HISTORIA DE MILITARES Y GUERREROS DE ESPAÑA

La historia se escribe con fuego: todo sobre operaciones militares, tácticas, estrategias y otras curiosidades
Avatar de Usuario
Rescoldo
Usuario Baneado
Mensajes: 744
Registrado: 25 Feb 2015 03:34
Ubicación: Entre gabachistan y morolandia
Estado: Desconectado

Re: HISTORIA DE MILITARES Y GUERREROS DE ESPAÑA

Mensajepor Rescoldo » 21 Mar 2015 23:48

JotaErre escribio Más adelante, no te olvides de hablar de las campañas de Sertorio y de los episodios sucedidos en España de la guerra civil entre Julio César y Pompeyo...

Y felicidades, podemos hacer un excelente hilo de "historia militar española"...

Lo intentare, dada la vinculación con algunas acciones militares en Hispania, es lo malo que tiene este país, que empiezas a tirar de un hilo y al final tenemos un ovillo con conexiones en todos los paises, pero estos son de 100 a.c. y Escipión y Anibal andan en los 230 a.c., ya llegaremos.
Además cuento con vosotros para recordarme lo que se me olvide.
(Vaya berenjenal en el que me he metido)
Saludos
Aquí la más principal
hazaña es obedecer,
y el modo cómo ha de ser
es ni pedir ni rehusar.

Avatar de Usuario
Rescoldo
Usuario Baneado
Mensajes: 744
Registrado: 25 Feb 2015 03:34
Ubicación: Entre gabachistan y morolandia
Estado: Desconectado

Re: HISTORIA DE MILITARES Y GUERREROS DE ESPAÑA

Mensajepor Rescoldo » 22 Mar 2015 01:41

EL ASEDIO DE NUMANCIA:
El asedio y caída final de Numancia se desarrolla en el año 134 a.c., cuando el senado de Roma encarga a Publio Cornelio Escipión (El Africano) que había derrotado a Anibal en Zama, la conquista de la ciudad que simbolizaba la resistencia celtibera, y que levaba varios años resistiendo, de hecho llego a derrotar al cónsul Nobilior.
Escipión al frente de 60.000 hombres, se presentó a las puertas de Numancia tras una larga marcha por terras de los vacceos, asolandolas y dejando sin recursos a estos para que no ayudaran a la ciudad, se da la circunstancia de que la marcha fue de noche para evitar el calor que hacía en Hispania, costando cuatro meses de marcha para llegar a la ciudad que se hallaba enclavada en un punto estratégico en lo alto de la confluencia de los ríos Tera y Duero. Contando con una población de 8000 personas de los que la mitad eran guerreros.
A pesar de la gran superioridad numérica, Escipión decidió cercarla al no tener confianza en la mayoría de sus tropas auxiliares celtiberos compatriotas de los numantinos.
Para sitiar la ciudad los romanos pronto recurrieron a sus técnicas habituales, en un día levantaron una gran empalizada que servía como muralla de 4 Km. de largo y cavaron un foso que la protegiese de medio metro para tal obra se utilizaron más de 16.000 estacas. Pero esta no era la gran obra, era sólo una protección que permitiese crear una verdadera muralla mucho más sólida y resistente. La verdad que esta empalizada fue clave ya que en cuanto los numantinos vieron que empezaba a contruirse pronto organizaron ataques contra ella no obstante sin éxito. La nueva muralla estaba compuesta por piedra y tierra y contaba con 4 metros de espesor y 3 de altura y su longitud superaba los 9 Km. estando defendida cada 33 metros por una torreta de 4 pisos y 5 metros de altura. En total había en torno a 300 torres. En aquella torres se instaló la artillería que impediría cualquier intento de escapar de la ciudad, una gran cantidad de catapultas que con un alcance de 300 metros custodiaban bien la nueva fortificación romana. Los 60.000 soldados que servían a Roma de los cuales tan sólo 10.000 eran legionarios romanos se distribuyeron en 4 campamentos.
De los 60.000 soldados romanos 20.000 defendían la muralla, 10.000 ejercían como fuerza móvil de apoyo inmediato y el resto constituían la reserva por si las cosas fuesen mal. Debido a la falta de arqueros la situación militar de Numancia era muy desfavorable, su única salvación hubiera sido una batalla a campo abierto pero Escipión a sabiendas de que eso no le convenía lo rechazó una y otra vez. Lo único que podía hacer Numancia era que alguno de sus hombres pidiese ayuda. Ahí entra la figura de Retógenes Caraunios quien junto con 10 hombres se las arregló para escabullirse y cruzar de noche las filas enemigas con el fin de llegar a tierra de los Vacceos y pedir ayuda, pero ante la amenaza de las represalias romanas ninguna ciudad amiga aceptó el requerimiento excepto Lutia que envió una fuerza de apenas 400 guerreros. Escipión al conocer esta pequeña ayuda exigió a la ciudad la entrega de los mismos amputandoles a todos la mano derecha.
Tras esto los numantinos se encontraron en una situación desesperada, sin suministros y comenzando los primeros casos de canibalismo, inicialmente se comían a los muertos, y más tarde a los más débiles, intentando negociar con Escipión una rendición honrosa que este les negó, por lo que muchos numantinos comenzaron a suicidarse quemando sus casas, quedando con vida sólo los que eran más fuertes, pero que no tenían el coraje para suicidarse, siendo estos los que abrieron las puertas y se rindieron.
Escipión ordenó que todos los supervivientes fueran vendidos como esclavos, dejando unos pocos para ser trasladados a Roma para celebrar el triunfo en el desfile a la vuelta de Escipión a Roma.
Numancia quedó custodiada por romanos y fue quemada para borrar de la memoria aquel punto que fue un gran quebradero de cabeza para los romanos durante tantos años.
Numancia junto a Sagunto simbolizan el ansia de libertad de un pueblo, frente a unos invasores de distinto signo

La libertad, hermosa palabra, no la ensuciemos, no la exhibamos como a una estatua.

Continuaremos...
Saludos :saluting-soldier: :saluting-soldier: :caba: :caba:
Aquí la más principal
hazaña es obedecer,
y el modo cómo ha de ser
es ni pedir ni rehusar.

Sarmata2
Calibre .22
Calibre .22
Mensajes: 10
Registrado: 13 Nov 2012 18:34
Contactar:
Estado: Desconectado

Re: HISTORIA DE MILITARES Y GUERREROS DE ESPAÑA

Mensajepor Sarmata2 » 22 Mar 2015 09:38

Hola rescoldo, estoy a la espera de la publicacion del ultimo libro de Santiago Posteguillo, si no recuerdo mal sera el que completara su ultima trilogia.

Avatar de Usuario
Rescoldo
Usuario Baneado
Mensajes: 744
Registrado: 25 Feb 2015 03:34
Ubicación: Entre gabachistan y morolandia
Estado: Desconectado

Re: HISTORIA DE MILITARES Y GUERREROS DE ESPAÑA

Mensajepor Rescoldo » 22 Mar 2015 10:17

Sarmata2 escribio

Hola rescoldo, estoy a la espera de la publicacion del ultimo libro de Santiago Posteguillo, si no recuerdo mal sera el que completara su ultima trilogia.


Me imagino que te refieres a la serie de Trajano, aún se hará esperar un poco, pero según tengo entendido lo veremos antes de fin de año
Saludos
Aquí la más principal
hazaña es obedecer,
y el modo cómo ha de ser
es ni pedir ni rehusar.

Avatar de Usuario
cutis
375 HH Magnum
375 HH Magnum
Mensajes: 3719
Registrado: 15 Mar 2009 12:01
Ubicación: España
Estado: Desconectado

Re: HISTORIA DE MILITARES Y GUERREROS DE ESPAÑA

Mensajepor cutis » 22 Mar 2015 10:40

Yo como Asturiano , espero que no te olvides de las guerras cantabricas

"En el occidente estaba ya en paz casi toda Hispania, excepto la parte de la Citerior, pegada a los riscos del extremo del Pirineo, acariciados por el océano. Aquí se agitaban dos pueblos muy poderosos, los cántabros y los astures, no sometidos al Imperio."
Lucio Anneo Floro, historiador romano del siglo I

Avatar de Usuario
Rescoldo
Usuario Baneado
Mensajes: 744
Registrado: 25 Feb 2015 03:34
Ubicación: Entre gabachistan y morolandia
Estado: Desconectado

Re: HISTORIA DE MILITARES Y GUERREROS DE ESPAÑA

Mensajepor Rescoldo » 22 Mar 2015 13:31


Cutis escribio


Yo como Asturiano , espero que no te olvides de las guerras cantabricas

"En el occidente estaba ya en paz casi toda Hispania, excepto la parte de la Citerior, pegada a los riscos del extremo del Pirineo, acariciados por el océano. Aquí se agitaban dos pueblos muy poderosos, los cántabros y los astures, no sometidos al Imperio."
Lucio Anneo Floro, historiador romano del siglo I


Tranqui, intentaré no olvidarme aunque os advierto a todos que mi cabeza es bastante pequeña, gasto una talla 55, así que no se como me las voy a arreglar para guardar todo con lo que ya ocupa el serrín.
Saludos
Aquí la más principal
hazaña es obedecer,
y el modo cómo ha de ser
es ni pedir ni rehusar.

