Sigo el hilo tras haber sido "reflotado", en su dia me lo perdi
, lastima pues es de sumo interès.
JotaErre escribió:Por cierto, y retomando el tema del "Bismark", yo creo que, independientemente de los defectos o virtudes del barco, uno de los problemas que tuvo la Kriegsmarine en toda la 2ª Guerra Mundial fue la falta de audacia, inducida por el miedo cerval que le daba a Hitler perder un "capital ship" (curioso, le preocupaba muchísimo perder un acorazado mientras sacrificaba alegremente cientos de miles de soldados...). Eso llevó a que los almirantes se atuvieran a rajatabla a las instrucciones recibidas de no arriesgar sus barcos. Ese es uno de los motivos por el que Lutjens no quiso perseguir y rematar al "Prince of Wales", al que, con el mar y viento que había, no hubiera podido salvar su (ligeramente) superior velocidad, pues no podía desarrollarla con esas olas. Sus instrucciones eran evitar el combate si era posible.
Desde el momento en el que los barcos alemanes fueron descubiertos, la misión de atacar el tráfico mercante británico había fracasado, pues los británicos mantendrían en puerto los convoyes que aún no habían zarpado y ordenarían volver a los que ya lo habían hecho. En cambio, hundir dos acorazados británicos y volver a puerto, aunque no cambiaba la situación estratégica (pues la Royal Navy hubiera seguido teniendo una gran superioridad en acorazados), habría supuesto una victoria moral y propagandística enorme para el Tercer Reich.
También falló la audacia en el planteamiento de la operación: la idea era un ataque simultáneo, "Bismark" y "Prinz Eugen" por el norte y "Scharnhorst" y "Gneiseneau" por el sur. Si una de las dos divisiones era descubierta, los británicos mandarían tras ella a todo lo que pudiera flotar, y la otra división podría escabullirse y caer sobre los mercantes. Pero los ataques de la RAF sobre el "Scharnhorst" y el "Gneiseneau" en Brest hicieron que ambos estuvieran dañados.
Sin embargo, yo creo que, de haber salido a navegar, incluso ligeramente dañados, podrían haber cumplido su misión, dado que prácticamente toda la Royal Navy se lanzó contra el "Bismark". Es más, incluso podrían haber enviado en vez de el "Scharnhorst" y el "Gneisenau" a los dos acorazados de bolsillo que les quedaban, que habían demostrado ser muy eficientes como buques corsarios.
Una operación de la Kriegsmarine con todos los buques disponibles (los tres acorazados, los dos acorazados de bolsillo y los cruceros) combinados con los submarinos, bien podría haber conseguido aislar a Gran Bretaña durante varias semanas... no se necesitaba más para acabar la guerra. Pero el alto mando alemán no se atrevió.
En cambio, almirantes como Nelson o Togo tenían claro que "no se consigue nada grande sin correr grandes riesgos".
Nunca hay que olvidar el factor humano, el capitan de un barco tiene muy claro que si el barco se hunde él, y la tripulación, se hunden con él, sin obviar las bajas causadas por el combate y lo caras que són las naves y/o su reparacion.
En los relatos, pocos, que he leido, las batallas navales se han caracterizado mas por la actitud defensiva que por la ofensiva, y la ofensiva requiere de una coordinación y osadia poco frecuentes aun estando clara la victoria.