.

Así que lo más prudente y lógico será probar en nuestra escopeta y según nuestras necesidades, no perdemos nada por realizar unos plomeos y comprobar si nos gustan las respuestas de los modelos que probamos, y dentro de ello si tenemos mejores sensaciones en el campo con *** o con **. Si sirve mi experiencia, para la caza a rabo en cotos llanos y con caza fuerte y brava, mis mejores resultados los he obtenido con cartuchos de 32 gramos y **, no he necesitado cargas mayores.

En cambio en cazaderos de disparos prácticamente en la distancia media, he logrado resultados (e impresiones) similares con esta combinación y con *** y cartuchos de 34 gramos. Eso sí, en lances largos, llegaba mucho mejor con ** y 32 que con ** y 34, puede ser una percepción personal, pero los plomeos en plancha y la reacción de las piezas de caza me encaminan a que al menos en mi escopeta, esto es así.
Buenos cartuchos y a jugar con los chokes

En este artículo vamos a proponer algunos modelos de entre la gran oferta del mercado en 32 gramos, y nos vamos a referir en más de un caso a modelos ya comentados para otras piezas y modalidades porque sencillamente son cartuchos polivalentes y con un alto rendimiento, ¡ahí es donde debemos fijarnos en muchos casos!, un gran cartucho para conejo, tórtola, paloma, perdiz, liebre, ya está diciendo que atesora unas características que lo convierten en un cartucho capaz de cubrir sobradamente todas nuestras necesidades durante todo el año. Y eso no es poco precisamente.

Me gustaría insistir en el potencial de algunos cartuchos de 32 gramos que en principio identificamos como cartuchos “normales” por su presentación -o porque ese mismo fabricante tiene otros modelos con el culatín más alto o mejor presentación- y que en realidad tienen una calidad sobrada para cazar de todo con ellos, en especial en algunas escopetas, siendo conocida la increíble respuesta de determinadas semiautomáticas ya antiguas con estos modelos.

Para obtener la mejor respuesta en nuestra escopeta debemos probar cada cartucho que en principio “nos llame” con los diferentes chokes porque en función del diseño y los componentes de cada cartucho podemos encontrar un modelo que nos sorprenda con *** y que no nos convenza con ** ó con ****, la munición de 32 gramos está muy focalizada y bastante especializada y debemos asegurarnos que el cartucho elegido se adapta a nuestras necesidades.

Una buena recomendación con aquellas marcas que ofrecen varios modelos en el mismo gramaje es dedicar los que de entrada nos parecen más “todo terreno” para la primera parte de la temporada y dejar los más especializados -habitualmente con mayor concentración de plomeo, lo que denominamos “más cerrados”- para mitad y últimos de temporada.

Y sobre esta tendencia, personalmente recomiendo que apostemos por cazar en la primera parte de la jornada con los más cerrados si la caza anda todavía saliendo larga, y que a media mañana cambiemos por los más barredores o morraleros pues la caza saldrá ya en teoría más a tiro de escopeta. Es una combinación muy efectiva y a la que no cuesta nada adaptarnos, y a menudo no necesita cambiar el choke de la escopeta.

Como recomendación generalizada decir que para cazaderos de monte, olivar y zonas donde tenemos habitualmente obstáculos, los cartuchos que denominamos de “gama caza” suelen dar mejores resultados pues plomean mejor a media distancia para ayudarnos a recoger caza de pelo y pluma.

En línea con esto, en cazaderos llanos y abiertos, con caza fuerte y brava, los más cerrados nos darán un gran resultado pero sin olvidar lo comentado, una viña a las nueve de la mañana puede necesitar un cartucho que cierre el plomeo, y a las doce requerir un cartucho que rinda mejor a media distancia, con la gran oferta del mercado en 32 gramos tenemos cancha para probar y tener localizados los mejores para cada momento.

(Texto: Miguel F. Soler. Fotos: Alberto Aníbal-Álvarez).