Avatar de Usuario
Rescoldo
Usuario Baneado
Mensajes: 744
Registrado: 25 Feb 2015 03:34
Ubicación: Entre gabachistan y morolandia
Estado: Desconectado

Re: HISTORIA DE MILITARES Y GUERREROS DE ESPAÑA

Mensajepor Rescoldo » 22 Mar 2015 19:25

LA GUERRA DE SERTORIO EN HISPANIA:

Quinto Sertorio es uno de los casos en los que un soldado raso llego a general del Imperio, familia del famoso Cayo Mario, destacó muy joven en el ejercito en la campaña contra Cimbros y Teutones, donde se infiltró como espía para recabar información, como consecuencia de esto gano prestigio y acabo siendo nombrado tribuno bajo el mando del pretor Didio en Hispania.
cuando se hallaba acampado en Castulo hubo de hacer frente a una revuelta motivada por los malos tratos que los soldados daban a los habitantes de la zona, logrando contener a sus tropas cuando estas retrocedían en desbandada, y realizando un contraataque y someter a las ciudades sublevadas de Oresa y Oretania, apoderándose de ambas, esto le valio el ascenso a cuestor, así como la corona graminea, la más alta y rara condecoración otorgada por el Senado, reservada a los generales que llegaban a salvar un ejercito.
En la Guerra Social o Mársica (91-88 a.C.) siendo ya legado, quedó tuerto y, cuando se declaró la guerra civil de Mario y Cinna contra Sila, mandó uno de los ejércitos, del bando de su tío, que tomó Roma. Mucho más moderado y disciplinado, su ejército quedó al margen de las matanzas contra los partidarios de Sila y, regresó a Hispania como procónsul. Una vez que Sila recuperó el control de la República para el bando de los optimates, aquellos que habían ayudado a los populares se convierteron en renegados, entre ellos Sertorio, que desde Hispania dirigió la lucha contra la dictadura silana, en las llamadas Guerras Sertorianas (83-72a.C.
En Hispania se fragua la leyenda de Sertorio por su buen trato a la población local, creando un eje central de su presencia en Hispania con Ilerda, Osca y Calaguirris. En la capital oscense intentó recrear su ideal republicano a través de la creación de un Senado de trescientos miembros e, incluso, proporcionó una Academia donde los hijos de los nobles indígenas aprendían las costumbres y las formas de vida romana, llegando a vestir la púrpura.
En el año 80 a.C., se inicia la guerra de Hispania, en la que Sertorio acaudilla la Lusitania, (esta guerra tiene su origen en la persecución que el dictador Sila llevó a cabo contra los que en su día ayudaron a sus contrarios) esta guerra duraría ocho años, en los dos primeros años Sertorio consiguió una serie de rápidas conquistas, lo que hizo que fueran numerosas las tribus que se sumaron a la alianza con él.
En el año 77 a.C., las tropas destacadas en Hispania por Roma recibieron refuerzos, lo que dio lugar a que Sertorio iniciase una guerra de pequeñas batallas y escaramuzas que no convenían al enemigo, ganando las batallas en las que el propio Sertorio participaba, pero perdiendo casi todas aquellas que eran dirigidas por sus oficiales.
Durante la campaña del 74 a.C. Sertorio había evitado la lucha abierta y se dedicaba a devastar los territorios para forzar la retirada de sus enemigos, concentrados en atacar ciudades prosertorianas, provocando penalidades en el Valle del Ebro y la Celtiberia, tal y como narra Floro: “… entonces, entregados los unos a devastar los campos, los otros a destruir ciudades, la desgraciada Hispania pagaba la culpa de la discordia entre los generales romanos.” El año transcurrió sin grandes batallas, pero se caracterizó por un continuo retroceso de posiciones. Todos los enclaves de la Meseta Central fueron cayendo por las armas o por los pactos, a excepción de Clunia, Tiermes y Uxama.
Viendo la guerra perdida y pensando que Roma iba a perdonarles, junto a otros lugartenientes, Perpenna atrajo a Sertorio hasta Osca con la excusa de ofrecer una celebración en honor del general, conmemorando una de sus victorias. Sabedor del gusto por los buenos modales del general, durante el banquete comenzaron a comportarse de forma vulgar, esperando la reacción del sabino para acabar con su vida.
Es de hacer una mención especial la devoción con la que los socii de Sertorio frente a Roma le fueron fieles, Para capital rebelde, Osca, como para la mayoría de las ciudades que aún se mantenían fieles a Sertorio, la desaparición del la figura del general acabó con la ilusión de luchar por Roma del lado de los romanos. La República no iba a tener piedad en sofocar los últimos rescoldos de la rebelión; la mayoría de las ciudades cedió por capitulación, y tan sólo algunos aliados mantuvieron su postura hasta el final, como ocurrió con Calagurris, que antes de faltar a la fides debida a Sertorio, incurrieron en la “execrable impiedad” del canibalismo.
Quinto Sertorio, con su política de crear instituciones similares a las existentes en Roma, consiguió un gran avance en la romanización de Hispania, siendo admirado y respetado por los diferentes pueblos que en ella convivían, los tiempos revueltos que vivía la República Romana, no facilitaron su labor, y el hecho de oponerse a Sila en favor de su tio Mario, dio lugar a la persecución que sufrió y las guerras en Hispania, así como finalmente a su muerte.

Saludos :saluting-soldier: :saluting-soldier: :saluting-soldier:
Aquí la más principal
hazaña es obedecer,
y el modo cómo ha de ser
es ni pedir ni rehusar.

JotaErre
375 HH Magnum
375 HH Magnum
Mensajes: 4367
Registrado: 05 May 2010 12:08
Contactar:
Estado: Desconectado

Re: HISTORIA DE MILITARES Y GUERREROS DE ESPAÑA

Mensajepor JotaErre » 23 Mar 2015 23:19

¡Felicidades! Sigue así...

Avatar de Usuario
Rescoldo
Usuario Baneado
Mensajes: 744
Registrado: 25 Feb 2015 03:34
Ubicación: Entre gabachistan y morolandia
Estado: Desconectado

Re: HISTORIA DE MILITARES Y GUERREROS DE ESPAÑA

Mensajepor Rescoldo » 24 Mar 2015 00:16

La campaña en Hispania de Julio Cesar contra Pompeyo:

Al tratarse de un hilo sobre hechos acaecidos en Hispania (actual España) aún cuando la biografía y vida de Julio Cesar dan para estar varios días hablando sobre él, intentaré limitarme a lo sucedido en Hispania, el enfrentamiento entre Julio Cesar y Pompeyo en la que se conocería como SEGUNDA GUERRA CIVIL DE LA REPUBLICA DE ROMA:

Esta guerra fue un conflicto librado entre el 49 a.C. y el 45 a.C. debido al enfrentamiento de Julio Cesar con la facción tradicionalista del senado, que estaba liderada militarmente por Pompeyo Magno, terminando la guerra con la derrota de los pompeyanos y la subida al poder de Julio Cesar como dictador.

En el año 50 a. C. el Senado votó una moción para que César abandonase su cargo de gobernador. Marco Antonio, con el poder que le otorgaba ser tribuno de la plebe, vetó la propuesta, evitando que se trasformase en ley. Tras esta votación se inició un violento acoso a los cesaristas auspiciado por la facción conservadora. Antonio abandonó Roma ante el peligro de ser asesinado. Sin la oposición de Antonio el Senado declaró el estado de emergencia concediéndole a Pompeyo poderes excepcionales. César respondió con el célebre cruce con sus tropas del río Rubicón, en dirección a Italia, dando así inicio a la guerra civil.

Cesar atravesó Italia y provocó el enfrentamiento con Pompeyo quien ante la falta de preparación de sus tropas se dirigio a Brindisi, embarcando hacia Grecia, adonde fue perseguido por Cesar, sin darle alcance, consiguiendo Pompeyo cruzar el Adriatico, siendo seguido por Cesar hasta Hispania.

Guerra en Hispania:
Los ejércitos pompeyanos estaban controlados por los legados Lucio Afranio, Marco Petreio —el vencedor sobre Catilina— y Marco Terencio Varrón. César, por su parte, concentró 9 de sus legiones y más de 6.000 jinetes en las cercanías de Marsella.

La ciudad de Massalia (actual Marsella), en plena ruta de paso, era controlada por Lucio Domicio Enobarbo, procónsul de la Galia, que tras haber sido perdonado por César reclutó un nuevo ejército y, por segunda vez, cerró las puertas de una ciudad a la llegada de César. César ordeno sitiar la ciudad a sus legados Cayo Trebonio y Décimo Junio Bruto Albino. Inmediatamente, y sin perder tiempo, se dirigió con el resto de las tropas a la Hispania Citerior para reforzar las tres legiones que había enviado allí anticipadamente.

