El laboratorio de investigación de la Fuerza Aérea de EE.UU. está trabajando en el programa SHIELD, cuyo objetivo es desarrollar un sistema láser de autodefensa capaz de derribar misiles tierra-aire y aire-aire, según informa la revista electrónica de noticias y servicios aéreos Flightglobal.
De acuerdo con este medio de comunicación, los láseres eléctricos de "potencia moderada" -que en realidad funcionan con decenas de kilovatios- serán incorporados a los aviones de combate supersónicos, entre ellos el Lockheed Martin F-35 y el F-22, así como los futuros cazas y bombarderos.
El sistema láser, que se colocaría en una capsula especial, promete ser significativamente más potente que el sistema de autodefensa empleado actualmente y que consiste en una contramedida direccional por infrarrojos (DIRCM), producto de la empresa estadounidense Northrop Grumman.
Flightglobal señala que la potencia de los láseres sería capaz de quemar o desactivar de alguna u otra manera misiles guiados por infrarrojo o radares a altas velocidades. Con su incorporación, podría comenzar "la era de los láseres de combate".
Los investigadores planean realizar las pruebas del nuevo sistema en laboratorio para el año 2017, mientras que la presentación del prototipo está prevista para 2021.
Vía: Flight Global
