Klibre escribió:Yo creo que es más sencillo. Los standares no los marca el gobierno. Salen de la industria, y organismos asociados, segun la industria avanza. Pasa en todos los sectores. Vienen nuevas tecnologias, materiales, formas de fabricación. La industria los incorpora y las normas se adaptan. La Administración de vez en cuando actualiza las normas de aplicación. Es decir, es un proceso abajo a arriba
No es que se haya levantado un dia un GC y haya dicho... Hostia, hay que cambiar los armeros.
Es que un dia, la industria ya no le interesa fabricar un producto segun un standard antiguo, y le recuerda a la Admon que pronto ua no lo habrá y entonces, el reglamento quedara obsoleto y la Admon, cuando toque , lo actualiza, pero en armas, en ITV, con las calderas, los aires acondicionados, las centrales termicas, etc..hay casos concretos en que un suceso como una serie de explosiones de bombonas de gas, puede movilizar a la administracion a regular requisitos que obliguen a standares más restrictivos, (arriba a abajo) pero en el caso de los armeros yo no tengo noticoa de que haya ocurrido esto. Si fuera así, efectivamente deberiamos preguntar cual ha sido la alarma social que lo ha motivado. Si no lo es, no busquemos enemigos falsos que ya tenemos muchos de verdad.
Eso es cierto sólo hasta cierto punto, porque en otros ámbitos oficiales se suele indicar "requerida homologación año tal, o más reciente", entendiendo que homologarte a una versión más reciente de la norma te asegura la compatibilidad con las anteriores. Por lo tanto, algún interés hay aquí en que la legislación siga de cerca a la norma en este caso concreto. Pensando bien (desde el punto de vista de la GC, claro), yo supongo que simplemente se trata de un exceso de celo de la ICAE por asegurar "el máximo nivel de seguridad ciudadana", su mantra habitual para dificultar el acceso a las armas (en este caso, incrementando el gasto), aunque no haya hechos objetivos que requieran actualizar el nivel de seguridad de los armeros.
Y pensando mal, obviamente, el lobby de los fabricantes tiene seguramente que ver, presionando a la Administración para que desaparezca el mercado de segunda mano de armeros. Ese tipo de presiones de interés comercial se ve a todos los niveles de la Administración.