Las tres legiones enviadas por César a la vanguardia contuvieron a las tropas pompeyanas dentro de Hispania y mantuvieron el control de los principales pasos de los Pirineos. Con la llegada de César y los refuerzos, el ejército cesariano se adentró en Hispania y a mediados de marzo acampó cerca de Ilerda, frente las fuerzas pompeyanas, con el fin de forzar la batalla.

El enfrentamiento se libró en el verano del año 49 a. C.; primero en Ilerda, la actual Lérida, y luego más al sur. Las tropas cesarianas lograron la victoria total sobre los pompeyanos el 2 de agosto del mismo año. Massalia finalmente se rindió el 25 del mismo mes.
Rebelión en Hispania
Tras perseguir a Popeyo por diferentes paises, en Grecia Cesar se enfrentó a Pompeyo en la batalla de Batalla de Dyrrhachium, siendo derrotado, y volviendo a enfrentarse en la batalla de Farsalia, donde derrotó a Pompeyo, quien tras esta derrota huyo a Oriente, siendo perseguido por Cesar hasta Egipto, donde moriría a manos de un mercenario romano el ex centurión Aquila.

La estancia de César en Egipto y su posterior marcha hacia el Ponto dio tiempo a Metelo Escipión y a Catón para poder formar un nuevo ejército en la provincia de África. Lograron reunir un ejército de 10 legiones, alrededor de 50.000 hombres. Contaban, además, con el apoyo del ejército del rey Juba I de Numidia, que incluía sesenta elefantes de guerra e inicialmente unos 30.000 hombres

En el 46 a.C., tras recibir refuerzos y sumarsele dos legiones desertoras de las filas enemigas, Julio Cesar entró en combate al
al cercar la ciudad de Tapso, siendo atacado por los constitucionalistas a los que derrotó.

Después de las derrota de Tapso los conservadores republicanos Cneo Pompeyo el Joven, Sexto Pompeyo y Tito Labieno, huyeron a Hispania con los restos de su ejército. Tras su llegada a Hispania, dos legiones ubicadas en la Hispania Ulterior formadas en gran parte por veteranos de Pompeyo, derrotadas en Ilerda se sublevaron y expulsaron a los legados de César jurando fidelidad a Cneo Pompeyo.

Usando la antigua influencia de su padre y los recursos de la provincia, los hermanos Pompeyo y Tito Labieno consiguieron reunir un nuevo ejército de trece legiones compuestas por los restos del ejército constituido en África, las dos legiones de veteranos, una legión de ciudadanos romanos de Hispania, y el alistamiento de la población local. Durante finales del 46 a. C. tomaron el control de casi toda Hispania Ulterior, incluyendo las colonias romanas de Itálica y de Corduba, la capital de la provincia.

Los legados de César, Quinto Fabio Máximo y Quinto Pedio, desecharon el enfrentamiento directo con el ejército conservador y acamparon a cincuenta kilómetros al este de Córdoba en Obulco, solicitando ayuda de César.

Éste llegó a Hispania en diciembre, y tras su llegada levantó el sitio a la plaza fuerte de Ulipia, ciudad que le había sido leal y que estaba sitiada sin éxito por Cneo Pompeyo. Los conservadores evitaron una batalla abierta refugiándose tras las murallas de Córdoba, defendida por Sexto Pompeyo, y obligando con ello a César a pasar el invierno en Hispania. Para abastecer sus necesidades de avituallamiento y víveres, César tomó y saqueó la ciudad de Ategua, lo que incitó a muchos nativos hispanos a unirse a los conservadores y abandonar a César.

El 7 de marzo de 45 a. C. tuvo lugar una escaramuza cerca de Soricaria, saliendo vencedores los cesarianos. Tras esta derrota, ante el temor de deserciones y el inicio de la primavera, Cneo Pompeyo movilizó su ejército y presentó batalla a César.

Los dos ejércitos se reunieron en los llanos de Munda, cerca de Osuna, en la Hispania meridional. Los conservadores se situaron en una colina fácilmente defendible. Iniciada la batalla transcurrió largo tiempo sin debatirse a favor de ningún bando, pero finalmente las tropas conservadoras interpretaron erróneamente que Tito Labieno estaba huyendo y rompieron las líneas buscando refugio en la ciudad de Munda. Tito Labieno murió en el campo de batalla.

La armada cesariana mandada por Gayo Didio hundió la mayor parte de los navíos pompeyanos en una batalla naval cercana a Cartagena, comandados por Publio Accio Varo, abortando cualquier intento de huida por mar, Cneo Pompeyo el Joven y su hermano Sexto trataron de buscar asilo en tierra refugiándose en Córdoba. César dejó a su legado Quinto Fabio Máximo al mando del sitio de Munda e inició la persecución de los hijos de Pompeyo. César tomo Córdoba donde se ocultaba Cneo Pompeyo, matando a todos los defensores como correctivo por ocultar a su enemigo. Su hermano Sexto Pompeyo consiguió escapar.

La ciudad del Munda sostuvo por algún tiempo el asedio, pero tras un fallido intento de romper el sitio se entregaron 14.000 hombres a Cayo Didio. Fue el último acto de resistencia a César.
Así finalizaron las campañas de Julio Cesar en Hispania, sus triunfos militares y políticos continuaron en otras tierras engrandeciendo el imperio romano, pero eso es un tema que creo excede del presente hilo.
Saludos :saluting-soldier: :saluting-soldier: :saluting-soldier:
Aquí la más principal
hazaña es obedecer,
y el modo cómo ha de ser
es ni pedir ni rehusar.

JotaErre
375 HH Magnum
375 HH Magnum
Mensajes: 4367
Registrado: 05 May 2010 12:08
Contactar:
Estado: Desconectado

Re: HISTORIA DE MILITARES Y GUERREROS DE ESPAÑA

Mensajepor JotaErre » 24 Mar 2015 23:29

Dos apuntes más:

1) Munda fue una de las batallas más grandes en número de combatientes librada en suelo español.

2) Sexto Pomepyo consiguió huir a Sicilia y dominar la isla durante bastante años. Finalmente, fue derrotado y muerto por Augusto cuando ya era emperador.

Avatar de Usuario
Rescoldo
Usuario Baneado
Mensajes: 744
Registrado: 25 Feb 2015 03:34
Ubicación: Entre gabachistan y morolandia
Estado: Desconectado

Re: HISTORIA DE MILITARES Y GUERREROS DE ESPAÑA

Mensajepor Rescoldo » 24 Mar 2015 23:34

Bueno siguiendo el tema, vamos con la guerra de los cantabros y astures contra Roma:


Cutis escribio

Yo como Asturiano , espero que no te olvides de las guerras cantabricas

"En el occidente estaba ya en paz casi toda Hispania, excepto la parte de la Citerior, pegada a los riscos del extremo del Pirineo, acariciados por el océano. Aquí se agitaban dos pueblos muy poderosos, los cántabros y los astures, no sometidos al Imperio."
Lucio Anneo Floro, historiador romano del siglo I


Pues si tenía razón Lucio Anneo Floro;
Se denominan Guerras Cántabras (29 a. C.-19 a. C.) a los enfrentamientos entre el Imperio romano y los distintos pueblos astures y cántabros que habitaban territorios conocidos ya por los antiguos romanos como Asturiae y Cantabri, en el norte de la península ibérica.
Desde aproximadamente el 50 a.C: solamente los cantabros y astures mantenían la independencia respecto de Roma, y luchaban esporádicamente contra ella, aunque otras veces según los pactos que hubieran hecho se alistaban como tropas auxiliares de Roma. En tanto que los demás pobladores de la península ya habían sido sometidos o se adherían voluntariamente a los romanos.
Se tiene conocimiento de la existencia de cantabros en las legiones de Anibal, En el ejército de Aníbal ocupaban el primer lugar entre la multitud hispana los entonces indómitos cántabros, según lo manifiestan Silio Itálico (libro III), y Quinto Horacio Flacco (lib. IV, oda XIV). esto nos da una idea de la capacidad luchadora de los cantabros.

También parece constatada su intervención ayudando a los vacceos de la Meseta norte contra los romanos en el año 151 a. C. Y así mismo son mencionados de nuevo durante el sitio de Numancia:

Quinto Pompeyo Rufo, a poco de haber tomado el mando de la España Citerior, rompió con la ciudad de Numancia la paz estipulada en los tratados hechos con Tiberio Sempronio Graco, pretestando haber los numantinos dado asilo a los habitantes de Segeda que, en tiempo de Viriato, habían auxiliado a tan célebre caudillo español y tremendo enemigo del pueblo romano. Los de Numancia, dirigidos por el valiente y diestro jefe Megara, se defendieron tan hábil y denodadamente, que Pompeyo Rufo, concluido el período de su mando, dejó en pie la guerra, y a Popilio al frente del ejército. Popilio continuó la lucha, pero con tal desgracia, que se vio derrotado por sus aguerridos y heroicos contendientes. Sucedióle en el mando el cónsul Cayo Hostilio Mancino, el cual sitió a Numancia, y después de haber sufrido grandes pérdidas con las impetuosas salidas de los habitantes, tuvo noticia de que los cántabros y los vacceos marchaban a socorrer a los de la ciudad. No atreviéndose a esperarlos, huyó levantando sigilosamente durante la noche su campamento.
Don Manuel de Assas. Crónica de la Provincia de Santander. 1867.


