ArturoZar escribió:antares308 escribió:Quebracho escribió:Lo de la energía y velocidad creo que es una buena referencia...el problema es que deja fuera el tipo de punta que utilizamos y eso es de capital importancia.
Porque también vemos tiros bien colocados, con velocidad y energía mas que suficiente y los bichos siguen como si nada
Muy correcto......al final de todo, es lo que realmente mata......la bala.
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Pero si no tenemos claro el tamaño del martillo que necesitamos, imaginate si ademas no elegimos bien el clavo.
Salut
Muy buen ejemplo y muy buena frase.
Y a PATXIMÁLAGA : no necesitas cambiar el martillo y buscar una porra de picapedrero de 5 Kgs y clavar puntas de traviesa de tren. Quizá baste con cambiar el clavo y el lugar dónde clavar.
Tengo 444 y 270 Win y se parecen lo mismo que un tiesto y una pelota de golf, tanto en alcance, precisión, retroceso, velocidad y trayectoria de las balas.
En el 270 te recomendaría tres balas para tiros de batida: Core Lock de punta chata 150 grains, Federal Power Shok 150 RN y sobre todo Sako Hammerhead 156 grains, también barata, muy precisa y regular y algo más recia que las otras manteniendo expansión y penetración incluso en tiros a 10 pasos.
Si además te acostumbras a apuntar detrás del OJO en vez del codillo, con la velocidad del 270, incluso en piezas a la carrera, lograrás alcanzar el troncogote-triángulo de la muerte de forma sistemática, al estilo del Principito. Y no añorarás la patadona del 444/45-70 ni necesitarás el tiesto volador de sus 240-260 grains chatos para lograr el Efecto Derrumbante de Pardal con el " delicado " 270 Win.
Créeme que con esas balas y cambiando el punto diana al ojo-troncogote el 270 también parece cambiar su poder fulminante de forma radical.
Piensa que el salto del 270 W al 45/70 es similar a cambiar un divertido deportivo por un camión 4x4.