Mensajepor KeisiMekaigo » 04 Abr 2020 00:31
Por poner un ejemplo, comparando lo que dicen algunas normativas autonómicas:
1º) Castilla y Leon:
Artículo 30. Armas, dispositivos auxiliares, municiones y calibres.1. Se permite el ejercicio de la caza en Castilla y León con las armas legales con las siguientes excepciones [... ]
c) Armas de fuego largas rayadas de calibre 5,6 milímetros (.22 americano) de percusión anular.
Lo dice claro. No hay duda alguna.
2º) Castilla La Mancha:
Artículo 26. Medios prohibidos de caza y de control de poblaciones.Con carácter general queda prohibido el uso de los siguientes medios de caza y de control de poblaciones:
[...]
c) Las armas semiautomáticas cuyo cargador pueda contener más de dos cartuchos, las de aire comprimido, las de calibre 22 y de calibre inferior con las excepciones que se establezcan reglamentariamente....
Lo que dice la Ley es que "calibre 22" (Y ahí entran todos, porque no se dice lo contrario, todos los 22, porque 22 son el 22-250, el .222, etc,...) están prohibidos. Entrando en interpretaciones, se podría llegar hasta el TS.
3º) Aragón: (Ninguna mención específica, ni al calibre 22, ni a percusión anular)
Artículo 42. De las armas, municiones, calibres y dispositivos auxiliares.1. Quedan prohibidos los siguientes tipos de armas en el ejercicio de la caza:
[...]
e)Aquellas cuyo uso esté prohibido conforme a la normativa vigente.
2. Quedan prohibidos los siguientes tipos de municiones en el ejercicio de la caza:
[...¡
b)Otras municiones que, por orden del consejero competente en materia de caza, se establezcan.
No dice ni que sí ni que no, y además, deja al capricho del consejero de turno, prohibir lo que le parezca, cuando le parezca, sin más procedimiento que una orden de la consejeria competente.
Y así podríamos repasar y comparar las 17 legislaciones autonómicas que padecemos y sufrimos.
Lamentablemente, cada vez tenemos más majaderos legislando a todos los niveles y que ni remotamente tienen repajolera idea del tema sobre el que legislan. La consecuencia es que se legisla diarreicamente, con leyes que no están nada claras, ni son precisas, y que crean inseguridad jurídica y conflictos judiciales y administrativos constantes.
Un saludo.