Iniciada la guerra, al no conseguir victorias reales las tropas romanas, el propio Augusto se trasladara a Hispania y al frente de los ejércitos iniciara la importante campaña del año 26 a. C. contra los cántabros.

Según el historiador romano Dión Casio la táctica de cántabros y astures consistía en una guerra de guerrillas, evitando la acometida directa sobre las fuerzas romanas conscientes de su inferioridad numérica, su inferior armamento y la invulnerabilidad táctica de las legiones romanas en campo abierto. Su mejor conocimiento de un territorio abrupto y montañoso les permitía ofensivas rápidas y sorpresivas mediante el uso de armas arrojadizas, con emboscadas y ataques de gran movilidad seguidos de un ágil repliegue, que causaban graves daños a las fuerzas romanas y a sus líneas de abastecimiento.

Según ha quedado constancia por representaciones en monedas y estelas, los cántabros manejaban con habilidad el armamento ligero y así lo señala el poeta Lucano cuando dice:

Cantaber exiguis et longis Teutonus armis. El cántabro con sus pequeñas armas y el teutón con sus armas largas.
Marco Anneo Lucano. Phars., VI, 259

Los cántabros eran hábiles a la hora de montar a caballo como lo refleja el hecho de que algunas de sus tácticas de caballería pasasen a ser empleadas por el ejército romano tales como el circulus cantábricus, consistente en una formación de caballería en semicírculo, y el cantabricus impetus, ataque frontal y masivo contra las líneas enemigas con el fin de deshacerlas, descritas por Flavio Arriano. La caballería era muy importante para los cántabros, que se organizaban para luchar a pie y a caballo. Representaba el 20 o 25% de sus fuerzas, mientras que para los romanos era solo un 10 a 14% del total del ejército y poseía un papel secundario.7

Las fuerzas de los locales eran al menos al principio de la guerra comparables a las romanas, no se sabe exactamente cuántos eran, aunque los cálculos de Schulten son de 240.000 astures, de estos 80.000 a 100.000 serían capaces de luchar. Los cántabros en cambio sumaban 160.000 a 200.000 personas, y 40.000 a 50.000 eran guerreros.

Según las fuentes el ejército romano se dividió en dos partes, la mayor atacaría a los astures por ser más numerosos, la menor a los cántabros. La calidad del enemigo cántabro fue tal que obligó a Augusto a destacar en el conflicto a varias legiones en distintos momentos de la contienda:

En el año 24 a. C. los cántabros y astures reanudan las hostilidades, si bien con sus fuerzas gravemente debilitadas. Ese año, el nuevo gobernador de la Tarraconencese, L. Elio Lamia, llevó a cabo una cruel represión contra estos pueblos, ya que habían atacado a las tropas romanas atrayéndolas a una emboscada bajo la promesa de provisiones.

Es sustituido en el año 22 a. C. por Cayo Furnio, quien en un principio se pareció a los indígenas, al ser poco experto en cuestiones militares. La nueva acción parte de los astures descontentos con el control militar del gobernador de la Lusitania y arrastran a los cántabros, que, en una operación independiente, son sometidos por Furnio. Posteriormente, este último debe acudir con ayuda del legado de la Lusitania para pacificar a los astures

La mayoría de las batallas importantes fueron libradas entre el 26 y el 22 a. C., siendo esta la época de mayor intensidad de la guerra. Las principales batallas fueron:

Peña Amaya y Monte Bernorio, en el año 26 a. C. Augusto estaba al mando de los romanos.
Bergidum, ciudad astur, conquistada en el 26 a. C.
Bergida o Vellica, gran batalla en Monte Cildá; Valberga (Riaño, León); o la llanada de Mave (Palencia), en el verano del 26 a. C.
Lancia, en la primavera del año 25 a. C. En esta batalla, un gran ejército formado por astures de diferentes tribus es derrotado.
Sitio del Monte Vindio, en el otoño del 25 a. C. La mayoría de los cántabros refugiados en los riscos perecen de hambre y frío al llegar la nieves.
Aracillum, en el invierno del 25 a. C., esta fue, probablemente la batalla más importante de las guerras cántabras, el castro, que ofreció una resistencia heroica fue rodeado por tres campamentos y tomado por Antistio, con 5 legiones a su mando.
Cerco de Monte Medulio, 22 a. C. Los cántabros rodeados por un cerco de 15 millas, prefieren la muerte antes que la esclavitud.

A diferencia de otros conflictos similares, el Imperio romano optó por no hacer prisioneros, lo que supuso la eliminación de los cántabros en edad militar. Según Dión Casio:

"De los cántabros no se cogieron muchos prisioneros; pues cuando desesperaron de su libertad no quisieron soportar más la vida, sino que incendiaron antes sus murallas, unos se degollaron, otros quisieron perecer en las mismas llamas, otros ingirieron un veneno de común acuerdo, de modo que la mayor y más belicosa parte de ellos pereció. Los astures, tan pronto como fueron rechazados de un lugar que asediaban, y vencidos después en batalla, no resistieron más y se sometieron en seguida."
Dión Casio, historiador romano del siglo II

Era costumbre de los guerreros cántabros el suicidio antes que la esclavitud. Bien por la espada, bien por el fuego o, principalmente, envenenándose con pócimas hechas con semillas de tejo, árbol mítico celta, que llevaban preparadas al efecto.9 Así lo recoge Silio Itálico en su descripción sobre las costumbres de los cántabros alistados en el ejército de Aníbal:

"El cántabro, invencible ante el frío, el calor y el hambre, se lleva antes que nadie la palma en toda clase de trabajos. ¡Admirable amor a su pueblo! Cuando la inútil edad senil comienza a encanecerle, pone fin a sus años, ya no aptos para la guerra, envenenándose con el tejo. Para él es imposible vivir sin la guerra, pues toda la razón de su vida la pone en sus armas, considerando un castigo vivir para la paz."
Silio Itálico (III, 326-331)

Estrabón decía que despreciaban la muerte y el dolor, hasta el punto de seguir cantando sus himnos de victoria aún después de crucificados. Para ellos, según Estrabón, morir como guerreros y libres era una victoria.

La guerra se puede dar por finalizada en el 19 a. C., aunque se tiene constancia de rebeliones menores posteriores. La región fue devastada y los castros destruidos e incendiados, deportándose masivamente a la población y trasladándola a las llanuras. Roma, al igual que hizo en otros territorios, quiso imponer sus reformas. No tuvo demasiado éxito debido al fuerte carácter del pueblo cántabro. A pesar de ser masacrado y obligado a bajar al llano, los romanos tuvieron que dejar dos legiones durante unos sesenta años más (la X Gemina y la IV Macedónica).3

Tras las guerras cántabras y el sometimiento de cántabros por Roma, las legiones romanas adoptaron de ellos la simbología solar de cruces gamadas y símbolos lunares, o solares, tales como el lábaro cántabro (en la imagen) que portarían hasta 300 años después. El ejército romano copió de los cántabros también tácticas de caballería como las que dio en denominar el circulus cantabricus y el cantabricus impetus, anteriormente mencionadas.

Las guerras cantabras se recrean todos los años en Los Corrales de Buelna, en el último fin de semana de Agosto y el primer fin de semana de Septiembre
tras finalizar las guerras cantabras, con la dominación de Roma, los romanos fundaron diversas ciudades, entre ellas cabe destacar la de Flaviobriga, en el año 74, por el emperador Vespasiano.
Saludos a todos :saluting-soldier: :saluting-soldier: :saluting-soldier:
Aquí la más principal
hazaña es obedecer,
y el modo cómo ha de ser
es ni pedir ni rehusar.

Charro308
.44 Magnum
.44 Magnum
Mensajes: 215
Registrado: 21 Nov 2008 12:01
Contactar:
Estado: Desconectado

Re: HISTORIA DE MILITARES Y GUERREROS DE ESPAÑA

Mensajepor Charro308 » 26 Mar 2015 21:13

Rescoldo escribió:EL ASEDIO DE NUMANCIA:
El asedio y caída final de Numancia se desarrolla en el año 134 a.c., cuando el senado de Roma encarga a Publio Cornelio Escipión (El Africano) que había derrotado a Anibal en Zama, la conquista de la ciudad que simbolizaba la resistencia celtibera, y que levaba varios años resistiendo, de hecho llego a derrotar al cónsul Nobilior.


