Mensajepor esteve270 » 21 May 2012 22:13
Volviendo al hilo daré mi opinión y aportaré mi grano de arena.
1.Lo legarizaria: si, Por que no?
2.Lo utilizaría: pues no es una repuesta que pudiese dar rápidamente. No lo sé.
Es como si me preguntas si irías con un .338 a los corzos. Pues no, no lo veo lógico ya que hay calibres ideales como .243, 270, 7mm, pero por supuesto es legal y legítimo el usarlo.
El calibre .22 lo he usado infinidad de veces y y he pelado algunos cañones.
De edad más joven, lo utilizaba con el guarda de la finca de al lado. Aquellos guardas uniformados con la placa y el sombrero, aquellos guardas jurados.
En la época de descaste a conejos, cuando se mataban por cientos, tirábamos desde unos riscos a la hora del yerbeo.
El conejo aunque parezca débil, con munición standart, ya no digo con la de alta, los pasa limpios, ni se enteran en el momento, si no los coges en una zona vital, y le dan tiempo a entrar en la madriguera o los majanos, con lo que los pierdes. Para que sea efectivo, a la cabeza, y no es tan facil. Es una bala, muy susceptible al aire, y hay que tirar bien si no quieres dejar más de la mitad de las piezas perdidas, y eso la verdad, a mi particularmente no me gusta nada.
Los zorros, no sé él porque acusan mejor los tiros mal colocados, pero aún así hay que afinar. Recuerdo que los tejones y los gatos monteses eran más duros.
3.Como lo utilizaría. Yo concretamente solo o con alguien de confianza, quietecito y sin moverse. No me gustaría gente andando con una carabina pegando tiros a todo lo que se mueva. Ya sabemos todos la rasante que tiene y la facilidad para el rebote en los tiros con ángulos muy abiertos. Se deforman y cambian la trayectoria en un verbo. Esa es la parte que más me preocupa.
Además creo que es un muy buen inicio para nuestros hijos antes del manejo de los rifles para montería o recechos . Les hacen afinar y coger bastante puntería, y de paso a nosotros también. Ya que como dice el dicho, blanco pequeño, error pequeño.
4.Donde lo utilizaría. Pues esta es más aún difícil. Hay que ser conscientes del peligro en zonas llanas, y en campiña. Hay que jugar con los sobreniveles y zonas apretadas, como siempre procurando enterrar los tiros.
Así que procuremos ser conscientes y si tenemos la oportunidad de que se legalicen debemos demostrar a los cabezas cuadradas de los políticos, que un cazador no es ningún negligente y que la mayoría somos responsables y sabemos lo que hacemos.
Que ya esta bien de que nos catalogen cada dos por tres.
Saludos