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Re: Cartuchos, gramos,plomos,vainas,choques

Mensajepor colorin_colorado » 15 Jun 2018 21:22

:apla:

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Re: Cartuchos, gramos,plomos,vainas,choques

Mensajepor macthebar » 15 Jun 2018 23:44

Olé, Olé,y Olé, esto es una señora explicación :apla: :apla: pasaba por aquí y me he encontrado con este tema y la verdad hay que decir GRACIAS!! :apla:

aldrafede
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Re: Cartuchos, gramos,plomos,vainas,choques

Mensajepor aldrafede » 16 Jun 2018 00:04

Olé.
Muy bien explicado. He aprendido mucho.

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gumersindo
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Re: Cartuchos, gramos,plomos,vainas,choques

Mensajepor gumersindo » 17 Jun 2018 08:31

Cualquier proyectil, cuanto mayor sea la velocidad a la que sale del cañon, mas tardarà en perderla.

Tenemos una constante que no podemos eludir: la presion .

Para aumentar la velocidad del proyectil debemos aumentar la carga de proyeccion ( + pólvora) un proyectil pesado ofrece mas resistència que uno ligero para pasar del estado de reposo al de movimiento, con lo que a igual carga de proyeccion un proyectil pesado hara que la presion soportada por la recamara en la deflagracion sea mayor que en el caso de un proyectil mas ligero.
Si para aumentar la velocidad aumentamos la carga de proyeccion estaremos aumentando la presion en todos los casos, però con los condicionantes impuestos por las leyes de la física y de la termodinamica los proyectiles mas pesados haran que las presiones que debe soportar la recamara sean mayores . El incremento de presion no sé produce en progresion aritmètica, sinó que lo hace en progresion geometrica lo que nos puede llevar peligrosamente cerca de los limites de la resistència mecànica de la recamara y por consiguiente a la explosion de esta.
En conclusion , a igual calibre los proyectiles ligeros siempre podran salir a mayor velocidad que los proyectiles mas pesados por admitir mayores cargas de proyeccion.

En los cartuchos perdigones, ocurre que si se supera una determinada velocidad los plomeos se vuelven deficientes, por lo que los fabricantes de cartuchos se ven obligados a limitar la velocidad a cambio de un buen plomeo. No es descabellado pensar que se pueda conseguir que un cartucho comercial de 36 ó mas gramos desarrolle la misma velocidad que otro de 32 ó menos gramos. En cualquier caso la velocidad para un plomeo optimo serà muy parecida para todos los casos.

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Re: Cartuchos, gramos,plomos,vainas,choques

Mensajepor colorin_colorado » 18 Jun 2018 20:59

Haber si me queda claro.
El que tira con 32 gramos digamos con plomo 6 ,abate piezas a mayor distancia, pero debe afinar bastante es decir hay que ser bastante bueno.
Y el que tira 36 gramos del plomo 6 tiene más densidad de plomado y abate piezase no tan lejos y lo suelen tirar los que son un poco malillos y no tienen buen apunte.

¿Es correcto?

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Re: Cartuchos, gramos,plomos,vainas,choques

Mensajepor Amuerte » 19 Jun 2018 21:35

Casi se podia decir que es eso aunque con algun matiz, esta claro que el que tira con 32 gramos de 6º matara mas lojos que el que tira 36 gramos de 6º siempre que sea con el mismo choket, y no es que sea mas densa la plomada de 36 gramos, es que es de diametro mas grande, dicho de otra manera, si con un cartucho de 32 gramos de 6º en un choket de tres estrellas a 20 metros la plomada abre un circulo de 35 centimetros de diametro, un cartucho de 36 gramos de 6º con el mismo chohet y a la misma distancia abrira un circulo de 55 centimetros, en el centro del tiro las plomadas seran iguales en densidad, pero si el disparo es a 40 metros con el mismo numero de plomo y mismo choket, con 32 gramos sera una plomada de 50 centimetros y seguira siendo densa, y en las mismas circustancias con 36 gramos la plomada abrira un metro o mas de diametro, con lo que dejara muchos huecos.
Esto no es que sea esacto, porque cada cañon es un mundo y ademas hay muchas clases de cartucho, pero si muy aproximado.

elinstructor
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Re: Cartuchos, gramos,plomos,vainas,choques

Mensajepor elinstructor » 08 Ago 2024 17:19

Hola, cuantos gramos totales de perdigón carga un cartucho de 28 gramos, 28, 28,35 o 28,50? Hay alguna tolerancia en la carga. Gracias


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