Un hilo muy interesante :apla: :apla: :apla:

Sin embargo, en este punto hay que hacer una precisión. No son el mismo personaje Publio Cornelio Escipión "el Africano (Mayor)" que derrotó a Aníbal en Zama en el 204 a.c. y Publio Cornelio Escipión Emiliano "Africano (menor)" "Numantino". El Mayor, que murió en el 183 a.c. adoptó a Emiliano que nació en el 185 a.c. (dos añitos antes). Emiliano no participa en la segunda guerra púnica, sino en la tercera (y última) y es el que lleva a cabo la derrota final de los cartagineses y destrucción de Cartago, "no dejando piedra sobre piedra y sembrando los campos con sal" según cuenta la historia.

Típica confusión con los nombres romanos, iguales o muy parecidos de padres a hijos/hijas, ya fueran naturales o adoptivos.

Pero vamos, que tienes seguidor del hilo para rato. :birra^:
Imagen

SOCIO ANARMA Nº 124

Avatar de Usuario
Rescoldo
Usuario Baneado
Mensajes: 744
Registrado: 25 Feb 2015 03:34
Ubicación: Entre gabachistan y morolandia
Estado: Desconectado

Re: HISTORIA DE MILITARES Y GUERREROS DE ESPAÑA

Mensajepor Rescoldo » 26 Mar 2015 21:48


Charro308 escribio


Un hilo muy interesante :apla: :apla: :apla:

Sin embargo, en este punto hay que hacer una precisión. No son el mismo personaje Publio Cornelio Escipión "el Africano (Mayor)" que derrotó a Aníbal en Zama en el 204 a.c. y Publio Cornelio Escipión Emiliano "Africano (menor)" "Numantino". El Mayor, que murió en el 183 a.c. adoptó a Emiliano que nació en el 185 a.c. (dos añitos antes). Emiliano no participa en la segunda guerra púnica, sino en la tercera (y última) y es el que lleva a cabo la derrota final de los cartagineses y destrucción de Cartago, "no dejando piedra sobre piedra y sembrando los campos con sal" según cuenta la historia.

Típica confusión con los nombres romanos, iguales o muy parecidos de padres a hijos/hijas, ya fueran naturales o adoptivos.

Pero vamos, que tienes seguidor del hilo para rato. :birra^:


Tienes razón, la confusión fue mía, estoy terminando de preparar otra cosa, relativa a Trajano, pero en cuanto la ponga retrocedo y haré una semblanza del mismo, gracias por la puntualización, este hilo está para eso, y que todo aquel que tenga algo que aportar lo haga, y si alguien puede precisar más datos sobre una batalla, pues mejor que amplíe lo que sepa, la diversidad siempre enriquece y no divide.
:saluting-soldier: :saluting-soldier: :saluting-soldier: :birra^: :birra^: :birra^:
Aquí la más principal
hazaña es obedecer,
y el modo cómo ha de ser
es ni pedir ni rehusar.

Avatar de Usuario
Rescoldo
Usuario Baneado
Mensajes: 744
Registrado: 25 Feb 2015 03:34
Ubicación: Entre gabachistan y morolandia
Estado: Desconectado

Re: HISTORIA DE MILITARES Y GUERREROS DE ESPAÑA

Mensajepor Rescoldo » 26 Mar 2015 22:48

LA BATALLA DE MUNDA:

Las llanuras y cerros de Munda, la antigua colonia romana en Bætica (Hispania), fueron el escenario de la batalla de Munda (17 de marzo de 45 a. C.), una victoria de los ejércitos de Julio César sobre los pompeyanos al mando de Tito Labieno, Cneo y Sexto, estos dos últimos los hijos del difunto Pompeyo el Grande, siendo esta la última batalla de la Segunda Guerra Civil Romana. Aunque son varias las localidades propuestas para su ubicación, no hay aún elementos convincentes para decidirse por alguna en concreto, pues todas tienen algo a favor y algo en contra, y ninguna cuenta con inscripciones geográficas probatorias, por lo que el problema de la ubicación exacta de Munda permanece abierto. El día anterior a la batalla –el 16 de marzo– César había perseguido a Cneo Pompeyo desde Ucubis (Espejo) alcanzándole a mediodía en Ventippo, posiblemente Casariche (Sevilla), Gilena (Sevilla) o la población de Santaella, en la Campiña Sur Cordobesa.


El propio Julio Cesar definía esta batalla como la más difícil de las que había librado, ya que en las anteriores lucho para derrotar al enemigo y conseguir la victoria, en este caso, llego a temer por su vida, dado que presentó batalla en un terreno sumamente desfavorable, teniendo que atravesar un torrente y subir a una alta colina donde se había fortificado Pompeyo "El Joven", por suerte para Cesar, la valentía y el ímpetu con la que combatieron los legionarios de la legión Legio X Equestris (Futura Legio Gemina) que evito que las tropas de Cesar quedaran rodeadas y así pudieran desplegar su caballeria,
Curiosamente en este caso, Tito Labieno traslado sus tropas para interceptarlos, pero este movimiento fue mal interpretado por el resto de los pompeyanos, que creyeron que era una retirada, lo que hizo que a su vez abandonaran el campo de batalla en desbandada.

Los dos ejércitos se enfrentaron en las llanuras de Munda, en la Bætica. El ejército pompeyano estaba acampado en una colina suave, una posición desfavorable para el ataque de César. Permanecieron a la vista varios días hasta el 17 de marzo, día en el que César inició la batalla.

La batalla duró un tiempo sin ventaja aparente para ningún lado, viéndose forzados los generales a dejar sus posiciones de mando y a unirse a la misma a fin de levantar la moral. César tomó el mando del ala derecha, donde la Legio X Equestris peleaba duramente. Su presencia elevó la moral de la X y empezó a avanzar. Dándose cuenta de la maniobra, Cneo Pompeyo desplazó una legión de su ala derecha para reforzar la izquierda, lo que constituyó un error fatal, ya que el ataque de la Legio X Equestris no era más que una treta.

Tan pronto el flanco derecho de Pompeyo fue debilitado, la caballería de César lanzó un ataque por dicho flanco que cambiaría el desenlace de la batalla. Al mismo tiempo, el rey Bogud de Mauretania, aliado de César, atacó el campamento de Pompeyo desde la retaguardia. Tito Labieno, comandante de la caballería pompeyana, se dio cuenta del ataque y se desplazó al campamento para responder. No obstante, los legionarios pompeyanos, sometidos al fuerte ataque de la X Equestris por el flanco izquierdo, y de la caballería por el derecho, creyeron que Labieno se retiraba. Temiendo lo peor, los legionarios rompieron el frente y huyeron.

Muchos soldados pompeyanos murieron durante la retirada. Otros murieron defendiendo la ciudad de Munda. Atio Varo y Tito Labieno murieron, pero Sexto y Gneo Pompeyo alcanzaron la ciudad de Corduba, donde se refugiaron

Las cabezas de Publio Accio Varo y Tito Atio Labieno, todas las águilas de las legiones pompeyanas y las armas que había dejado atrás los vencidos para huir más deprisa fueron presentadas al general victorioso.
Muchos de los vencidos buscaron refugio en la ciudadela pero César ordenó bloquear con estacas atravesadas a los cuerpos de los muertos toda posible ruta de escapatoria, luego fue tarea de Máximo conquistarla, al igual que la vecina Urso

Después de la batalla, César procedió, tras un célebre discurso recriminatorio en Híspalis (mes de abril), a "castigar" a las ciudades simpatizantes de Pompeyo, convirtiéndolas en Municipium Civium Romanorum, y a recompensar a las pocas que le habían sido fieles con el estatuto de Coloniæ Civium Romanorum, según reciente nueva traducción y reinterpretación del famoso pasaje de Dión Casio XLIII,

Posteriormente un año despues, Julio Cesar sería asesinado a las puertas del Senado de Roma, dando así lugar al inicio de la Tercera Guerra Civil Romana.
Saludos :saluting-soldier: :saluting-soldier: :saluting-soldier:
Aquí la más principal
hazaña es obedecer,
y el modo cómo ha de ser
es ni pedir ni rehusar.

Avatar de Usuario
Rescoldo
Usuario Baneado
Mensajes: 744
Registrado: 25 Feb 2015 03:34
Ubicación: Entre gabachistan y morolandia
Estado: Desconectado

Re: HISTORIA DE MILITARES Y GUERREROS DE ESPAÑA

Mensajepor Rescoldo » 28 Mar 2015 22:49

LOS EMPERADORES HISPANOS:

Tras acabar la guerra con los cantabros y astures, con Hispania "pacificada", Roma consolida su dominio, y se suceden una serie de cónsules y emperadores, comenzando por la dinastía Claudia, con Augusto, Tiberio, Calígula, Claudio y Nerón, siguiendo con la época de las guerras civiles en las que detentaron el poder Galba, Otón y Vitelio, hasta llegar a la dinastia Flavia, con Vespasiano, Tito y Domiciano, (este último se cree que desarrollo una enfermedad mental como consecuencia del envenenamiento por ingerir el plomo con el que estaban recubiertas las vasijas para beber vino), pasando posteriormente a los denominados emperadores adoptivos, Nerva, Trajano y Adriano, estos dos últimos de origen Hispano.
:saluting-soldier: :saluting-soldier: :saluting-soldier:
Aquí la más principal
hazaña es obedecer,
y el modo cómo ha de ser
es ni pedir ni rehusar.

Avatar de Usuario
Rescoldo
Usuario Baneado
Mensajes: 744
Registrado: 25 Feb 2015 03:34
Ubicación: Entre gabachistan y morolandia
Estado: Desconectado

Re: HISTORIA DE MILITARES Y GUERREROS DE ESPAÑA

Mensajepor Rescoldo » 28 Mar 2015 23:35

TRAJANO

Marco Ulpio Trajano, era de origen hispano nacido en Italica, a pocos kilometros de Hispalis (Sevilla), toda su familia siempre fue fiel a la dinastía Flavia, siendo su padre gobernador de Siria, donde con 24 años Trajano tuvo el mando de una legión.

Realizó todo el cursus honorum, siendo cuestor, pretor y legado, lo que le facilito el conocer la vida militar perfectamente y el sistema de vida de los legionarios y de los oficiales.

Destacó en el ejército romano en tiempos de Domiciano. Fue tribuno militar (tribunus legionis) en Siria, y legado de la legio VII Gemina en Hispania, con efectivos de la cual aplastó con éxito en Germania la revuelta de Antonio Saturnino en 89. Más tarde cónsul el año 91, junto con Manio Acilio Glabrión). En torno a ese año, llevó consigo a Apolodoro de Damasco a Roma.

En el año 96 se convirtió en gobernador de Germania, prestando servicio sobre la frontera germana, una de las más problemáticas del imperio, a lo largo del río Rin. Residió en Maguncia y Colonia (Alemania). Tomó parte en las guerras del emperador Domiciano contra los pueblos germanos, y era conocido como uno de los mejores comandantes del imperio cuando, en el año 96, fue asesinado Domiciano.

Trajano se encontraba en Colonia cuando su sobrino segundo Adriano (futuro emperador y entonces tribuno) le comunica el fallecimiento de Nerva. Se convertía en emperador el 27 de enero del 98, a la edad de 45 años. El ser el primer emperador no itálico demostraba que la península itálica estaba perdiendo su papel central en la política romana. Una vez nombrado emperador, no marchó rápidamente a la capital, sino que se limitó a sustituir algunos hombres infieles, a castigar a los pretorianos involucrados en la revuelta contra su predecesor, reduciendo a la mitad el tradicional donativo para celebrar el ascenso al trono. Una de sus primeras actuaciones fue mejorar la red de carreteras entre Mogontiacum (Maguncia) y Augusta Vindelicorum (Augsburgo). Además inició la construcción de un limes para asegurar los Campos Decumanos (Agri decumates, tierras germanas en el lado derecho del Rin), que habían sido ganadas para el imperio bajo Domiciano. Hasta que no estuvo satisfecho con la seguridad del territorio entre el Rin y el Danubio, no marchó a Roma, donde hizo su entrada triunfal dos años después de ser nombrado emperador, tras de haber asegurado la frontera renana

El nuevo Emperador romano fue acogido por el pueblo de Roma con gran entusiasmo, que justificó gobernando bien y sin el derramamiento de sangre que había marcado el reinado de Domiciano. Liberó a muchas personas que habían sido encarceladas injustamente por Domiciano y devolvió buena parte de propiedad privada que Domiciano había confiscado; un proceso comenzado por Nerva antes de su muerte. Su popularidad fue tal que con el tiempo el Senado Romano le confirió a Trajano el título honorífico de optimus, esto es, «Óptimo».

Durante la ceremonia en el Senado con motivo de su ascenso al trono imperial, el senador Plinio le dedicó un famoso e interminable Panegírico (Panegyricus Traiani) en el que pedía que se concediera al Senado una mayor implicación en la conducción de los asuntos de la administración pública del Estado; Trajano observó aquella regla y llamó a muchos de los «padres conscriptos» (senadores) a gobernar las provincias romanas. Conservó un control muy fuerte, ocupándose escrupulosamente de los asuntos de las diversas provincias y arrogándose, por ejemplo, los permisos para la construcción de edificios públicos. Esto le permitió desenmascarar y castigar a muchos senadores reos del delito de malversación, que habían aprovechado la política indulgente del precedente emperador, Nerva. Trajano se valió de un órgano judicial creado por él para investigar estos delitos, el Consilium Principis, del cual formaron parte los mejores juristas de la época. Fueron numerosos los investigados por casos de mal gobierno de las provincias, si bien el mismo Senado dictó generalmente sentencias favorables.

Trajano destaca sobre todo como comandante militar, particularmente por sus conquistas en Oriente Próximo, pero inicialmente por las dos guerras contra Dacia, en lo que hoy es Rumanía—su conquista (101-102), luego su reconquista demorada del reino fronterizo transdanubiano de Dacia—una región que había perturbado el pensamiento romano desde hacía más de una década con la desfavorable (y, para algunos, vergonzosa) paz negociada por los servidores de Domiciano.9 Durante el reinado de Trajano uno de los más importantes éxitos romanos fue la victoria sobre los dacios. La primera confrontación importante entre los romanos y los dacios aconteció en el año 87 y fue iniciada por Domiciano. El prefecto pretoriano Cornelio Fusco cruzó el Danubio con cinco o seis legiones sobre un puente de barcas y avanzó hacia Banato (en Rumanía). Fueron sorprendidos por un ataque dacio en Tapae (cerca del pueblo de Bucova, en Rumanía). La Legión V Alauda fue aplastada y Cornelio Fusco fue sacrificado. El general victorioso se llamaba en un principio Diurpaneo, pero después de esta victoria fue llamado Decébalo (el valiente).

El emperador Domiciano había hecho campaña contra Dacia desde 86 a 87 sin asegurarse un resultado decisivo y Decébalo había desobedecido descaradamente los términos de la paz que había pactado al término de esta campaña.

Con esta ofensiva para ampliar territorios, Trajano acababa con una política seguida desde los tiempos de Augusto de mantener el Imperio dentro de ciertos límites y hacer simples guerras defensivas. La única excepción había sido la conquista de Britania en tiempos de Claudio. Hacia marzo de 101, Trajano inició su primera guerra contra los dacios liderados por Decébalo. Para ello, Trajano pasó a la orilla septentrional del Danubio sobre un puente de piedra que había construido, cruzó las Puertas de Hierro y se dirigió hacia la capital, Sarmizegetusa. Atacó el reino de Dacia con cuatro legiones Derrotó al ejército dacio cerca de un puerto llamado Tapae . Las tropas de Trajano, sin embargo, quedaron dañadas en el encuentro, y desistió de cualquier otra campaña durante el resto del año, para sanar a las tropas, reforzarse y reagruparse

Durante el invierno posterior, el rey Decébalo lanzó un contraataque cruzando el Danubio más lejos corriente abajo, pero fue rechazado. El ejército de Trajano se adentró más en territorio dacio y forzó al rey Decébalo a someterse el año siguiente, después de que Trajano acampara a pocos kilómetros de la capital, Sarmizegetusa Regia.

Al volver a Roma, obtuvo el título de «Dácico» (Dacicus) y se conmemoró el triunfo, celebrado en el Trofeo de Adamclisi. No obstante, Decébalo, al que habían dejado que se las arreglase solo, emprendió una invasión contra territorio romano intentando levantar a algunas de las tribus del norte del río contra Roma. Trajano se puso de nuevo en marcha, partiendo de Ancona y llegando a las riberas del Danubio. Las fuentes hablan de 13 legiones trasladadas para someter definitivamente aquella tierra rica en oro y aquel pueblo que durante el reino de Domiciano había pasado Mesia a hierro y fuego. Creó dos nuevas legiones, la II Trajana Fuerte y la XXX Ulpia Vencedora. Hizo construir, con el diseño de Apolodoro de Damasco, su macizo puente sobre el Danubio, empresa muy parecida por otra parte a la de César con Ariovisto.

Los siete años siguientes, Trajano gobernó como un emperador civil, pero con el mismo éxito que antes. Fue en esta época cuando mantuvo correspondencia con Plinio el Joven sobre el tema de cómo manejar a los cristianos del Ponto, diciéndole a Plinio que los dejara en paz a menos que practicaran abiertamente su religión. Construyó varios edificios nuevos, monumentos y carreteras en Italia y su Hispania natal. Su magnífico complejo en Roma se alzó para conmemorar sus victorias en Dacia, y en gran medida se financiaron con el botín de esa campaña; estaba formado por un foro, la Columna Trajana y el mercado de Trajano que aún se conservan en la Roma actual. También fue un prolífico constructor de arcos triunfales, muchos de los cuales se conservan y reconstructor de carreteras como la vía Trajana y la vía Trajana Nova.

En el 107, tras volver de Oriente celebró un triunfo en Roma por sus victorias en Dacia y Arabia.

Un acto destacado de Trajano fue celebrar unos juegos de gladiadores de tres meses en el gran Coliseo de Roma, aunque la fecha exacta se desconoce. Combinando carreras de carros, lucha con animales y luchas de gladiadores, se dijo que este espectáculo sangriento había dejado 11.000 muertos, en su mayoría esclavos y criminales, por no mencionar a las miles de bestias feroces muertas junto con ellos. Atrajo a un total de cinco millones de espectadores a lo largo de los juegos

Conquistó Dacia completamente en 106, a pesar de la fuerza y la vehemencia de los dacios, guerreros que si no caían en la batalla se suicidaban por su dios Zalmoxis. El avance del ejército de Roma hasta la capital Sarmizegetusa Regia no padeció obstáculos gracias a su superioridad numérica, a la logística y a las tácticas ya consolidadas por siglos de guerras y asedios. La comprobada formación en tortuga, por ejemplo, fue el centro de las tácticas de asedio en Dacia. Con ocasión de estas batallas, además, Trajano introdujo una nueva arma, el carrobalista, el verdadero antepasado del cañón de campaña, un medio que reunía la movilidad necesaria en batalla con una gran potencia y que contribuyó a la victoria romana. Los romanos tomaron la capital dacia, Sarmizegetusa, y la destruyeron. Decébalo se suicidó, y su cabeza cortada fue exhibida en Roma en los escalones que llevaban al Capitolio. Fundó una nueva ciudad, «Colonia Ulpia Traiana Augusta Dacica Sarmizegetusa», en otro lugar distinto a la de la previa capital dacia, aunque llevó el mismo nombre, Sarmizegetusa. Colonizó Dacia con romanos y la anexionó al imperio como una nueva provincia. Las campañas dacias de Trajano beneficiaron las finanzas del Imperio a través de la adquisición de las minas de oro de Dacia. Además, descubrió el tesoro escondido de Decébalo, que ascendía a 165 toneladas de oro y el doble de plata.5 Estas guerras se conmemoran en la columna de Trajano, que se levantó conjuntamente con el Foro (Foro de Trajano), donde fue colocada para celebrar la gran victoria.

Otro acto importante fue su creación formal de los alimenta, un programa de bienestar que ayudaba a niños huérfanos y pobres por todo el imperio romano. Proporcionaba fondos generales, así como comida y educación subvencionada. El programa se vio apoyado inicialmente por los fondos de la guerra dacia, y más tarde por una combinación de impuestos estatales y filantropía. Así favorecía al tiempo el desarrollo de la natalidad, que había caído hasta índices alarmantes, de manera que se corría el peligro de que hubiera escasez de soldados. Sobre el arco de Benevento está representada la distribución de víveres entre la población y sobre todo a los niños pobres en base a la Institutio Alimentaria. También en relieves conservados en el Foro Romano se hace referencia a la institución de los «Alimenta Italiae» en favor de los «pueri et puellae alimenticios».

Con ello se pone en evidencia que Trajano no concentró sus energías y las del Imperio sólo en campañas militares y la construcción de edificios públicos. También fue un cauteloso estadista y filántropo, interesado a las condiciones de sus ciudadanos y por tanto atento en las reformas sociales y políticas. En materia judicial disminuyó los tiempos de los procesos, prohibió las acusaciones anónimas, así como las condenas con falta de pruebas sólidas o en presencia de cualquier duda. En materia económica y social encontró la forma de organizar la burocracia y promulgó leyes a favor de la pequeña propiedad campesina, cuya base estaba amenazada al extenderse el latifundio. Trajano favoreció la repoblación de campesinos libres en la península, invirtiendo capitales y proporcionando a los colonos los medios por sustentarse y trabajo en los campos; a cambio, los colonos invertían una parte de las cosechas como pago de la deuda. Este sistema, conocido como colonato, necesitó control estatal para poder funcionar. Por un lado, había que impedir que los recaudadores de impuestos depredaran a los colonos o que los latifundistas exigieran más de lo debido reduciendo a la miseria y la semiesclavitud a los campesinos; por otro necesitaba defender a los colonos de los bandidos y los invasores que hubieran podido devastar las tierras obligándoles al abandono del campo y marchar a la ciudad dejando las tierras sin cultivar. Para evitar el declive de la agricultura itálica impuso a los senadores que invirtieran en Italia al menos la tercera parte de sus capitales. Puso límites a la emigración de la península, intentando incentivar la presencia de la clase social empresarial y la mano de obra en una Italia que estaba perdiendo su centralidad y que estuvo a punto de encaminarse a una fase de decadencia. Trajano hizo quemar los registros de los impuestos retrasados para aliviar la presión fiscal sobre las provincias, acto que se encuentra representado en los llamados Plutei de Trajano de la Curia Julia. Abolió algunas tasaciones que cargaron sobre los provinciales y los itálicos; pudo crear así un tipo de caja de ahorros popular que concedió préstamos a los pequeños campesinos y empresarios romanos que se beneficiaron así de amplias concesiones; así se favorecieron las primeras cooperativas y asociaciones profesionales.

Con los beneficios y las rentas de las reformas emprendidas, Trajano edificó colegios y orfanatos para los hijos ilegítimos y los huérfanos de sus soldados garantizándoles un subsidio mensual y una instrucción adecuada. Al hacer esto, el emperador garantizó a los emperadores siguientes una clase social dirigente hábil y capaz. Los problemas económicos se solucionaban en el campo de batalla, que tenía la doble finalidad de establecer la paz en las fronteras y encontrar el oro y la plata necesarios para las construcciones, las reformas y para colmar el déficit económico de los emperadores precedentes. Su sucesor, Adriano, se encontró que le tocaba en suerte un imperio económicamente activo.

Sus prolongadas estancias en la guerra exterior no impidieron, pues, a Trajano llevar a cabo una intensa política interior, motivo de encendidos elogios en la historiografía romana, portavoz de la opinión del Senado, una antigua institución que reunía en su seno a la aristocracia y añoraba el poder del que había gozado en el régimen republicano anterior a la instauración del Principado por Augusto.

El ascenso al poder de Trajano supuso para el senado la recuperación de la libertad perdida, «un tiempo nuevo», dice Plinio. Con la colaboración del senado, donde instauró el voto secreto, Trajano trazó un plan de regeneración moral y política que tuvo consecuencias en la administración, la justicia y la economía.

En 113 Trajano comenzó una campaña contra los partos, provocada por la decisión del rey parto Osroes de colocar a un rey títere inaceptable en el trono de Armenia, un reino sobre el cual habían compartido hegemonía los dos grandes imperios desde los tiempos de Nerón unos cincuenta años antes. Probablemente, la idea del emperador nacía también de su deseo de llevar a cabo las campañas que tenía Julio César, su autor favorito, antes de morir: al norte del Danubio y contra los partos.

La primera fase fue un completo éxito. Los partos fueron derrotados y Armenia, Asiria y Mesopotamia fueron integradas en el Imperio. Comenzó por Armenia, deponiendo en el año 114 a su rey parto, Partamasiris, y convirtiendo a Armenia en provincia romana. Luego marchó hacia el sur, entrando en la propia Partia, tomando las ciudades de Babilonia, Seleucia y finalmente la capital Ctesifonte en el año 116. Siguió hacia el sur, hasta alcanzar el Golfo Pérsico, lamentando ser demasiado viejo para seguir los pasos de Alejandro Magno5 y alcanzar la propia y distante India. Fue el punto oriental más lejano al que llegó el Imperio romano. No sólo quedó ocupada toda Mesopotamia sino que la vanguardia del ejército romano, dirigida por Lucio Quieto se asomó a las primeras cadenas montañosas de Persia. Con las nuevas provincias de Mesopotamia y Asiria, el Imperio alcanzó su máxima extensión, teniendo su frontera oriental en el río Tigris y no, como hasta entonces, en el Éufrates.

Más tarde en 116, Trajano cayó enfermo y emprendió el viaje de vuelta hacia Italia. Su salud declinó en la primavera y el verano de 117, y para cuando llegó a Selinus de Cilicia, que más adelante se llamó Trajanópolis en su honor, murió repentinamente de edema el 9 de agosto. Las cenizas de Trajano se colocaron debajo de la Columna Trajana, el monumento que conmemoraba su éxito, derogando la antigua ley que impedía las sepulturas en el interior del perímetro ciudadano. La urna se perdió durante las invasiones bárbaras, y se perdió su rastro, siendo presumiblemente fundida. Adriano, al convertirse en emperador, devolvió Mesopotamia al imperio parto, como parte de un tratado de paz en el 125, pero se conservaron el resto de territorios conquistados por Trajano.

Como constructor fue uno de los más grandes emperadores, a el se debe el magnifico Puente de Alcantara, así como numerosos acueductos, puertos y reformas urbanisticas.

Para estar más cercano al pueblo romano, Trajano hizo escribir sobre la puerta de su residencia Palazzo Pubblico, para que todo el mundo pudiese entrar en él libremente. Solía recibir, personalmente y sin cita previa, a quien quisiera conseguir de él justicia. De lo que deriva otra anécdota célebre: ante las protestas de su secretario, que se quejaba de que su señor confiase incautamente en todo el mundo, Trajano le contestó: «Trato a todos como quisiera que el Emperador me tratase a mí, si fuese un ciudadano particular».

El historiador del siglo XVIII Edward Gibbon incluyó a Trajano entre los cinco emperadores que gobernaron el gran territorio del Imperio romano «por un poder absoluto, guiado por la virtud y la sabiduría», considerando que

Si se pidiera a cualquiera que determinara el período de la historia del mundo en que la condición humana fue más próspera y feliz, mencionaría sin dudar la que se extiende entre la muerte de Domiciano hasta el ascenso de Cómodo.

«Traian» se usa como un nombre de pila en la Rumania actual, entre otros, lo tienen el presidente Traian Băsescu. En el himno nacional de Rumania, Deşteaptă-te, române!, se evoca a Trajano en la estrofa décimosegunda:
la traducción del rumano al castellano dice:

¡Y que en nuestros corazones guardamos con orgullo un nombre
Triunfante en las batallas, el nombre de Trajano!

Saludos :saluting-soldier: :saluting-soldier: :saluting-soldier:
Aquí la más principal
hazaña es obedecer,
y el modo cómo ha de ser
es ni pedir ni rehusar.

Avatar de Usuario
Rescoldo
Usuario Baneado
Mensajes: 744
Registrado: 25 Feb 2015 03:34
Ubicación: Entre gabachistan y morolandia
Estado: Desconectado

Re: HISTORIA DE MILITARES Y GUERREROS DE ESPAÑA

Mensajepor Rescoldo » 30 Mar 2015 01:35

ADRIANO

(Publio Elio Adriano; Roma, 76 - Baia, 138) Emperador romano de la dinastía de los Antoninos. Procedente de una familia hispana de Itálica (cerca de Sevilla) que había alcanzado el rango senatorial, quedó huérfano a los ocho años y recibió una esmerada educación bajo la protección del emperador Trajano, que era pariente suyo; su casamiento con una sobrina del emperador y su amistad con la emperatriz Plotina fortalecieron ese vínculo, siendo por tanto el segundo emperador de origen hispano que tuvo Roma.

Acompañó a Trajano en la guerra de Dacia (105-106), fue nombrado gobernador de Panonia Inferior (107), cónsul (109) y gobernador de Siria (116). Al morir Trajano, Adriano accedió al Trono imperial en extrañas circunstancias, contando con el apoyo de la emperatriz (que aseguró que el emperador había adoptado a Adriano días antes de morir) y del «clan hispano» del Senado, que había acrecentado su influencia durante el reinado anterior.

Para asegurarse el apoyo del ejército elevó la paga de los soldados; Plotina multiplicó las cartas a los senadores indicando que había sido la última voluntad de su esposo ser sucedido por Adriano; y su prefecto del pretorio, Atiano, hizo ejecutar sin juicio a varios adversarios. Las protestas del Senado por estos hechos le obligaron a destituir a Atiano, quien sin embargo fue recompensado con el rango senatorial.

El reinado de Adriano estuvo marcado por los enfrentamientos con el Senado y por los viajes del emperador; además de múltiples visitas a las provincias y fundaciones de ciudades, encabezó algunas campañas militares: primero contra las tribus del norte de Britania, en donde hizo levantar la muralla que lleva su nombre; y más tarde contra la rebelión de los judíos (la Segunda Guerra Judía de 132-35). Pero globalmente fue un periodo de paz, durante el cual, derrotado el «partido belicista», se abandonaron las conquistas realizadas por Trajano en Oriente y se desarmaron las regiones ya civilizadas.

Adriano consolidó el Consejo del emperador e introdujo reformas en la burocracia (que quedaría reglamentada hasta el fin del Imperio), en el ejército y en la Hacienda (haciendo prevalecer la recaudación directa de los impuestos frente a los intereses de los intermediarios particulares). Promovió grandes construcciones, como el anfiteatro de Nimes, el anfiteatro de Venus, el Castillo de Sant'Angelo y los puentes del Tíber en Roma. Abandonado por sus principales colaboradores hacia el final de su reinado, no consiguió restaurar la sucesión hereditaria.

Al recorrer la historia de Adriano no podemos dejar de asombrarnos por su gran capacidad para volcar sus conocimientos filosóficos en función de una política antimilitarista que elevara aún más la grandeza de Roma.

Esto ha quedado demostrado en aquella historia que rememora un pasado lleno de padecimiento físico debido a la grave enfermedad cardiorespiratoria que sufría el emperador, y que en un determinado momento de su vida lo condujo sin remedio a un permanente reposo.

Precisamente pertenece a aquella época una de las tantas citas del emperador que han podido rescatarse en el tiempo, oportunidad en la cual Adriano se lamentó: “Continuamente notaba en el pecho la oscura presencia del miedo, una opresión que no era todavía dolor pero sí el primer hacia él”.

No obstante, seguramente fue en ese instante en el que Adriano sintió más fuerzas para continuar con su cometido, lo que lo llevó a experimentar situaciones tales como estar presente en el Senado recostado sobre su propia litera, e incluso emitir sus últimos discursos en esta misma condición,

sin poder incorporarse de aquel lecho que se convirtió en la morada de sus últimos momentos.

Su grave enfermedad no logró amedrentar su fortaleza, lo que podemos comprobar en las propias palabras de Adriano, quien entre sus citas nos ha dejado el recuerdo de aquellas experiencias: “Me hice llevar en litera al Senado y pedí permiso para pronunciar acostado mi discurso".

La historia nos indica que fue durante su mandato que el Imperio Romano logró conseguir su mayor extensión territorial, precisamente en el año 125, a través de una política antimilitarista, que logró llevar la paz y la prosperidad a Roma.

La política militar del mandato de Adriano se caracterizó principalmente por una serie de principios que lo distinguieron del resto de emperadores itálicos, basándose en una estrategia que se orientó hacia la transformación de los límites del imperio en una completa defensa que permitía mantener el territorio de Roma.

Los fuertes entrelazados y diseminados a través de todos los límites de Roma, que fueron parte de la estrategia defensiva del emperador, fueron conocidos como la Muralla de Adriano, y el llamado El Muro de Adriano, el cual se ubicaba en la región norte de las tierras conquistadas de Britania, es decir entre Inglaterra y Escocia.

Los ideales de Adriano se contrastaban con la política que años antes había impuesto su antecesor Trajano, en las que primaban las conquistas, por lo que uno de los primeros hechos destacados del mandato de Adriano se sucedió cuando logró un acuerdo de paz con el imperio Parto, a través del cual Roma debió abandonar las regiones conquistadas. Lo mismo se produjo con Dacia, actual Rumania.

La mayoría de los historiadores coincidan en definir a Adriano como un verdadero humanista helenófilo, que se ocupó permanentemente de difundir y propagar el helenismo a lo largo y ancho de todas las provincias del mundo antiguo.

Durante su mandato, Adriano se ocupó de edificar bibliotecas, acueductos, termas, teatros, erigir monumentos, fundar ciudades y construir fortificaciones que elevaron el poder y el espíritu de Roma y sus ciudadanos.

Adriano fue uno de los emperadores romanos que permitió originar una verdadera prosperidad social y económica en el territorio itálico, gracias a su estrategia basada en la paz y la exaltación de la cultura.

Lamentablemente, si bien la muerte ya había dejado vislumbrar las primeras señales de su presencia en el momento en que Adriano comenzó a padecer de disnea, y se profundizó su insuficiencia cardiaca con el paso el tiempo, el final lo sorprendió, sin dudas, sin haber logrado cumplir por completo la misión que se había propuesto.

Puede decirse sin lugar a dudas que el reinado de Adriano marcó un punto de inflexión en la política romana, que paso de impulsar las conquistas y ampliación de territorios, a establecer de forma definitiva las fronteras del imperio, expandiendo la forma de vida romana a través de la cultura.

Saludos :saluting-soldier: :saluting-soldier: :saluting-soldier:
Aquí la más principal
hazaña es obedecer,
y el modo cómo ha de ser
es ni pedir ni rehusar.

JotaErre
375 HH Magnum
375 HH Magnum
Mensajes: 4367
Registrado: 05 May 2010 12:08
Contactar:
Estado: Desconectado

Re: HISTORIA DE MILITARES Y GUERREROS DE ESPAÑA

Mensajepor JotaErre » 30 Mar 2015 23:05

Aunque no fuera de origen hispánico, creo que valdría la pena dedicar unas palabras a Marco Aurelio, el último de los "cinco emperadores buenos" (Nerva, Trajano, Adriano, Antonino Pío y Marco Aurelio). Marco Aurelio era un gran filósofo (de la escuela estóica), un excelente poeta y un pacifista por convencimiento que se vio obligado a hacer la guerra... y la hizo muy bien, derrotando a todos los enemigos que se cruzaron en su camino.


Volver a “Historia Militar”

¿Quién está conectado?

Usuarios navegando por este Foro: No hay usuarios registrados visitando el Foro y 113 invitados